ੈ✩‧₊𝗡𝗜𝗚𝗛𝗧𝗦𝗧𝗔𝗥┃❛SOLO SE NECESITA UNA ESTRELLA PARA ILUMINAR EL CIELO.❜
Ser mitad terrícola y mitad alienígena no es nada fácil, solo vean a Mar'i Grayson. Su aventura contiene tragedias, luchas y desilusiones, pero t...
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—¡¿Qué te pasó a ti?! —Mary corrió hacía su padre, ayudándolo a entrar.
Lo ayudó a sentarse en el sofá, cerrando la ventana con cuidado de no despertar a sus vecinos.
—Oye...
—¡Iré por el botiquín! —corrió por el pasillo hasta el baño.
Cuando regresó se sentó al lado de él, comenzando a preparar un algodón con alcohol.
—Starshine, no te preocupes —atrapó la mano temblorosa de Mary, viendo que comenzaba a voltear el alcohol—. Solo son heridas superficiales...
—Solo son heridas —repitió Mary por lo bajo con fastidio—. ¡Tienes una herida al lado del ojo! ¡¿Qué hubiera pasado si te daban en el ojos?!
—Sería un enano con un parche —soltó en broma, pero la mirada amenazante de su hija le cerró la boca.
—Vulve a bromear en una situación así y te echo de la casa —lo amenazó con sus ojos casi en llamas.
Dick se tiró contra el respaldo, queriendo alejarse lo más posible de la mirada asesina de su hija. Era igual que Kory.
—Es un departamento —bufó como niño pequeño, mirando a otro lado—. ¡Au! —se quejó cuando Mary le pasó el algodón por arriba de la herida de la mejilla—. Soy tu padre, trátame con respeto —quiso parecer amenazante, pero Mary presionó la herida con su mirada mortal y Dick volvió a quejarse—. ¡Au, basta!
Luego de haber curado las heridas de su padre, Mary comenzó con el interrogatorio, mientras Dick estaba desplomado en el sofá con cansancio.
—¿Quién te hizo eso? —se cruzó de brazos.
Dick soltó un suspiro.
—El hijo de Slade —cerró los ojos con la cabeza sobre el respaldo y tirandola hacía atrás—. Ese chico sabe cómo luchar.
Mary pareció enojada.
—¿Por qué no me llamaste? —lo miró con reproche—. Hubiera ido a ayudarte, tu cuerpo es el de un anciano.
—¡Oye! —Dick abrió los ojos y la miró ofendido—. A penas tengo treinta y cinco.
—¡Ese no es el punto! —soltó enojada—. Tu nos enseñaste a pedir refuerzos si estábamos en problemas, tu no me llamaste...
—Intenté llamar a alguien, pero no podía, ¿por qué? ¡Oh, porque ese chico quería mí cabeza! —exclamó Dick—. Perdón por no poder llamarte, de igual manera no te hubiera llamado a ti.
Mary retuvo el aire ofendida.
—¿A qué te refieres con eso?
—No te iba a poner en una situación así de peligrosa, no son cualquier persona, Starshine —explicó—. Esos tipos no dudarán en asesinarte si tienen la oportunidad.
