ੈ✩‧₊𝗡𝗜𝗚𝗛𝗧𝗦𝗧𝗔𝗥┃❛SOLO SE NECESITA UNA ESTRELLA PARA ILUMINAR EL CIELO.❜
Ser mitad terrícola y mitad alienígena no es nada fácil, solo vean a Mar'i Grayson. Su aventura contiene tragedias, luchas y desilusiones, pero t...
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Mary había permanecido en el auto, esperando a que Alfred volviera de hacer las últimas compras. En pocos días regresaría a Blüdhaven con su padre y eso significaba el regreso a clases, visitar a su abuelo en vacaciones fue bueno. Su padre últimamente solo tenía tiempo para su trabajo como policía de día y Nightwing de noche.
Sacó uno de los caramelos que tenía en la pequeña bolsa y los metió a su boca, aburrida de tanto esperar, apoyó su cabeza contra el cristal de la ventana.
«¿Por qué Gotham es tan triste?»
Aquella pregunta inundó en su mente cuando miró hacía el cielo nocturno tenía algunas nubes grises, siempre parecía que iba a llover, aunque aveces lloviznaba un poco de noche.
Y fue entonces, cuando una fuerte sacudida y unos gritos la sacaron de su aburrimiento. Se arrodilló en el asiento y volteó a ver hacía la ventana de atrás, la gente parecía huir de lo que parecía ser una joyería antigua. Intentó observar más allá de las personas que corrían y se alejaban del sitio. Una criatura de roca y extraños símbolos de energía rosada, destruía aquella joyería.
-No creo que puedan con eso -murmuró, escuchando las sirenas de la policía de fondo. Eso significaba que Barbara y su escuadrón aparecerían en cualquier momento, pero esa cosa no era humana o mucho menos algo frágil.
Salió del vehículo, mirando a todas partes, buscando a Alfred. Debía suponer que estaba luchando contra las personas que corrían despavoridas por las calles y los negocios, hasta pudo ver qué algunos aprovechaban para robar algunas cosas.
La policía no tardó en llegar, cinco patrullas, pero una de ellas fue detenida por el grandulón de roca, que con un golpe en el capó lo mandó a volar unos metros más allá. Los demás policías bajaron de sus patrullas, entre ellos Barbara Gordon, y comenzaron a dispararle.
Enfadado por las balas que rebotaban en su cuerpo rocoso, dio un golpe al suelo y partió la calle a la mitad, haciendo que todos los que estaban cerca tambalearan por la fuerte sacudida.
«¿Pero qué...?»
Mary observó como el cielo se iluminaba con un rayo blanco. Todos se habían olvidado de la bestia de roca por ese instante, incluso desde la Mansión Wayne, Bruce observó a través de las cortinas la luz que alumbró a Gotham por unos breves segundos.
Lo que dedujo cómo una nave espacial, pasó sobre la ciudad a una velocidad normal, había entrado a la atmósfera como un rayo pero su velocidad redujo al estar arriba de la ciudad. Mary alcanzó a ver cómo alguien se lanzaba de aquella nave, que ahora permanecía suspendida en el aire, como si no quisiera aterrizar o estuviera esperando a alguien. Tal vez a quien sea que se haya lanzado de esa nave.
Incluso la bestia rocosa observaba la nave que había aparecido repentinamente. Una luz entre rosada y violeta bajaba a toda velocidad hacia ellos, como si fuera un meteorito.
