Habían sido dos almas perdidas que se encontraron en una tormenta. Desde el momento que se conocieron ambos sintieron que eran todo lo que alguna vez habían buscado. Ese amor que llega de improviso, con fuerza, barriéndolo todo como si fuera el paso de un huracán. Habían creado su pequeño mundo en el que sólo vivían ellos dos. Y no necesitaban a nada ni a nadie. Se amaban a veces hasta la desesperación haciéndolo como si fuera el último día que fueran a pasar juntos.
Hasta el día de hoy.
No iba a llorar no. No iba a hacerlo. Pero cuando en todo Internet, redes sociales, televisión... lo único que repiten una y otra vez es el mismo vídeo, resultaba muy difícil aguantarse las lágrimas.
- ¡No puedo creer que lo haya hecho! -la castaña de pelo claro miró a su amiga con la cara desencajada sin quitarle la vista de encima al televisor- ¿porqué? ¿porqué lo ha hecho Naroa?
- No lo sé -dijo ella apretando los labios nerviosa y sintió como las primeras lágrimas se deslizaban por sus mejillas.
- Esto tiene que tener una explicación. No puede decirte que te quiere y hacer eso... -la castaña señaló con su mano la televisión con gestos despectivos.
- Pues no quiero sus explicaciones. ¿Es evidente, no? Solo he sido un juego para él.
Naroa miró de nuevo las imágenes. Allí estaba él rodilla en tierra, alargando su brazo para ponerle el anillo a la que ahora era su prometida. El estadio Metropolitano testigo de este momento. Todo perfectamente orquestado, las cámaras, el sonido, el ambiente, la iluminación...y el corazón de ella rompiéndose a trocitos cada vez más pequeños los cuales serían imposible de volver a pegar.
Él, el que le repitió hasta la saciedad que la quería como nunca había querido a nadie en la vida, quien la cuidó y la protegió de todo y de todos, quien le prometió que jamás le haría daño...acababa de hacerlo. Había roto su promesa y eso era imperdonable.
¿Cómo perdonas que el amor de tu vida le pida matrimonio a otra mientras millones de personas en todo el mundo reviven ese momento una y otra vez?
No, no puedes perdonarlo ¿o si?
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*** He decidido volver a editar ésta historia para repasarle la ortografía y la gramática. La esencia será la misma y no cambiaré el argumento.
Me hace mucha ilusión escribir sobre Kepa porque hasta ahora no lo había mencionado mucho en ninguna de mis historias, y digo, todavía.
Esta historia será contada casi siempre desde el punto de vista de Naroa y cuando no sea así os lo iré indicando.
Os recuerdo que en mis historias hay contenido adulto con mucha frecuencia. No tengo necesidad de advertir que en cada capítulo va a haber una escena Hot porque los que me leéis ya sabéis que yo escribo sexo explícito. No quiero que nadie se ofenda ni nada. Pero es lo que yo escribo.
Y esto es como las lentejas, si quieres lo lees y sino lo dejas. Me importa la opinión de todo el mundo pero no por eso voy a dejar de escribir como a mi me gusta. Porque entonces no sería yo.
Y sin más, espero que os guste y que disfrutéis esta historia.
Muchos besos y abrazos como siempre ***
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Eres mi rincón perdido
Lãng mạnKepa y Naroa. Lugar equivocado. Momento perfecto. Cuando ambos se encuentren, el corazón será el que mande y el destino quien los una. Una fiesta exclusiva. Nadie debe saberlo. Todos se conocen, nadie te juzga. ¿Y ellos que harán? ¿Jugarán a quere...