28. La Fantasia De Kepa

2K 124 40
                                    

📅 MÁS TARDE

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

📅 MÁS TARDE

- Eres tan guapa Naroa. Ay, lo que te quiero joder.

Kepa se acerca a mi dándome un sonoro beso en las mejillas mientras entrelaza sus manos con las mías. Lo miro y no puedo evitar reírme. Tiene el pelo alborotado y las mejillas muy sonrosadas. Está algo achispado y lo veo tan mono que me muero. Yo si que lo quiero.

Son casi las tres de la mañana y hemos decidido ir andando hasta su casa. Aunque creo que vamos a tardar más en llegar porque el petardo este no deja de pararse cada vez que le da la gana y llenarme la cara de besos.

- Eres lo más bonito que he visto en mi vida.

Kepa pone su mano en mis mofletes de nuevo y les da un pequeño tirón. Me cojo de su brazo y tiro para que ande pero él me agarra y acabo abrazándolo.

- ¿Cuando vas a ponerte el vestido azul que llevabas en la fiesta donde nos conocimos?

Kepa me agarra de la cintura y sus labios descienden hasta mi cuello dejando lentos besos que hacen que mi piel se erice.

- ¿Para que quieres que me ponga ese vestido?

- ¡Pues para poder hacerte el amor con el! ¿Para que va a ser? Haces unas preguntas muy tontas, amor. 

Los labios de Kepa están sobre los míos y me empieza a besar muy lento haciendo que su lengua acaricie la mía de una manera muy sensual. Sus manos descienden por la parte delantera de mi cuerpo apretándome los pechos por encima del abrigo.

- Quería follarte en aquel armario Naroa - abro mis ojos sorprendida mientras sus manos siguen bajando y se posan en mi trasero dándome un buen magreo en toda regla- es una de mis fantasías amor.

- ¿Hacerlo en un armario? - alzo una de mis cejas mientras veo como él mira por encima de mi riéndose.

- O donde sea. Ven conmigo.

Kepa se separa de mi y agarra una de mis manos tirando de ellas para caminar por un pequeño sendero que hay al lado del camino por donde vamos.

- ¡Pero donde me llevas!

Kepa sigue tirando de mi hasta llegar a una especie de granero. Nos acercamos y él tira de la puerta de madera abriéndola.

- Kepa.

- No hagas ruido y entra bonita mía.

Me dejo llevar por él sin saber muy bien donde estamos. Es un granero pequeño lleno de paja en cada esquina. Él cierra la puerta y sólo la luz de la luna que se cuela por una de las ventanas ilumina el lugar. Las manos de Kepa van a mi cintura y sus labios besan mi cuello produciéndome miles de cosquillas.

- Tengo una fantasía erótica Naroa

- ¿Otra?

- Si. Otra. Contigo tengo muchas. Quiero follarte aquí, en el granero del Señor Joaquín.

Eres mi rincón perdidoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora