El flash se encendía una y otra vez, foto tras foto. Lee Donghae estaba de pie con un traje rojo cereza y una camiseta blanca de cuello alto, haciendo que su cabello, ahora de color gris, resaltará aún más. Su hermoso y estoico rostro no mostraba ninguna emoción tal como el fotógrafo se lo pidió, enlazando la mirada triste y melancólica que tenía por naturaleza. La nariz recta, los labios delgados, la línea de la mandíbula que se marca con ligereza, los pómulos apenas perceptibles en su rostro.
Al terminar la sesión fue a cambiarse, el ahora peligrisaceo solo llevaba un pantalón deportivo y una camiseta que fue de Hyukjae, la cual le quedaba un poco ajustada. Eran casi de la misma talla, la diferencia estaba en que su novio era de constitución más delgada. Aún traía el maquillaje en el rostro y su cabello peinado cuidadosamente.
Tomo su maleta de lona dirigiéndose a la salida, en el pasillo Seo-Jung lo alcanzo, la chica iba sonriente y con muy buen ánimo. El cabello color miel se movía de un lado a otro atado en una coleta, su ropa ajustada y colorida atraían la mirada. No le caía mal su nueva manager pero se acostumbro a la actitud amable y tranquila de Yoohyeon, solía comportarse más discreta, le gustaba eso.
—Conseguí un par de boletos para una obra de teatro, él fantasma de la opera. Tiene muy buenas reseñas además de que el actor principal canta como los ángeles ¿Le gustaría ir?—Pregunta la chica sonriendo con dulzura. Donghae no la voltea a ver, solo la escucha con atención, gira al final del pasillo en dirección a los elevadores cuando de pronto Yoohyeon aparece frente a el de la nada.
—¡Te teñiste el cabello! ¿¡Sin decírmelo?!—La peligrisacea luce realmente indignada, se lleva una mano al pecho, hay un puchero en sus labios.
—Yo...—El más joven esta confuso, se supone que estaba de vacaciones ¿Por qué había ido? No es que le moleste pero había aparecido de la nada.
—Yo se lo sugerí, le dije que desde un principio debió de teñirlo gris platinado en lugar de rubio. Es un color tan...usado.—Seo-Jung interviene en la conversación, sonríe ampliamente hacia la otra chica quien parece aún más herida.
—Me voy por un par de días y ya sigues concejos de esta principiante.— La voz indignada de Yoohyeon se alzó, haciendo que la gente volteara curiosa. Donghae seguía perdido, sabía que para su manager era importante que el siguiera sus indicaciones, que la tomara en cuenta además de que se encargaba de su imagen, en mutuo acuerdo pero aun así era como una guía. Pero él consideraba que ahora que ella estaba de vacaciones podía confiar en Seo-Jung ¿No?
—Llevo dos años siendo manager, tengo bastante experiencia.—Se defiende la chica, cruzándose de brazos.
—Llevo casi una década en este negocio ¿Acaso le dijiste a Donghae que aplicar otro tinte podría dañar su cuero cabelludo? ¿Qué tendría que estar en tratamientos por el maltrato? O ¿Qué ya no podría retocarlo porque le lastimaría? Así que iba a teñirlo de castaño o de negro siendo aún peor. Ni siquiera te tomaste el tiempo de ver eso, solo te guiarte por el como se vería.—Alza el dedo y la señala de forma acusatoria.
—La empresa y sus estilistas...
—Donghae es modelo independiente boba, no hay empresa tras el, por ello firma contratos y los leo yo, porque no hay una empresa que los maneje.—Reclama Yoohyeon con desesperación, Hyukjae le dijo que la chica hacia todo bien, no sabe de donde saco esa tonta idea.
—Mi cabello ¿Se va a caer?— Pregunta Donghae con la preocupación en su rostro, alza sus manos y con los dedos roza las hebras plateadas. Ahora entendía porque a pesar de tener raíces Yoohyeon no lo había enviado a retocarlas, quería que creciera lo suficiente para después recortarlo y oscurecerlo, ahora...
—No sabia...—Seo-Jung da un paso en dirección al más joven pero el se aparta, la ve horrorizado. Hay un puchero en sus delgados labios, sus ojos castaños están brillantes, parecen dos dagas letales.
—Estas despedida.—Dice Donghae con voz fuerte y clara, se cruza de brazos y aparta la mirada en espera de que la chica se vaya. Ve a Yoohyeon con rabia pero esta sonríe.
—Esto se verá mal en tu curriculum.—Le dedica un guiño antes de verla irse apresuradamente. No se refiere a ser despedida, era común para los managers, había estrellas bastantes exigentes. Pero que fuera descuidada en la salud y el aspecto de un artista, de un modelo.
—Yoo...—La llama con las mejillas enrojecidos, la peligrisacea corre y lo abraza.
—No puedo confiar en las recomendaciones de las agencias, tendré que hacer las entrevistas yo misma para encontrar alguien adecuado para ti. Te cuidarán bien lo prometo. —Le da suaves palmadas en los hombros. Suspiro resignada.
Como se le ocurrió teñirle el cabello sin revisar las notas o el expediente. Los modelos eran cuidados y guiados por sus agentes o managers, era lo mismo. Eran adultos, si. Pero ellos se preocupaban por su vida personal y cumplir con su trabajo, mientras el deber de un manager era buscarles oportunidades y hacerlos encajar en estas.
—Vamos, Hyukjae dijo que saliendo de la universidad te llevaría por un helado. Que incluso te compraría el de menta con chocolate.—Se aparta y le sonríe. Yoohyeon no es tonta, un poco despistada quizá pero sabía que el novio de Donghae la mandó a hacer la escena de celos y deshacerse de Seo-Jung por el, iba a averiguar como estaban las cosas y recalcar que ella era mejor pero cuando vio al ex rubio con un tinte nuevo. El contrato que habían firmado para esa sesión dejaba muy claro que al modelo no se le exigía ninguna característica extra más que las que venían en cláusulas. No había necesidad de teñirle el cabello.
—¿Podemos comer hamburguesas con aguacate?—Pregunta como un niño pequeño pidiendo dulces.
—Claro, estoy seguro de que Hyukjae te querrá consentir mucho.—Dice con tono sugerente pero el peligrisaceo no lo nota, no importa, ya se daría cuenta él cuando abra la puerta de su habitación. Su novio le tenía una grata sorpresa, una muy...dulce.
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My boyfriend is a Pretty Boy
FanfictionHyukjae sale con un chico hermoso y perfecto, solo que tiene un pequeño detalle. Se hace lo que el dice, sí o sí.