Tu y Yo y todo lo que vino después...

43 - Hogar

Home sweet home...

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Otra vez más el coche de Luisita estaba lleno de cosas, bolsas, cajas, maletas, tres mantas de bebe que Benigna había hecho durante su estancia en el hospital, una caja con las ropitas que Marisol mandaba todos los meses, tuppers de comida para dos días hasta que estuviesen debidamente instaladas. Manolita las acompaño para ayudarlas arreglar la casa y de paso limpiar un poco, para que Amelia no tuviese que hacerlo ella.

Al llegar al edificio subieron todas las cosas hasta el hall de su apartamento y Manolita se quedó atrás cuando abrieron por primera vez su propria casa. Amelia se emocionó como ya era de costumbre y Luisita besó su cabeza también emocionada.

Dentro del departamento María, Nacho y los padres de la rubia habían dejado todo en su debido lugar, Marcelino compró un televisor de tela plana con una etiqueta al lado, garantizando una mejor exhibición de partidos de futbol, las plantas de Luisita en el balcón estaba todas verdes y vivas, la cocina no tenía mucha equipaje porque Luisita quería hacerse cargo ella misma, el sofá que Amelia había elegido por internet estaba en un ángulo perfecto para recibir la luz del sol y la alfombra que María les había regalado de su visita a Valencia ocupaba grande parte del salón. Las paredes recién pintadas eran de un blanco cálido y una en tonos de amarillo.

-Muchas gracias mamá. – Luisita se abrazó a su madre y Amelia se unió a ellas.

-De nada mis niñas. Pero anda, a ver si la cama es la correcta, porque es que no me fío de comprar muebles por internet.

Fueron hasta la habitación principal y la cama era perfectamente lo que Amelia había dicho a Luisita. Grande y confortable y ya estaba perfectamente arreglada con las almohadas, las sábanas. La cuna portable también había llegado, pero estaba en la caja en una esquina. Luisita se fue al salón y volvió con el televisor de su cuarto en Barcelona, para ponerlo en el soporte sobre el tocador.

-El servicio de internet y TV viene en el lunes, hasta allí veremos "How I met Your Mother" en DVD. – Amelia sacó todas las temporadas de su mochila.

Las cajas de ropa estaban en el closet y a ellas se unieron las maletas de las dos. Luisita plugo el cargador en el enchufe a su lado de la cama y Amelia hizo lo mismo con el suyo, dejando junto con el su libro sobre embarazos y bebés. Manolita llevo las cajas de las cosas del bebé al cuarto que sería de él y Amelia fue detrás.

El corazón de la morena empezó a latir deprisa cuando abrió la puerta, las paredes tenían un tono de verde muy suave en la parte baja y blanco en la mitad superior.

-Ese detalle es de María. – Manolita enseño que la puerta de madera clarita estaba adornada con una cometa con el nombre "Álex" atado a la cola.

Amelia pasó los dedos con parsimonia sobre las letras que formaban el nombre de su hijo. – Anda que tu tía es una mimosa. – Habló para la panza en un intento de bromear y olvidar de llorar.

-Que miran? – Luisita venía cargada con una caja que estaba en el salón, llena de las cosas que habían ganado en Barcelona. Llegando hasta las dos mujeres y también miro embobada al nombre de su bebé. – María? – Manolita asintió.

Algo cerca de las 6 de la tarde terminaron de arreglar el principal del apartamento, Luisita fue con Manolita al centro comercial y compró platos, vasos, un juego de cuchillería, ollas, cuencos y otras mil cosas de cocina. Un juego de toallas de superhéroe, una para ella, una para Amelia y una para Álex, con gorrito incluido. Y cuando la puso en el coche de compra se dio cuenta de que era la primera cosa que compraba, ella sola, a su hijo. Le pareció poco, entonces juntó a eso un juego de pañales de tela con dibujos variados, un traqueteo de unicornio y un paquete de pañales tamaño RN.