Cursed; Draco Malfoy |Traducción|

Ninety-Five

Este capítulo contiene menciones de abuso, sangre y violación, junto con trauma emocional. Por favor lea con precaución.

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-No lucharé por algo de lo que estás listo para alejarte.-

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A Draco le tomó unos momentos, minutos para ser exactos. Segundos largos y dolorosos mientras pasaban muy lentamente, y vio al chico del que salvó a Amelie, la persona que le robó todo lo que alguna vez fue, dar un paso para pararse a su lado.

-No ...-Él, por fin, respiró, sacudiendo la cabeza y tratando con cada hueso de su cuerpo de no ceder a la rabia ardiente que se intensificaba. -Esto no está sucediendo. Él está muerto.-

Amelie se tragó el doloroso nudo que le dolía en la parte posterior de la garganta, casi desmayándose allí mismo y luego por la mirada de Malfoy perdiendo la cabeza. -Draco, es él.-

-¿Poción multijugos?. -Siseó el rubio, su pecho se elevó y cayó con fuerza. -¿Es este un maldito truco para liberarme del Señor Oscuro porque esto no es gracioso, Amelie? Esto no es ...-

-Oh, ¿así que esta es tu manera de decir que no me extrañaste?. -Adrian sonrió de manera provocadora. El rizo burlón en sus labios hizo que Draco se tensara. -Mi voz no cambiaría por la poción multijugos.-

Le había dicho a Amelie antes de que cruzaran las puertas que tenía que ser despiadado. Adrian no pudo contener sus insultos y la forma en que pretendía hablar de ella en su presencia. Era Adrian, desafiando a Draco hasta un punto en el que lo perdería, o era Teddy probando otra semana de su método.

Había hecho esto antes. Sabía que funcionaría, e incluso si ella supiera que él disfrutaba haciendo esto, incluso si entendía que esto no solo estaba salvando a Draco, Adrian, sino que también era él obteniendo su venganza por Malfoy alejándola de él, todavía lo dejaba hacer eso.

Amelie necesitaba a Draco de vuelta.

No podría soportar respirar el aire si Malfoy no fuera con quien lo compartiría, así que permitió que Adrian llegara tan lejos como creyera apropiado.

-Joder... -gruñó Malfoy. -, no te atrevas a pararte a su lado. Aléjate de ella ahora mismo.-

Las lágrimas asomaron a sus ojos porque él no la miró. Nunca había estado tan decepcionado con Amelie como ahora. -Draco, por favor ... -suplicó, pero sin suerte.

-Bueno, maldita sea ... -Rodeando los hombros, Draco se agarró a los apoyabrazos de su silla. -Déjame salir, Amelie.-

Ambos chicos se miraron el uno al otro desde la distancia, estrechando el bosque en el hielo, y nunca había sido una poción más mortal.

-No puedo hacer eso. -susurró, y ahora era ella la que miraba hacia otro lado. Ella sintió tanta culpa. Ella no quería hacerle pasar por esto. Ni una sola vez quiso derramar el recuerdo de lo que Adrian les hizo, sobre él de nuevo. -Él está aquí para ayudarnos.-

-Déjame suelto, Amelie. -Demandó Malfoy, con tanta frialdad que la sacudió. -Déjame salir de estas cadenas para que pueda matar a ese jodido...-

-¿Este jodido qué?. -Aún burlándose de él, Adrian sonrió. -¿La razón por la que no eres un cadáver ensangrentado en el fondo del océano?.-

-Amelie, déjame suelto.-

-Draco...-

-¡Ahora mismo, maldita sea!. -Gritó, tan fuerte que sacudió la habitación. -Aléjate de ella.-