Fifty-Seven

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Este capítulo contiene escenas de muerte, abuso y acciones violentas. Por favor lea con precaución.

-¿Dónde esta ella?.-

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Amelie Avery.

-Maldita bruja ingrata, ¿Cuánto tiempo hace que tienes esto?.-

Estaba hojeando las páginas, viendo todo lo que Draco le había estado escribiendo, y justo cuando sus labios se abrieron para hablar, Adrian la abofeteó.

Su mejilla se puso roja y el rabillo de sus ojos se llenó de lágrimas.

-Te hice una pregunta. -declaró de nuevo, riendo oscuramente para sí mismo mientras leía lo que Draco había escrito. -Esto es solo...-

Él se echó a reír de ella, sonriendo diabólicamente cuando sintió que la humillación vacilaba en su interior. Incluso trató de quitarle la seguridad de ese diario.

-¿Es esto lo que has estado haciendo? ¿Leyendo esto?. -Adrian siguió presionándola, amenazándola continuamente con golpearla de nuevo. -¿Son esos diarios gemelos que los padres compran para sus hijos?. -Murmuró mientras lo estudiaba, pensativo. -Parece. -

-Ni siquiera puedes responder, ¿y qué? ¿Simplemente te escribe una y otra vez?. -Se burló, sacudiendo la cabeza por lo desesperado que parecía estar Draco. -Dios, desearía poder ver la expresión de su rostro cuando escribió esto.-

Las mandíbulas de Amelie se apretaron y apartó la mirada de él. Sus mejillas ardieron por la bofetada que acababa de recibir, y su pulso se tensó en toda ella.

Le dolía el pecho por esa imagen. Cuán desconsolado tenía que estar Draco para admitir que la amaba. Había vivido con ella durante semanas y no había dicho nada, pero ahora lo hizo.

-Es patético. Eso es lo que es. Malfoy nunca te encontrará aquí. -gruñó antes de arrojar el diario al otro lado de la habitación, haciéndolo golpear la pared con un fuerte golpe. -¿No crees que sé que estuvo aquí una vez? ¿Qué vino aquí buscándote?.-

Sus ojos se llenaron de lágrimas.

Amelie lo sabía. Lo hizo, pero también hizo todo lo posible para dejarlo fuera, para no pensar en ello.

-Pero él no pudo verte, ¿verdad?. -Él se rió de ella de nuevo. Estaba peligrosamente cerca de ella. -Es tan jodidamente trágico, ¿no?.-

La mano de Adrian se movió hacia su cabello y la arrastró hasta el final de la cama. Elevándola mientras su lengua rodaba sobre su labio inferior. -Contéstame.-

La cabeza de Amelie se sacudió, tratando de salvarse del áspero agarre que él tenía de ella. -Él me ama. -suspiró. -No es trágico.-

-Él me ama y yo lo amo ...-

El agarre de Adrian de su garganta se endureció intensamente. Apretando su piel con tanta fuerza que aprovechó cada oportunidad para respirar lejos de ella.

-Amor ...-Se burló. -¿Qué diablos es el amor de todos modos?. -

-Quizás una buena historia en un libro, pero déjame contarte un pequeño secreto, Amelie ... -Sus dedos rasparon sus manos. Todo su cuerpo estaba abrumado por el miedo. -El amor no existe.-

-¿Estás segura de que no dijo eso solo porque quería follarte?. -Adrian golpeó su espina dorsal contra el colchón, y se subió encima de ella, clavándola en las sábanas. -Querido, Amelie. ¿Cómo sabes siquiera que en realidad te está buscando?.-

Cursed; Draco Malfoy |Traducción|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora