Ninety-Two

321 33 46
                                    

Este capítulo contiene actos violentos, abuso, violación y mención a la muerte. Por favor lea con precaución.

---

-Por todos ellos.-

---

-Él estará bien, querida, lo prometo. -Narcissa colocó una mano en su espalda, acariciando la columna con suavidad. -Él está en casa ahora, y eso es todo lo que importa.-

Amelie asintió lentamente mientras miraba a la dama desde el borde de la cama, y ​​vaciló. Al darse cuenta de que lo más probable es que su madre se enterara de la prisión que había nivelado con el suelo y unió una y otra, deseaba hablar con ella al respecto, para ser honesta y sincera sobre lo que sucedió.

-Hice algo. -resopló Amelie, en silencio. -Después de encontrarlo, hice algo. Hice algo horrible, Narcissa y yo.-

Las lágrimas definieron el dobladillo de sus párpados. -Lastimo a la gente. Les hago daño...-

-Shhh ...-Narcissa tarareó, en voz baja y rodeó a la chica con los brazos, inclinándose para dejar que Amelie le devolviera el abrazo. -Leí el periódico esta mañana, lo sé. Sé que hiciste algo, pero no fue horrible, querida. Hiciste lo que tenías que hacer para sacarlos a ambos de allí.-

No pudo mantener su valor por mucho más tiempo. No tenía ni un ápice de valentía en este momento, y se derrumbó en los brazos de Narcissa. -Lo siento ...-

-No te arrepientas, Amelie ...-La señora la consoló, y supo lo poco familiar que estaba con el comportamiento que tenía en la prisión. Amelie era todo menos una persona violenta. 

-Hubieras muerto allí. Mi hijo hubiera muerto. Si no fuera por ti, haciendo lo que hiciste, te habrías quemado con eso. Estoy tan feliz de que hayas hecho lo que hiciste y de que hayas salido de allí.-

Su vista se desvaneció, su valentía se desvaneció, y ese tic-tac de oscuridad mientras le picaba en el pecho la inundó. -No todos nosotros.-

Pensando en las vidas que no pudo salvar, sus huesos se derrumbaron. -Vi que se perdieron vidas, pero Amelie... -Narcissa inclinó la cabeza de la chica hacia atrás, acariciando con el pulgar la piel drenada de Amelie. -Con la batalla viene el sacrificio. Nunca quisimos esto. Somos nosotros los que intentamos detenerlo ...-

Su mirada encapuchada huyó para ver a la única persona que le dio una pizca de paz mientras se acostaba en su cama. El pecho de Malfoy se agitó bruscamente por las secuelas de su magia.

-Lo sé ...-Susurró. -Sé que piensas eso, pero yo no... Perdí gente, Narcissa. Personas que eran importantes tanto para Teddy como para mí ... y Draco. Yo solo...-

-Tienes un corazón de cientos, ¿sabes?. -Murmuró Narcissa, estirando su columna y mirando por encima del cuerpo en reposo de su hijo. -Las acciones de todas las personas no son tuyas, Amelie. No puedes ser responsable de todos, al igual que él no puede. -Ella asintió con la cabeza hacia Drac. -Él lleva la conciencia del mundo y tal como le dijiste cuando necesitaba escucharlo, te lo estoy diciendo, que no puedes salvar a todos.-

Estirándose hacia adelante, Amelie dejó que sus dedos acariciaran el brazo de Malfoy. -¿Crees que me perdonará?. -Dijo, casi inaudible y las lágrimas en sus ojos la dejaron estar. -¿Por hacer todo esto? ¿Por crear este lío?.-

-Creo que se sentirá culpable por ello. Después de todo, era su plan, y creo que hará que sea culpa tuya. No le gusta que te pongas en peligro, Amelie ...-

Cursed; Draco Malfoy |Traducción|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora