Capítulo 54

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Zaid se levantó porque su lobo lo estaba llamando a gritos, cuando abrió los ojos se dio cuenta que Ainhoa, se había convertido.

Inmediatamente se convirtió en su hombre lobo, ahí fue cuando la niña descubrió quien era su papá.

Romina se levantó para ver la escena más hermosas de todas, ahí estaba su hija ya convertida en una pequeña lobo con un pelaje blanco y negro, idéntico al de su padre.

Abrazo a sus dos lobos —los amo tanto a los dos—

La pequeña Nhoa volvió a convertirse en humana para ver a Zaid— ¿así que tú eres mi papá?— él regreso a su forma humana y cargo a su hija.

—Lo soy Nhoa— acariciandole el cabello— mi pequeña, la verdad tienes un papá muy cool — le guiño el ojo, la niña negó divertida.

—El tío Elian es cool, Mateo es cool, tengo mis dudas contigo papá— rodando los ojos, sin alcanzar a comprender la dimensión de lo que acababa de decir, le había llamado papá a Zaid, él la abrazo más.

—¿Cómo que no?— la empezó a llenar de cosquillas, haciendo que la pequeña se riera a carcajadas—Un segundo, ¿Cómo qué Mateo es cool?— alzó la ceja, sacando su lado celoso.

—Mateo es el amor platónico de Ainhoa— divertida Romina, creyendo que se trataba de cosas de niños, la Ainhoa se sonrojó.

—Es mi crush— le aclaro con la cabeza ya volada en el ángel, hasta su nueva amiga loba se emocionó con eso, se carcajeó un poco— aunque será mi esposo algún día — aseguró con una confianza y una sonrisa marca Weisz, confianza y sonrisa que el mismo Zaid conocía, tragó en seco.

—No pensaré en matar a Mateo, por el momento— la abrazo más— eres mi mini muñequita, La Niña pequeña de papá—

—Si papá, está bien— más tranquila La Niña, pues tenía a sus dos padres con ella. Nada podía arruinar este Perfecto momento familiar.

—No es tan infantil, Ainhoa ha madurado mucho— le dijo Romina una vez que La Niña se volvió a dormir. Ya había recuperado su magia, tardó unas horas.

—La mini muñequita, es tan lista como tú, ya me dijo papá — emocionado Zaid, abrazando a su mujer.

—Son más parecidos de lo que crees— le dijo Romina antes de empezar a hacer  un plan.

—¿Estas pensando lo mismo que yo?— pregunto Zaid mientras terminaba de evaluar la magia interna de su hija — ya tiene sus niveles de magia restablecidos, lo que significa que el agua tiene algo.—

—No solo eso, el ser que está en mi interior me conduce siempre ahí, quiero creer que fue un enemigo del rey, porque su vibra se vuelve más hostil cerca de él—dijo Romina tomando una manzana roja.

—Logre tomar algunos libros de la biblioteca personal del Rey, sobretodo quise saber más de las raíces del pueblo, pero —quitándole la manzana roja y mordiéndola —que causalidad que existió una familia de aquí, los Porttman cuyo único hijo huyó del pueblo cuando era adolescente y se llamaba Charles Porttman—con nostalgia viendo a su hija dormida, la cual su magia era de la misma naturaleza que la de su abuelo.

—Tú abuelo materno— le dijo entendido todo Romina— tú magia radica de este mismo lugar, no entiendo porque los pobladores actualmente no tiene magia natural.—

—Me encantas cuando haces ese tipo de conjeturas muñequita, eres tan lista — acariciandole la cintura trayéndola a él y dándole un beso— mujer me encantas— totalmente enamorado Zaid. Romina le volvió a quitar la manzana y la mordió. —Mejor me calmo, tú me distraes— divertido se separó de ella.

—¿Encontraste algo más, verdad?— al ver la cara de preocupación de Zaid.

—Encontré quien era ese ser que tienes cariño, su nombre era Kulaul. No había muchos registros de él, pero era un antiguo rey de la tribu nómada que manejaba la magia indirecta. Que ambiciono por poder y llego aquí— Romina se paró en seco.

—Es curioso que este ser— mirando sus manos y las sombras de las mismas, que marcaban que no estaba sola— ya tenga rostro, nombre y un pasado. Ya deja de ser un enigma para mí y es menos aterrador.—

—Los monstruos, seres malvados o demonios, llegaron a ser personas como tú o yo, o bueno la mayoría de ellos. —Romina se sentó a lado de Zaid y suspiró.

—Mi amor, tengo miedo de convertirme en alguien igual a este ser que me posee— le confesó con algo de miedo. Zaid la tomo del rostro mirándola con determinación.

—Nunca dejare que te conviertas en eso,tú eres luz, pureza, bondad, todo lo contrario a este monstruo — con la confianza que Zaid sabía proporcionarle a Romina — Además eres Romina Decanini, Omega de Green Moon, la luna del nuevo Alpha de Silver Moon y por si fuera poco eres una de las 24 arcángeles...  y aun mejor, eres mi mujer— dandole besos en las mejillas— siempre has salido adelante por tu cuenta, con este enorme y noble corazón que te cargas. Ni este ser, ni otro podrá doblegarte nunca.—

..............

—Espero que tú plan esté funcionando bien, Romina— era Mateo trayendo más agua a escondidas. Llevaba días haciendo la misma rutina, vaciaba el agua del Río de los grandes barricas de madera que distribuían a la población, para darles agua potable del mundo exterior.

—Funcionará Mateo— con optimismo Romina terminando de tapar las barricas.

—¡Mateo!— ahí estaba Nhoa que se había quedado despierta solo para ver a Mateo, saltó rápidamente sus brazos— te extrañe mucho— Mateo le acariciaba la mejilla.

—Yo también peque— con sinceridad, Zaid temía que lo que su hija sintiera por su amigo, fuera otra cosa que una ilusión de niñas.

—Espero que no hayas estado con la Corina esa, no me agrada para nada— lo abrazo, a lo que Mateo se carcajeó.

—¿Estás celosa?- la llevaba a su habitación a que durmiera, la acomodo en su cama y la arropo.

—Solo un poco, porque tú serás mi futuro esposo, lo sé. — lo decía con tanta confianza y sinceridad— hasta mi loba me lo dice— Mateo miro a Romina y Zaid incrédulo buscando respuestas, Romina suspiro y Zaid negó con desaprobación.

—Es lo que ella dice, no estoy segura de eso—se encogió de los hombros Romina, ciertamente Mateo aún no entendía bien eso de los lobos.

—Bueno, de acuerdo. Igual es muy pequeña para decir eso— tratando de zanjar el tema y vio a sus amigos — necesito que me mandes una señal o algo para venir con los 24, ni creas que me perderé de una buena pelea Decanini.—

—Por supuesto que no Lightson, no podría iniciar una guerra mágica sin ti. — con certeza la Decanini guiñándole el ojo.

Déjame volar.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora