Capítulo 44

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-Bueno asi quiero que sea el orfanato señorita Wesley.-habla mostrándome unas ideas que quiere, con respecto al orfanato.

-Descuide todo irá plasmado en los planos para la construcción.-finjo una sonrisa.

-Es lo que espero, hablaron muy bien de usted, así que quiero convencerme que hacer trato con usted y la empresa, no me defraudara.-alza su ceja bien maquillada con suficiencia

Es insoportable esta mujer, pero me toca aguantar su mal genio sólo por el trabajo.

-Puede retirarse, mañana quiero saber como va con el avance.-sonríe falsamente.- La espero aquí en mi empresa.

Asiento y salgo de su oficina, y esta que se a creído piensa que los planos son fáciles, bueno para mi si lo es porque me apasiona esto, pero tampoco para exagerar. Hago un mohín tengo que avanzar cuanto antes, después se va a negar y no quiero mandarla a la casita.

Mi teléfono suena, y es Amber contestó.

-Hola mi princesa.

-Hola Mami.-me encanta cuando me dice asi, sonrio como boba.-Puedes llegar a casa temprano.

-¿Porque? ¿Qué a sucedido?.-frunzo el ceño.

-Nada mami, pero papi Domi quiere llevarme donde el tío Damián, pero no quiero ir, sus hijos me agarran mis cachetes y me hacen doler.-dice con su vocecita hermosa.

-¡Son tus primos! Tu mamá no se va a meter, me va a decir que te lleve.-escucho la voz de Dominick.

-No quiero ir papi Domi.-solo escucho su discusión.

-Amber anda, el tío Damián nos ayudó mucho, hazlo por papi Domi acompañalo, y si te agarran los cachetes hazle lo mismo a ellos y veras que no te molestaran mas mi princesa.-suspira

-Esta bien mami voy a ir, pero eso si te llamo, si papi Domi no me trae de nuevo a la casa, porque lo conozco dice ya mismo nos vamos y no lo hace.-la carcajada de Dominck se escucha y sonrió.

-Ya mi amor yo te ire a ver, solo me llamas y voy.-me tira muchos besos y cuelga.

Llegó al parqueadero y alguien choca conmigo haciendo que mi celular bese el piso.

-Lo que faltaba.-me agacho y lo recojo y escucho las disculpas, por su voz es un hombre pero no alzó la mirada, estoy viendo si no se le daño la pantalla y nada lo miro por todos los lados y todo esta perfecto, suelto un suspiro.

Sigo mi camino al auto cuando siento que tocan mi hombro, me giro y que casualidad es él.

-Lo siento no fue mi intención chocarte, disculpame si.

-No se preocupe.-me subo a mi coche, arranco y salgo del estacionamiento dejando a esa persona parada mirando el auto hasta el final.

Así que él trabaja aquí, pero creo que ni se ha de acordar quién soy, y dudo que nos encontremos otra vez esa empresa es grande.

Ya en mi oficina en mi espacio personal, busco todos los materiales reglas y regletas, triángulos, escuadras y compases, lápiz, borrador, papel sketch, papel albanene, todo bien ordenado así no pierdo el hilo de la imaginación, me pongo en modo creativo y comienzo a trazar líneas.

Y así se me pasa el tiempo.

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-Deja de reirte.-ya me tiene cansada con su tontas risas.

-No podre y por un largo tiempo me acordaré de esto, asi que acostumbrate.-dice limpiándose las lágrimas

Ya me bañe y me puse mis pijamas cortas muy cortas, estamos comiendo con Elinna y me está conversando sobre su viaje a Las Vegas.

-Esa ciudad es hermosa tenemos que ir, todo es lujo enserio, hasta los perritos tienen sus propias casitas, pero laboralmente cerramos contratos, todo estaba bien hasta que...-se queda en silencio y muerde la uña de su pulgar nerviosa.

-Que me ocultas Elinna.-entrecierro mis ojos y ella más nerviosa se pone.-No jodas, te acostaste con tu jefe.-gritó

-Shh Dande has silencio, no quiero que nadie se ente....-la puerta se abre abruptamente

-Zorra te acostaste con tu jefe.-dice Alessia. La susodicha solo se esconde bajo la colcha.

-Si hice algo mal, pero yo no lo busque, él llegó a mi habitación del hotel, a pedirme los papeles del contrato se lo entregue, nos miramos unos segundos, cuando dijo a la mierda los papeles, parecía a Christian Grey diciendo esa frase y se me lanzó encima besándome apasionadamente.

-Y tu lo dejaste.-saca la cabeza de su escondite y asiente.

-Tengo que irme a confesar, hicimos mucho desmadre en esa habitación y bien dicen todo lo que pasa en las vegas se queda en las vegas.-

-Nosotras escucharemos todo, y despues te damos nuestra opinión.-dice Alessia comiendo una chuchería y sentándose como indio yo también asiento y me siento encima de mis piernas.

Toma aire y comienza a hablar.-Bueno comenzamos a desnudarnos, me alzo y me llevó a la cama yo sabía que no me detendría, desde que lo vi lo desee como nunca. En fin puso sus manos encima de las mías arriba de mi cabeza, mientras me besaba y comenzaba a mover su pelvis tan deliciosamente lento, que me hizo delirar con su solo movimiento y eso que no estaba dentro de mi, pero cuando lo estuvo uff si les digo como gemía, se van al baño a hacerse feliz.-Se pega la carcajada junto con nosotras.- Que buen sexo que tuvimos, pero no quiero nada con él es un mujeriego de primera.

-Diablos yo haría todo el Kamasutra con un hombre que se sepa mover, no solo por su amigo grande, sino por sus movimientos, estaria como exorcizada poniendo los ojos en blanco.-agrega Alessia.

-Así, como te puso Steven a ti Elinna te acuerdas.-Me fulmina con la mirada y me rio con mas fuerza.

-Ah cuando te estaba ahorcando mientras lo hacian, pero dejame decirte que se siente rico asi.- Ale chocan los cinco con Eli.

-Yo le diria a mi chico, bueno si algun dia llega "te puedo hablar con franqueza, quiero hacer las mil y una acrobacias contigo".

Ambas me ven en shock.-Eso te mandará al hospital, por un desgarre o que tu le dañes el pene al pobre.

Y seguimos conversando, cuando la puerta de mi habitación suena de nuevo, y Amber asoma solo la cabeza y sonrie tiernamente.

-Mami puedo dormir contigo.

-Si mi amor ven.-Le hago un espacio a lado mio, ella corre y se acuesta.

-¿Qué pasó? el monstruo del armario no te dejo dormir, pequeña.-toma un poco de jugo

-Mami eso es cierto.-dice Amber con ganas de llorar.

-No amor, eso es mentira que Alessia invento.-intentó calmarla y la susodicha mueve la mano.

-Es verdad Amber, y eso pasa cuando las niñas se portan mal, yo siempre veía una mano peluda sobresalir del armario en la noche, y una vez me quede concentrada mirando la mano cuando en un microsegundo se aparece frente a mi una cosa horrible y me hizo buh.-pone sus manos en el estómago de Amber, que la hace pegar un grito y comienza a llorar.

-Eres una ignoramus porque haces asustar a mi hija.-le doy un zape y esta solo se tira a la cama a reír.

-Lo siento pero siempre he querido decirle eso a un niño, me perdonas Amber.

-Si tía, pero no lo vuelvas a hacer.-la señala con el dedo índice, y se limpia sus ojitos y su nariz es tan tierna.

-Lo prometo cosita hermosa.-le agarra los cachetes haciendo que se enoje.

-Uhh corre, porque te va a hacer lo mismo.-Alessia me ve confundida y comienza a correr por todo el cuarto con Amber atrás de ella.

-Tía no me gusta que agarren mis cachetes ahora te haré lo mismo.-la rubia sale del cuarto con mi hija atrás, se escuchan sus gritos hasta que un fuerte ruido nos hace salir a la pelirroja y a mi a ver qué está sucediendo.

-¡¡Tía Ali! ¡se cayó de las escaleras mami!!

Alessia está al final de las escaleras boca a bajo y la sangre se empieza a esparcir por el piso.

-Llama a una ambulancia Elinna.-le digo y corro hacia el cuerpo de mi amiga, Dios que no le pase nada, toco su pulso y es muy lento.

InnombrableDonde viven las historias. Descúbrelo ahora