Innombrable

Capítulo 8

Abro los ojos de a poco, la luz me ciega un poco, parpadeo para adaptarme a la claridad, me doy cuenta que estoy en el hospital, lo último que recuerdo es del dolor de cabeza insoportable que tenía. Esos dolores los tengo desde los 15 años, con el pasar del tiempo, son fuertes que me dan desmayos, a causa de ellos es por estrés, falta de sueño y cuando estoy mucho tiempo en una computadora o celular, es lo único que me dicen los doctores, según es genético, y por eso tomo medicamentos que me recetaron, y así aliviar el dolor, a los dolores de cabeza si les tengo respeto, por que esos dolores son por algo que está afectando a mi cerebro y no es bueno.

-Al fin despertaste.- pego un brinco al escuchar esa voz.

-¿Qué haces aquí Idiota?. - ya se que no debo tratarlo así, pero ya no puedo cambiar mi forma de ser con él.

-Veo que ya estas mucho mejor, porque ya me insultas.

-No es un insulto Ignoramus, solo es un cumplido.-sonrió.

-Te traje hasta aquí, porque te desmayaste, el doctor dice tus dolores de cabeza no son nada bueno, y que tiene que verte un especialista.

-Ya! si lo se, ya me he hecho atender, pero no tengo nada en mi cerebro está más que sano. 

-Es que si uno no se estresa es porque no está haciendo bien su trabajo.- le digo

-Tienes razón pero tu lo haces al máximo.-suspiro ya cansada de este tema.

-Ya me puedo ir.- él niega, iba a hablar, cuando entra una pelirroja al cuarto.

-Dande!!! amiga; un día voy a morir de un infarto, por tus desmayos.-tiene los ojos llorosos.

-Estoy bien Eli, todavía voy a estar por aquí; jodiéndote la vida 

- Cuando llegue a casa, veo que este chico te saca en sus brazos, directo a su carro; corrí para irme con ustedes estaba muy preocupada nena; bueno siempre lo estoy cuando tienes esas decaídas.

-Ya no te preocupes, ya me quiero ir a casa.- hice un puchero.

Entra un señor con bata blanca bien planchada y pulcra, me imagino que es el doctor.

-Srta. Dandelion Wesley, le doy la orden que ya se puede retirar, pero como profesional, le recomiendo que valla a un Neurólogo.

-Sí doctor eso haré, gracias.-me levanto de la camilla con ayuda de Jayden.

 .....

Llegue a casa quise seguir con los bocetos, pero me arrastraron a mi habitación a descansar, y era lo que menos quería, ya que no me gusta estar sin hacer nada.

-Si hasta mañana estas bien continuamos con el trabajo, si no yo los termino por ti, no quiero que te de otra recaída.- eso se escucho raro ¿cierto? se dio cuenta de mi confusión a lo que rápidamente agrega.

-Después a quien molesto en la Universidad.-pongo los ojos en blanco.

-Madura de una vez Smith.- se carcajea

-Bueno ya me voy, cuídate por favor, hasta luego Elinna.

-Adiós.- dice esta mirándonos como; que pedo a pasado aquí. 

Él susodicho se va y yo me siento más relajada, hasta que habla esta mujer.

-Haber no entiendo; me voy solo dos días, y tu con el buenorro ya son buenos amigos.

-No somos amigos, solo compañeros de trabajo, que es muy diferente.

-Ajam si, que dedo me chupo.

-suspiro.- No pienses cosas que no son, voy a dormir, cocina porfis.-sonrió porque se que no lo hará; y se lo digo para que entienda que este tema está más que terminado.