Capítulo 2

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Ya llevamos dos meses en Versalles los mejores de mi vida, se nos hizo difícil hablar Francés fluido, pero poco a poco llevamos el ritmo.

Voy caminando por el Campus concentrada en mis canciones y tarareandolas que no me fijé en el poste, y me choco con el y caigo de bruces al suelo, mis manos y mi trasero sufrieron más la caída, y como toda ser humana que soy, me levante rápido toda atolondrada mirando a todos los lados, rogando que nadie me haya visto, sino que vergüenza de las más vergonzosas, mi cara arde por lo sonrojada que estoy, cuando no vi a nadie a mi alrededor seguí caminando como si nada pasó, pero riéndome solita por cómo me caí.

Llegue a la cafetería para encontrarme con Elinna ya que ambas estudiamos diferentes especialidad, yo estudio Arquitectura y ella Administración de Empresas nuestras facultades son lejos porque el campus es inmenso, y más porque soy alta y cuando camino doy pasos cortos, siempre me dicen porque tienes esas piernas largas, si no caminas rápido, que les puedo decir soy floja para caminar. Esta chica estaba en su celular  me fui por atrás para que no me vea y cogí un vaso que estaba en una mesa y tenía hielo coloque todos  en mi mano, y se los puse por la pretina de su pantalón, en la parte de atrás donde se le veía un poco en interior.

Pego un grito - ¡Ahh!!!!! Qué te pasa porque me metiste hielo en el trasero. -yo me agarro la barriga de la risa, abrió los ojos muy grandes. -Riete nomas que ya me las cobrare Wesley.

- Ui mira como tiemblo. -actuó como si tuviera frió. - Me la debías por tirarme agua helada.

Y la veo comiendo hielo y hago cara de asco. - Asquerosa porque te comes ese hielo que estaba en otra mesa, quien sabe que tendría y peor aún estaba en tu trasero Dobrev.

-Pobrecita mi trasero es el más pulcro querida. - me saca la lengua como niñata.

-¡Qué vamos a comer!.

- Pídeme un croissants por favor amiga.

Voy a comprar a la cafetería, estoy concentrada mirando lo que voy a pedir, ya que están atendiendo a dos chicas que me caen mal, su nombre es Alessia Volkov y Penélope Clayton.

-Buenos días me puede dar un croissants y un Pain au Chocolat por favor.- Ah! y dos café.

Me dan mi pedido y voy a la mesa donde esta Elinna con un chico bien bueno, me imagino que es un ligue de esta chica, nunca va a cambiar, pero bueno no me meto es su vida, aun así la adoro.

hice una tos de lo más falsa.- Disculpa yo estaba sentada aquí, así que con permiso.-lo quito de mi silla.

-¿Que haces? es un ligue me iba a invitar a salir, ahora por tu culpa no saldré hoy que es martes y el cuerpo lo sabe. 

puse los ojos en blanco.-Boba es "viernes y el cuerpo lo sabe" no "martes".

-Yyy!!-Hizo un gesto de que no le importa. -Me vale que día sea, tengo que salir a mover el esqueleto, no quiero estar de aburrida en la casa.-me mira como poseída y después junta sus manos en forma de súplica.-Porfis Dandelion salgamos hoy. 

-Nooo! Es martes y mañana tenemos clase, también tengo muchos deberes.

-Buhh aburrida, porque eres así conmigo Dande.

-Así soy punto.

Las últimas horas pasaron de lo mas lentas, tenia un dolor de cabeza terrible que ni yo mismo me aguantaba, solo deseo ir a casa a dormir y despertarme en el fin de semana. ¡No se puede!

Llegamos a casa y me puse a hacer la cena yo sola, porque Elinna se le quema hasta el agua.

Estaba concentrada picando una cebolla para la ensalada cuando un grito, me sobresalta, y me corto un poco mi dedo.

-¡Pinche loca que te pasa!!! grito caminando al cuarto de Eli  y con mi dedo en la boca, chupando mi sangre, no quiero morir desangrada.

-¿Qué te pasa? ¿porque gritas?

-Un ratón salió de mi cajón, de mis interiores casi me muerde, es la cosa más horrible y grande  que he visto.

-Exagerada, que habrás tenido en ese cajón para que el ratón estuviese allí.- la miró seria.

-Nada nada, no tengo nada de comida en mi cajón, por favor mátalo sii.-aumenta la ultima letra.

-Voy por mi escoba, ese ratón ni hace nada, miedosa.

Cojo la escoba y voy donde me señala Eli, se metió en el closet, abro una puerta, y no veo nada, abro la otra y ese animal brinca...

-Ahh!!! si que es horrible eso. -gritamos ambas y yo ya estaba subida en la cama, hasta la escoba la boté, si es grande y bien feo.

-Ahora que hacemos yo no voy a matar a ese bicho.

-Ni yo, y si llamamos a los que matan a esos animales.

-Si ándale, tu llámalos yo me quedo aquí mirando que no se vaya.-lo mira fijamente está bien pegada en la pared.

-Pero porque yo.

-Tu fuiste de la idea, anda.

-Ash!..-pongo un pie en el piso y después el otro, cuando veo a ese animal correr hacia la cama, yo corro a abrir la puerta y la cierro para que no se salga, escucho los gritos de Elinna diciendo que me apure.

Corro a llamar a los Exterminadores de ratas, me dicen que el 10 minutos están aquí, los espero parada en el mueble por las dudas y aparece otro ratón. Escucho el timbre y voy a abrir, pero por todos los cielos, si este es un Bombazo de exterminador, lo miró sin pudor alguno, aunque tenga esos trajes que usan ellos, se le nota lo bien trabajado que está.

Yo si te doy, pero no comida. Dice mi subconsciente 

-Quien te dio vela en este entierro Dizzle.- si ya se que así se llama la motita de Barbie.

Este hombre es un mangazo, que sea soltero por favor porque, yo si le doy duro contra la cama.



InnombrableDonde viven las historias. Descúbrelo ahora