Masaru estaba tomando té pensando en que podría preparar para la cena cuando tocaron su puerta. Curioso fue a ver quién era.
Estaba al tanto de las noticias, durante el día le dejo varios mensajes a Ochako y hasta la invitó a reunirse, también la llamó, pero no había respuesta por parte de ella.
Abrió la puerta despacio, solo para encontrarse a una mujer rubia y de ojos azules.
-hola Masaru-san... podríamos hablar un momento?- la voz de Ochako lo sorprendió, aunque antes de responder la abrazó con fuerza, ella le devolvió el abrazó en igual medida.
-ven cariño, adelante...- se separaron y la menor ingreso al departamento del hombre -quieres té?- ella negó con la cabeza.
Se fueron a sentar a los sillones, estaban uno delante del otro y Masaru podía notar la discusión interna que tenía ella.
-usted... usted está al tanto de las noticias?...- escuchó el miedo en su voz.
-si... Lo lamento mucho Ochako-chan...- ella asintió y tomo aire.
-me voy a alejar de ustedes, yo... yo no quiero que se vean envueltos en mis asuntos ni que terminen en una tumba... me voy a alejar de usted y de su hijo- eso le sorprendió al mayor.
-y eso por qué Ochako-chan?- ella apretó sus puños.
-ambos corren riesgos conmigo, en especial Katsuki... no es justo que les suceda algo por mi culpa- el mayor asintió comprendiendo.
-tienes miedo- era una declaración que hizo que ella bajara la cabeza, afirmando silenciosamente lo dicho.
-sabes Ochako-chan, una vez un viejo amigo me dijo "algunas veces somos tan idiotas, que valoramos más a quien ya no está más, que a una persona que está a nuestro lado" y creo que tú padre tuvo toda la razón- nuevamente no respondió.
-Daichi te contó sobre su enfermedad?- eso le llamó la atención.
-usted lo sabe?- el castaño asintió.
-me lo contó la primera vez que nos reunimos, creo que fue justo cuando tú también estabas volviendo a la ciudad- la mujer abrió los ojos -pero no estaba triste cuando me lo contó, en realidad estaba feliz de saber que podría haber una posibilidad de volver a ver a tu madre... pero también estaba preocupado Ochako-chan, él no quería que te alejaras de nadie ni que estuvieses sola, por qué crees que te pedía tanto tener pareja? O que acepto rápidamente a Katsuki?- la mujer frunció el ceño mientras pensaba.
Se notaba que volvía a tener una discusión interna, por lo que se levantó, le acarició su cabeza y comenzó a marchar hacia la cocina.
-quédate a cenar, puedes dormir aquí si así lo quieres hija... prepararé Yaki Udon y tengo Mochis de menta para el postre- nuevamente la joven no respondió, estaba más metida en sus pensamientos que en otra cosa.
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Vinilos Y Disparos
Fanfiction¿Que sucedería cuando dos viejos conocidos de reencuentran? No tienen nada personal en común, no son adolescentes, no deben dejar de lado sus obligaciones, se soportaron toda su vida, la rivalidad nunca los abandonó. Entonces... ¿por que ya no sie...