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Sora no estaba totalmente de acuerdo, pero después de todo, aquella mujer era la madre de JiMin y por ende, la abuela de su pequeño frijolito. Y aunque la omega estaba dispuesta a darle una tesis completa de todos los motivos por lo cual no debería estar ahí tratando de integrarse a la fuerza en un momento en el que lamentablemente, ya no tenía un lugar fijo.

Se calló todo lo bien que pudo y aparentó ser una perfecta y sumisa omega al lado de su esposo. Pero cuando este desapareció por la puerta, alegando algo sobre una llamada de la empresa, Sora dejó de fingir.

— Ni siquiera deberías estar aquí. — Espetó mientras sutilmente, zapateaba su lindo tacón rojo contra la cerámica del piso de la habitación. — Pero claro, te importa un bledo por lo visto.

— JiMin no me ha corrido, ¿Por qué lo harías tú? — Indagó Soomin encantada con el pequeño bebé. Sora rió.

— Mi pobre bebé no sabe que estás aquí. — Bufó Sora rodando los ojos. — Pero te aseguro que puedo ir ahorita mismo a decirle. — Anunció. Soomin negó mientras dejaba de ver al bebé y observaba a la mujer frente a ella.

— ¿Qué ganas con eso? — Inquirió Soomin con curiosidad. — ¿No te parece suficiente que no pueda tener una sana conversación con mi hijo?

— Eso ciertamente, no es mi culpa. — Susurró Sora. — Y por lo visto, eres la única que no puede entender que simplemente, no tienes nada que hacer en la vida de JiMin, no ahora. — Mencionó Sora. — Él intenta bastante querer tenerte en su vida, pero desde mis ojos, veo lo que él no, y lo que tú, te niegas en aceptar. — Avisó. — Quizás JiMin-ah te necesitó tanto en un tiempo, tanto como pudo pero no obtuvo lo que quería, no te tuvo cuando quiso tu apoyo ni tu ayuda, no puedes venir a imponerte ahora cuando él, simplemente apenas está tolerando estar contigo durante ¿diez minutos? ¿Veinte?

— Es mi hijo. — Rebatió SooMin, completamente

— Y siempre lo será, no te lo estoy negando. — Sora asintió. — Tú lo pariste después de todo, por lo menos eso te da un poquito de derecho. — Mencionó con voz exageradamente dulce y falsa. — Pero el puesto de madre te quedó demasiado grande. — Susurró cerca de la castaña. — JiMin me mandó a buscar a mi nieto, con permiso.

...

SeokJin sonrió cuando observó a JiMin junto a su pequeño bebé. TaeHyung estaba a su lado intentando cantar una canción de cuna mientras JiMin reía de los errores que este cometía al tratar de recordar la letra de la canción.

— Para cantar canciones de cuna no sirves. — Se burló el mayor de los tres. TaeHyung bufó.

— Quisiera verte intentándolo, eh. — Lanzó de una mientras le mirada de forma retadora. JiMin rió divertido.

— Yah, frijolito se durmió, así que TaeHyung ganó la batalla. — Aseguró el rubio viendo con cariño a su pequeña bolita de amor. Jin asintió encogiéndose de hombres.

— ¿Cómo se llama el precioso? — Cuestionó el omega acercándose más. TaeHyung se deslizó solo un poquito mientras seguía teniendo su atención en el pequeño infante.

— JiYoon. — Jin negó mientras acariciaba uno de los rellenos cachetitos del bebé.

— Que nombre más feo. — Mencionó Jin ganándose el ceño fruncido por parte de JiMin y TaeHyung. — Yo tengo otro más bonito y perfecto para este príncipe.

— ¿Cuál será hyung? — Indagó JiMin curioso. SeokJin sonrió y TaeHyung supo que aquello sería un completo disparate.

— Kim SeokJin. — JiMin empezó a reír junto a TaeHyung mientras ambos escuchaban los quejidos molestos del mayor de los omegas.

Igualmente frijolito seguía ganando.

...

MinJi observó con verdadero cariño y adoración a sus dos nietos, los dos parecían concentrados en un pequeño libro mientras que todo el mundo a su alrededor se desvivía por el pequeño cachorro que era una copia del pollito malvado.

Llámenla loca, pero ella tenía un instinto bastante bueno, el pequeño bebé podía ser una ternurita y una mini-copia de su YoonGi, pero por algo era la mayor de todos ellos y la superior abuela Min, ese pequeño bebé sería una bombita de tiempo.

Una bombita de tiempo, pequeño, esponjosito y tremendo como su papá omega.

— ¿Qué hacen mis dos consentidos? — Indagó curiosa tomando asiento al lado de los dos menores. YoonGi suspiró cansado mientras que BaekHyun seguía leyendo.

— Buscando otro nombre para frijolito. — Añadió el omega. — A YoonYoon se le fundió la única neurona que tenía y se le ocurrió simplemente tomar los primeros nombres de cada uno. — MinJi rió.

— Eso no tiene nada de malo. — Anunció la mujer. Baek negó.

— Me niego, ofrecí mi nombre, pero me batearon. — La mujer observó intrigada al mayor de sus nietos. — ¿No le ves la cara? Será una preciosura como yo.

— Soñar es gratis. — Bufó por lo bajo YoonGi. Baek rió antes de pegarle un pequeño y sutil codazo al menor.

— Callado te ves más bonito, ¿sabías eso Min YoonGi? — YoonGi rodó los ojos mientras se quejaba por el repentino dolor mientras que MinJi reía divertida. — ¿Mamá no estaba contigo, abuela?

— La dejé botada en un basurero. — Susurró tan serio que tanto YoonGi como BaekHyun se lo creyeron. — Bromita, estaba peleando con una mujer, así que la dejé esperando que hubiera algo de acción, pero no pasó nada. — Susurró con desánimo. YoonGi negó cansado mientras que BaekHyun simplemente rió.

— Ya admite que mamá te cae bien, abuela. — Mencionó YoonGi.

— Una cosa es que me caiga bien, y otra que le haga la vida fácil después de secuestrar a mi único hijo, merezco por lo menos fastidiarla un poco. — Aseguró.

...

Cuando JiMin despertó nuevamente, se encontró con un ligero peso recargado sobre uno de sus brazos, no tuvo que pensarlo mucho para saber de quien se trataba. El aroma de YoonGi inundaba la habitación y hacía que su lobo se mostrara relajado y tranquilo.

Con su mano libre, dejó una pequeña caricia en la negra cabellera del mayor, su intención no fue despertarlo en ningún sentido de la palabra, pero YoonGi había alzado la cabeza tan rápido como su mano se deslizó por su cabello.

— Frijolito está durmiendo. — Susurró el alfa. — Y yo lo estaba también. — JiMin rió ante lo tonto del comentario hecho por el pálido mientras veía con ternura el semblante soñoliento del mayor.

— Pensé otro nombre para nuestro bebé. — YoonGi le observó. — No me malinterpretes, él que tú dijiste es bonito, pero... — YoonGi negó dejando un cortó beso sobre la mano del omega. 

— ¿Cuál tienes en mente? Por favor que no sea BaekHyun. — JiMin rió mientras negaba. Su cuñado y Jin seguramente se llevarían tan bien. 

— Me gustaría que nuestro bebé se llame Soobin, Min Soobin.

— Suena bonito. — Susurró YoonGi. — Será bonito, como tú. — JiMin asintió.

— Será guapo, yo soy guapo. — Alegó el omega riéndose. — ¿Te lo dije, no? — YoonGi frunció el ceño confundido. — Te dije que nos casaríamos y serías el padre de mis cachorros. — YoonGi rió divertido antes de dejar un cortó beso en los labios del menor.

...

Gracias por leer.

Estamos a 6 capítulos para finalizar esta historia.

Disculpen cualquier error.

Ahorita no, joven » Omegaverse YM.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora