Ahorita no, joven » Omegaverse YM.

[57]

Jimin evitó quejarse por todo el dolor que estaba sintiendo mientras trataba de salir de la habitación en silencio. Su alfa bonito le había dado mucho amor la noche pasada y ambos habían sido muy felices.

Sin embargo, toda felicidad que sentía se borró de su rostro al ver la mueca de la señora Min.

— ¿Buena noche? — Cuestionó. Jimin parpadeó confundido mientras veía a la mujer.

— Muy buena. — Susurró. — Mi alfa me amó, consintió y reclamó como la primera vez, todo bonito y hermoso y... — Jimin calló al ver la cara de la mujer mientras sus mejillas enrojecían en señal de bochorno.

Quizás ella no estaba pidiéndole detalles.

— Olvídalo Jimin-ah, ya sé que has violado a mi hijo tantas veces. — El omega estuvo dispuesto a refutar aquello pero la mujer negó mientras veía hacia las escaleras que daban al primer piso de la casa. — Tu mamá está abajo esperándote.

...

Jimin observó con desconfianza a la mujer. Park Soomin también le miró y aquello provocó aún más desconfianza en el menor.

— Te ves muy bien. — Confesó la mujer mientras tocaba el cabello rubio de su hijo. — El embarazo te hace ver más bonito de lo que ya eres.

— ¿Qué quieres? — Preguntó de forma brusca el omega mientras sentía el aroma de su alfa a muy poca distancia de él.

— Solo quería verte y saludarte. — Mencionó con tranquilidad mientras elevaba su mirada hacia la escalera. La misma mujer de la otra vez le veía fijamente acompañada de quien parecía ser la pareja de su hijo. Soomin suspiró de forma sonora mientras de nueva cuenta volteaba a ver al menor. — Quería invitarte a salir cachorro. — Jimin parpadeó confundido ante lo que escuchó. — Que pasáramos tiempo juntos, como madre e hijo.

— No sé qué bicho te picó, pero no. — Respondió el rubio mientras retrocedía. — Además, ¿no crees que estás viniendo muy tarde? — Inquirió mientras veía con molestia a la mujer. Soomin asintió mientras sentía las lágrimas caer libremente por su rostro.

— Mi alfa me dejó. — Susurró aquellas palabras en un tono de voz tan bajo que Jimin creyó haberlo imaginado. — S-Se fue y yo...

— Tú solo pensaste que te recibiría con los brazos abiertos. — Mencionó sin emoción alguna. — Mamá, las cosas no son así y lamento que te dejaran pero quizás esto te sirva para algo. — La castaña le observó confundida mientras Jimin simplemente evitaba las ganas de salir corriendo del lugar. — Quizás te sirva para comprender la forma en la que nos sentimos Chan y yo cuando te fuiste y no regresaste más.

— C-Cachorro. — Jimin negó mientras caminaba en dirección hacia la puerta y la abría.

— Quizás en otra oportunidad pueda salir contigo mamá, pero más tarde iré con mi papá y mi hermano y eso no lo cambiaría por nadie en el mundo. — Por favor. — Pidió dándole a entender a Soomin lo que tenía que hacer. La omega asintió mientras avanzaba hacia la puerta y salía de la casa.

Quizás ya era demasiado tarde para enmendar sus errores.

— Podemos denunciarla y meterla en prisión por el resto de su vida. — Ideó Sora mientras bajaba las escaleras acompañada de su hijo menor y veía al omega. Jimin rió mientras sentía los brazos de su pareja apresarlo en un fuerte abrazo.

— Sigue siendo mi mamá. — Comentó con los ojos rojizos mientras intentaba contener las lágrimas. — Pero he pasado toda mi vida pensando en que nunca fui suficiente para ella. — Comentó con dureza en su voz. — Pero ahora que él se fue de repente si soy importante para ella y... — Jimin negó mientras sentía los brazos de su alfa arrullarle con tanto cariño.

— Cuando quieras ir con ella, yo iré contigo. — Susurró el alfa plantando un casto beso en la frente de su omega. Sora sonrió orgullosa mientras veía a ambos menores.

— Igualmente podemos meterla presa. — Sugirió inocentemente la omega.

...

YoonDae observó fijamente al omega rubio, luego su mirada se desvió a su mujer mientras sentía un escalofrío recorrerlo de arriba abajo.

— Todavía no puedo creer que mi hijo crea que eres un angelito. — Jimin parpadeó confuso. — Eres igual que ella. — Mencionó señalando a su omega. — ¿Sora segura que no me engañaste con alguien?

— ¡YoonDae! — Gritó Sora alterada.

— ¡Suegrito! — Jimin chilló.

— ¡Burro! — BaekHyun mencionó mientras entraba en la sala y veía a los presentes. — ¿De qué hablan? — Cuestionó al ser víctima de tres miradas molestas. — ¡YoonGi, te quieren matar, huye huye! — Gritó el omega saliendo de la sala.

YoonDae suspiró cansado mientras se llevaba las manos a la cara.

Quizás los únicos normales en esa familia eran YoonGi y él.

...

Rápido y violento porque sigo sin internet.

¡Gracias por los 300k!

¡Muchas gracias por leer también!

Espero el capítulo fuera de su agrado, disculpen cualquier error.

¡No olviden seguirme! Quiero dominar el mundo y es necesaria tu ayuda.

¡Hasta luego!