El rey Min Yoongi [YM][#2][✓]

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Jimin saltaba en la polla del rubio mientras que este le apretaba la cintura, amaba como se sentía estar así con el hermoso doncel, con su esposo, Jimin llevó su boca con la del contrario para darse un profundo beso. En un cambio de posición, Jimin quedó de espaldas con su culo al aire a merced del joven pálido, el cual no perdió la oportunidad de besar aquella hermosa y aperlada piel, mientras que con una mano tomaba con firmeza la cintura de Jimin y con la otra lo masturbaba. El doncel era un desastre de gemidos al sentirse totalmente estimulado por su esposo, un hilo de saliva se deslizaba por los labios gruesos y rosados del doncel ante el placer que sentía.

Yoongi llevó la mano, la cual atendería la erección del doncel y nuevamente la llevó a su parte trasera para penetrarlo con sus dedos, los gemidos del peli negro eran cada vez más altos, dando a entender que estaba disfrutando de lo que estaban haciendo. El rey se sintió cada vez más duro ante los gemidos de su amado, el rubio, luego de sacar los tres dedos del interior, entró de golpe dándole unas fuertes y profundas embestidas al menor.

—Oh~ sí~ —gimió el doncel.

—Me encantas amor. —susurro Yoongi para seguir con los movimientos.

Jimin seguía gimiendo ante los movimientos del rey, cansados de esa posición, Yoongi quedó arriba de Jimin para seguir penetrando mientras se besaban al sentir sus orgasmos, ambos se volvieron a besar mientras sus lenguas danzaban juntas susurrándose un te amo, ambos se corrieron juntos. El doncel ahora se encontraba descansando en el pecho pálido del rubio, Jimin se encargaba de repartir unos besos en esa zona, Yoongi por su parte le acariciaba la espalda.

—¿Crees que tu demás familia quiera hacer algo? —preguntó Yoongi. —huyeron, pero siento que volverán y atacarán.

—Asesinamos a medio clan. —dijo Jimin. —padre está muriendo y no hay nadie capacitado para tomar su puesto.

—¿Qué hay de tus hermanos? —le preguntó. —¿Ninguno puede tomar el puesto?

—Pueden, pero pelear por el puesto ahorita no es lo indicado.  —se sentó en la cama y le acarició la mejilla. —me encargaré de que recuperes a tu reino, asesinaré a Jung Hoseok.

—Lo haremos juntos. —le dio un corto beso en los labios. —como una pareja.

Jimin sonrió mientras decía su mano al cabello rubio de Yoongi, le era extraño verlo con el cabello corto, pues se había acostumbrado a verlo con aquellas hermosas hebras rubias, largas y sedosas.

—Es momento de iniciar otro plan. —habló Yoongi.