40. Toma de decisiones.

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Alison Campbell.

Sky me asignó una habitación muy bonita y espaciosa, me dijo que ha pasado gran parte de su vida en esta casa y por eso entiendo las fotos de ella y su padre que se pueden apreciar por los pasillos. Está claro que esta casa es especial para ellos.

—Hola —nos saluda Angélica cuando entra en la habitación—. Sky, puedes dejarme a solas con Alison por un momento, preciosa. —se vuelve hacia Sky y ella asiente, dejando las camisas que estaba arreglando en la cama.

—Voy a estar con mi prima, no vemos más tarde. —me dice y sale de la habitación, cerrando la puerta.

Cuando quedamos a solas, Angélica se sienta en un mueble de la habitación y yo hago lo mismo en la cama.

—¿Cómo te sientes?, ¿Tienes dolores o molestias?

—No, me siento bien. Gracias. —cuando digo eso, ella sonríe.

—Eres más fuerte que yo, la historia no se repetirá.

—¿Cuál historia?

—Lo que dijo Eliot es verdad de cierto modo, ya que yo tuve complicaciones en mi embarazo desde la primera semana y estuve en estado crítico en esos nueve meses. Estoy segura de que tu embarazo no será como el mío.

—Eso significa que sabías que Liam venía con esa condición.

—No, Eliot realmente no sabe cómo fueron las cosas —respira profundamente—. Mi embarazo era de alto riesgo porque en ese momento mi cuerpo estaba muy débil y eso afectó al bebé, los médicos hicieron exámenes superficiales y asumieron que quizás nacería con problemas respiratorios o con pocas defensas. Sin embargo, nunca me dijeron nada sobre un problema mental, si lo hubiera sabido, habría hecho lo correcto. Cuando nació Liam, no se le hicieron las pruebas adecuadas, ya que los médicos dijeron que era milagrosamente un bebé sano. Todo fue por culpa de los médicos que me atendieron; si me hubieran hecho una prueba exhaustiva durante mi embarazo, Liam no habría pasado por todo esto. Por eso digo que la historia no se repetirá contigo.

Ver la mirada perdida de Angélica cuando cuenta esto me produce un sentimiento horrible. No puedo imaginar el dolor de una madre al ver el sufrimiento de su hijo día tras día y no poder hacer nada al respecto.

Yo tampoco quiero que esa historia se repita.

—Me haré todos los estudios necesarios y si se revela alguna anomalía detendré el embarazo, no dejaré que sufra.

No voy a ser egoísta, no puedo pensar en mí solamente. Nunca rechazaría a mi hijo, pero tampoco lo tendría a costa de su salud.

—Estaré ahí para ti y respetaré tu decisión —sus ojos se cristalizan y lágrimas deciden por ellos—. A veces me gustaría tener poderes y así detener el tiempo y volver al pasado para cambiar las cosas. Con estos haría que Liam naciera bien y disfrutara de su vida para que nunca se sintiera rechazado por todos. Me hubiera encantado verlo feliz, aunque fuera por un momento.

Mis ojos se cristalizan al escuchar eso.

—Eres una gran madre, Angélica. Le diste ánimos aún cuando todos lo miraban mal y nunca lo dejaste solo sin importar que él te quería alejar. —mi voz se quiebra al imaginar que mi madre hubiera sido como ella y me hubiera puesto por encima de todo, pero nunca lo hizo.

—Una verdadera madre hace todo lo posible por el bien de su hijo.

"Por el bien de su hijo" eso es algo que no puedo olvidar, me preocuparé por su bien pase lo que pase, y si Liam no me ayuda a tomar una decisión, lo haré yo sola.

IAN - [Todos tienen su lado oscuro] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora