24. Pequeño comienzo.

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Alison Campbell.

—Vete a la mierda y deja las drogas. —digo con irritación.

Coloco la llamada en silencio para respirar durante unos segundos y así poder seguir hablando con Liam.

—También la quería follar desde el inicio. —la voz de Liam suena un poco lejana. <<¿Cree que colgué la llamada?>>. Confundida, pego aún más la oreja al móvil, al mismo tiempo que tomo un sorbo de la botella de agua que tengo en la mano e intento escuchar con quién está hablando y a quién quería follar desde el inicio.

A los segundos, escucho que su respiración comienza a acelerarse y leves jadeos resuenan lentamente. ¿Está ... follando? No escucho jadeos ni gemidos femeninos, lo que me confunde aún más.

—Es solo mía. —habla de nuevo con voz ronca. ¿Mía?, ¿de quién está hablando? Frunzo el ceño y vuelvo a tomar un sorbo de agua.

Sigo escuchando jadeos y pequeños gruñidos provenientes de Liam y no puedo evitar recordar cuando follamos. Siento que mis pezones se endurecen, pero me controlo. No sé con quien se estará revolcando en estos momentos.

—Alison. —dice mi nombre y escupo el agua que tenía en la boca.

En ese instante me doy cuenta de lo que está pasando, él está ... ¿se está masturbando con mi recuerdo? De tan solo imaginar esa escena, cada parte de mi cuerpo se estremece.

Cada jadeo suyo se vuelve más reconfortante e intenso. Abro los ojos con sorpresa y solo puedo pensar en lo que se debe estar imaginando o recordando.

Los ruidos que salen de su boca se vuelven tan adictivos y deliciosos que me hacen perder la concentración. Mi mente está fascinada por esta situación y mi cuerpo aún más. Debido al hormigueo en mi cuerpo, presiono ligeramente mis piernas en busca de placer, imaginando cómo se debe estar tocando.

Por la llamada escucho como Liam comienza a respirar descontroladamente, gruñe y siento que el nivel de sus movimientos sube ya que el sonido de piel sobre piel me deja sorprendida, tan sorprendida que solo puedo separarme y mirar el celular con los ojos muy abiertos; para luego, continuar escuchando.

Un último gruñido fuerte me da a entender que acaba de llegar. Luego de unos segundos, solo puedo escuchar su respiración de recuperación y rápidamente cuelgo la llamada.

Mantengo la mirada fija en el techo y analizo lo que acaba de pasar. ¿Realmente sucedió esto? Me hago esa pregunta varias veces. Por supuesto que sucedió.

Me siento en la cama y al mirar mi celular, se me ocurre una gran idea. Si se masturba con mi recuerdo, una pequeña foto lo hará sentir peor.

Me saco la camiseta por la cabeza, dejando al descubierto mis pechos ya que no tengo sujetador. Inmediatamente, vuelto a tomar el celular y me dispongo a tomar una selfie, en la qué solo se ven mis pechos y mi boca donde coloco uno de mis dedos para que luzca un poco provocativa, la cual envío con un pequeño texto algo casual:

"La próxima vez que se masturbe pensando en mí, revise si la llamada se colgó o se puso en silencio, Sr. Connor jajaja"

Muerdo mi labio inferior y sonrío por lo que acabo de hacer antes de bloquearlo como lo hizo conmigo. Espero que esa foto te sirva para sus extrañas fantasías.

Tiro mi celular al otro lado de la cama y pienso en lo que pasará mañana. Los padres de Logan se van de la ciudad y Logan misteriosamente me invita a cenar a la mansión. Nada es casualidad, sé perfectamente que todo esto está planeado por Leonel. Sin embargo, yo también tengo algo planeado.

IAN - [Todos tienen su lado oscuro] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora