María, después de un matrimonio fallido y con dos hijos a cuestas consigue el trabajo de su vida como responsable de biblioteca en una prestigiosa Universidad de Madrid. Allí conocerá a un Tom Hiddleston enamorado de la Literatura Inglesa mientras h...
Llegaron a Chueca, el bar de toda la vida estaba abierto y Fran ya tenía preparada su mesa de siempre.
-¡María, Gemma! Qué alegría veros, en vuestra mesa tenéis a Antonio que os lleva algo de ventaja.- ambas rieron.
-¿Pero dónde va mi morena favorita?- gritaba Antonio desde su mesa mirando a María con cariño, pues él no había tenido ocasión de ir a verla al hospital cuando el suceso.
-Tu morena está aquí, y te ha echado muchísimo de menos. Necesito ponerte al día de todo.
Mientras sentados hablaban sobre todo lo sucedido, la cara de Antonio era un poema al enterarse que el profesor de Literatura que tanto le gustaba era el famoso actor que da vida a Loki...
- Osea... ¿Me estás diciendo que te domina Loki Laufeyson?- María asentía.
- Esto es mejor que cualquier novela de fanfic de Wattpad.- Antonio terminaba su copa rápidamente intentando asimilar todo.
- Y ahora resulta que te ignora y te ha mandado a paseo porque lo has ignorado por algo que él ha sacado fuera de lugar...- María asentía.
- Chica... No sé, es todo muy raro. También en verdad que el se preocupó de que no bebieras, tenías el móvil apagado y se cabreó.
- Un poco posesivo!- exclamó Gemma.
- Mirad chicos, sea como sea yo necesito bailar, no aguanto más esta tensión y necesito liberarme. Además sólo voy a tomar una copa y necesito movimiento.
María tomó a Antonio de la mano, y se fueron al centro del pub para bailar mientras Fran puso aquella canción que tanto les gustaba a ambos bailar.
Los acordes apenas habían iniciado cuando Antonio y María comenzaron su show, si alguien sabía lo que necesitaba ella ese era Antonio. Además que Antonio iba a clases de baile moderno con su pareja, Raúl, y tenía cientos de recursos en el bolsillo.
Entre estribillo y estribillo ambos perreaban como si fuera el fin del mundo mientras Gemma desde la mesa alzaba su copa hacia ellos en señal de diversión.
Los Flashes del lugar eran intensos y María bailaba con soltura y meneaba su melena como una auténtica diva. En un momento Antonio la tomó en brazos tomándola de las nalgas y comenzó a darle vueltas mientras los Flashes no cesaban. En un momento María miró hacia la barra del bar y le pareció ver a Tom apalancado bebiendo y con un aspecto algo demacrado.
- ¡¡Antonio bájame!!- decía ella con cierta angustia.
- ¿QUÉ DICES?- gritaba él, imposible era escuchar algo en aquel momento.
- BÁJAME, TOM ESTÁ AQUÍ.- Por fin María pudo hacer que Antonio la entendiera.
María notó la pesaba mirada de Tom sobre ella, respiró profundamente y se acercó dónde él estaba.
- Tom... - Se acercó pero su fría mirada la hizo detenerse hasta tener reacción por su parte.
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