María, después de un matrimonio fallido y con dos hijos a cuestas consigue el trabajo de su vida como responsable de biblioteca en una prestigiosa Universidad de Madrid. Allí conocerá a un Tom Hiddleston enamorado de la Literatura Inglesa mientras h...
El despertador de Tom indicaba el inicio de un nuevo día... Aquel martes 11 de septiembre no sería como él esperaba....
-Martes...mmm...María...
Se dispuso a preparar el desayuno, era su comida favorita del día, no podía evitar sonreír al abrir la despensa y verla repleta de cereales, muffins, avena, galletas... Al final optó por un buen café expreso con galletas de avena y un poco de fruta con queso batido .
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Tom, como buen británico tenía un gusto para la ropa sin precedente, claramente su buen influenciado vestuario sumado al trabajo de sus estilistas como su carrera de actor le hacían uno de los hombres mejor vestidos del mundo. Eso decía una famosa revista de impacto social.
De camino a la Universidad, Tom recordaba las cosas que María le había contado, la conversación con Ben y las buenas noticias que le llegaban de su representante.
-Todo va en su camino.- Dijo Tom susurrando.
Aparcó su jaguar ya arreglado en la antigua plaza de María y fue directo a su clase de Literatura Inglesa, pues él era un profesor bastante exigente con la puntualidad y tenía que dar ejemplo.
-Buenos días Señoras y Señores, abran el libro de Shakespeare de Romeo y Julieta Acto II, Escena I. Léanlo de forma detenida, hagan parejas, ensayen, a final de la clase haremos varias representaciones.
-Pero profesor Hiddelston...- interrumpió de forma rápida Isabel.
-Yes?- Respondió en inglés Tom.
-Esto es clase de Literatura Inglesa, no de teatro o de interpretación.
-Señorita Montiel, de nada sirve leer y comprender las obras de genios como Pinter o Shakespeare sino intentamos vivir o recrear la intensidad de sus palabras. Sigan con las indicaciones, la mejor pareja tendrá un punto más para la evaluación final.
Los alumnos entusiasmados comenzaron a realizar sus ensayos mientras Tom leía el acto que los alumnos iban a interpretar tomando notas a los márgenes.
EN EL HOSPITAL
-Buenos días dormilona...-Dulcemente susurraba en su cara Carmen.
-Mamá... buenos días. ¿Has podido descansar?
-A tu lado viéndote dormir es el mejor descanso que tengo hija.
-Mamá... no me hagas llorar que no hace ni un minuto que estoy despierta.
-¿Tienes hambre cielo?
María asintió como una niña pequeña mientras su madre traía una bandeja con bollería y un café con leche bien caliente.
-Ohhhh, que rico mamá. Gracias, gracias y mil gracias.-María se sentía tan cuidada que había olvidado por un momento dónde estaba y su situación.
