49. Trabajo

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Aunque los pensamientos sobre cómo hablar con Luzu lo de volver a su casa no abandonaban su cabeza también estaba su trabajo.

Desde el día en que el oso los atacó (el oso-oso, no la rata noruega) no dejaba de pensar en que debía buscarlo y encontrar la razón exacta del por qué, ningún animal ataca solo porque sí.

"Solo los humanos" pensó molesto mientras retiraba una trampa de alambre de entre la maleza "quizás pueda pedirle que trabaje conmigo..." aquella opción saltó a su mente, sacudió la cabeza, intentando centrarse en el presente y en el hecho de que obviamente no podía ofrecerle algo como eso al castaño, es decir, él ya tenía un trabajo como consejero y figura pública ¿Por qué querría pasarse el día siendo rastreador entre el barro y los bichos? Además, no podría darle algo parecido a un sueldo fijo.

Suspiró, poniendo el objeto que acababa de quitar con otros en un saco, aquello le tomaría todo el día, esperaba que el tiempo le diera para buscar a aquel oso.

The Animal Inside of YouDonde viven las historias. Descúbrelo ahora