PEQUEÑAS HISTORIAS PABLIZZA/BENJAMILA

Capitulo 15

Se dejó caer en aquella cama, si es que a eso se le podía llamar cama, y suspiró tapándose los ojos con el brazo.

¿Cómo podía tener tanta mala suerte?

Si el día anterior había sido terrible este no se quedaba atrás... Lo que había empezado como una pequeña e inocente protesta para evitar que sustituyesen un pequeño parque por una zona comercial había terminado en una especie de batalla campal.

¡Y lo peor es que le echaban toda la culpa a ella!

No sabía cómo, pero había terminado encerrada en la comisaría del pueblo. Se levantó resignada y se acercó a los barrotes. Estaba de muy mal humor, pero sabía que si quería conseguir algo de provecho era necesario ser amable

-¡Coquito! ¿Puedes venir?- dijo Cami con voz melosa

Coco se acercó con cara de muy pocos amigos y la miró severamente a un par de pasos de la celda

-¡No intentes camelarme! Por mucho que te conozca te voy a tratar como a cualquier otro delincuente

Cami abrió mucho los ojos ¿La estaba llamando delincuente?

Aquello era el colmo, las ganas de ser amable, que si en un principio ya eran escasas, fueron sustituidas ahora por unas terribles ganas de sacar un brazo entre las rejas y partirle la cara a ese imbecil

-¡Delincuente me dices! ¡¿Qué es lo que he hecho para que me encierres aquí?!

-Mejor pregúntame qué es lo que no has hecho...- dijo Coco alzando una ceja- ¿Quieres que empiece a enumerar tus grandes hazañas de hoy?

-Si todos tus policías son unos blandos que no saben poner orden no es mi problema- le pegó una patada a los barrotes- ¡Sácame ya!

- No- dijo Coco negando con la cabeza- Te pienso tener ahí hasta que vea que estás más tranquilita

-¡No me puedes encerrar a la fuerza!

-¿No puedo?- dijo Coco con media sonrisa- Yo creo que sí... para algo soy el comisario aquí

-¡Se te va a caer el pelo idiota! Conozco mis derechos ¡Dame un teléfono! Quiero hacer mi llamada, alguien tendrá que venir a sacarme

Coco negando de nuevo- No te preocupes por eso, ya he realizado yo la llamada por ti

-¿Qué te ha dicho Elsa cuando le has contado que estaba aquí?- dijo Cami algo preocupada

-No te he dicho que haya llamado a Elsa- dijo Coco alejándose hacia su despacho

Cami lo vio meterse en el despacho y cerrar la puerta. Se sentó de nuevo en el camastro

¿No había sido Elsa a la que había avisado?

Entonces sería Mica... casi que lo prefería, su hermana estaría atacada de los nervios por la boda, si es que finalmente había boda claro... ya que después de lo que vio entre ella y Benja la noche anterior se esperaba cuallquier cosa...

Y como era una orgullosa que no quería que nadie se diese cuenta de cómo eso le había dolido no se había ni asomado apenas a hablar con Elsa.

Había madrugado y se había marchado a la protesta esa solamente diciéndole un simple “Adiós, luego más tarde vuelvo”

Se recostó y cerró los ojos, intentando armarse de paciencia para esperar a Mica. Conociéndola tardaría al menos un par de horas en llegar, y si contaba con que se entretendría hablando y tonteando con Coco podían pasar de dos a cuatro horas…

Pero se equivocó, no fueron ni una ni dos horas, no habían pasado más de diez minutos desde que Coco la dejó sola cuando escuchó hablar en la entrada a la persona que había ido a recogerla.