Me parece que todavía pensaste en algo que no me dirás ... Pablo estaba a punto de seguir adelante cuando su mano agarró firmemente la suya.
Marizza miró a su alrededor y, al no encontrar a nadie, susurró.
- Y también quiero entrar a la oficina de Colucci para mirar sus papeles, quizás por ellos intentaron matarlo ...
- ¿Y crees que todavía están en su oficina? ¿Qué impidió que el asesino no los destruyera ya? - el ruido y el pánico que prevaleció casi toda la noche. Ella se encogió de hombros.
- Estoy segura de que puedo encontrar muchas cosas interesantes en su oficina ...
- Iré contigo.
- ¿Para qué? ¿Has pensado en fingir ser mi guardaspalda? - ocultando el placer, sonrió.
- No. También quiero entender toda esta mierda.
- Si claro...
- ¡En serio! Si mi padre está involucrado en todo esto, quiero averiguarlo por mí mismo.
-Está bien, pero no pisotees bajo mis pies.
Se escucharon pasos pesados, alguien estaba subiendo las escaleras.
Y los chicos decidieron no llamar la atención de este hombre, casi con fluidez dirigiéndose hacia arriba.
Pasando rápidamente por encima de la gran mancha de sangre que no se había limpiado, que quedaba después de la herida de Lucas, tiraron del picaporte de la habitación, la puerta estaba abierta.
Una vez en la oficina de Lucas Colucci, los chicos rápidamente cerraron la puerta detrás de ellos con la llave, que aún permanecía en la cerradura, y contuvieron la respiración.
Pero también se hizo el silencio fuera de la puerta.
De repente, alguien tiró del pomo de la puerta varias veces, asustando locamente a los espías.
El chico protegió a la chica detrás de él, sin dejar de permanecer justo enfrente de la puerta.
Después de que alguien se fuera de nuevo, Marizza y Pablo finalmente dieron un suspiro de alivio.
- ¿Qué diablos está pasando aquí?- Pablo siseó. Marizza no tenía prisa por responder, aunque estaba ansiosa por compartir información, y sus pensamientos con Pablo.
Pero de todos modos, no podía confiar completamente en él, además, no solo guardaba su secreto, sino el de Manu.
Mientras el tipo seguía escuchando los crujidos en el pasillo, Marizza comenzó a examinar los papeles sobre la mesa, literalmente haciendo un lío en ella. - ¿No te parece extraño que la puerta estuviera abierta?
- No. - Marizza respondió rápidamente. - Esto es lógico, Lucas, muy probablemente, escuchó algo, salió de la oficina y le dispararon. O simplemente no tuvo tiempo de cerrar la puerta con llave.
- Bueno, sí, tal vez ... ¿Qué estamos buscando?
- Ni siquiera yo lo sé- ella se encogió de hombros. - No entiendo nada de esto, unos papeles, números, casi sin inscripciones ...
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PEQUEÑAS HISTORIAS PABLIZZA/BENJAMILA
Historia CortaHistorias cortas de Pablizza y Benjamila Son historias de pocos capítulos las publicaré en esta sección No habrá maratones ya que son historias que no tienen muchos capítulos y serán actualizadas diariamente Pueden haber también historias que incl...