Por supuesto que eras suya
Con ese pensamiento, Justin abandono tus labios para observarte, ¿Cuándo fue la última vez que no dejo encerrado en un baúl lo que el sentía? Últimamente se había tratado de retenerse, de mantenerse en la línea y en este momento solo deseaba darte lo que pedias y lo que el claramente quería, sonrió ante la imagen que se mostraba en frente de él, tus labios estaban entre abiertos, empezaban a hincharse y con una tonalidad rojiza, encantadora, seductora pero en tus ojos entrecerrados se veía el leve atisbo de inocencia, sentía con más claridad como tu pecho subía y bajaba rozando el suyo. Alzando los nudillos los coloco encima de esa mejilla sonrojada que estaba en frente de él.
-¿Qué paso? [Profunda, así estaba tu voz]
-No hay manera en que no me sienta posesivo contigo [de alguna manera tenía que hacértelo saber] Te siento y te veo como parte de mí.
- Justin [el leve toque de tu mano colocándose en tu mejilla, lo cautivo] Así me siento yo.
Ahora su mirada se volvió a desviar a tus labios, volviendo a dejar a centímetros sus bocas, sintió tu respiración mezclarse con la de suya, cálida y agitada, sus narices rozándose, eras tan delicada bajo el, su cuerpo se convertía en tu protección en este momento, te cubría por completo y sentía las vibraciones que surgían de ti, eso fue lo suficiente para terminar de descender capturando tus labios, suaves y dulces, para cuando se iba a dedicar a abrirte los labios ya estos lo estaban esperando con una calurosa bienvenida, su lengua se introdujo buscando la tuya y en cuanto se encontraron un gruñido proveniente de él se le escapo mientras sus lenguas danzaban y sus labios estaban sincronizados.
Había extrañado esto, se convirtió en esclavo de tus besos, cuando rozaste con ansias sus colmillos sintió tu gemido ahogado en el mismo instante que el también gimió. Deteniéndose por un momento para dejar que tomaras aire sintió todo lo que irradiaba tu cuerpo...
Amor
Deseo
Calor
Excitación
Dulzura
Ternura.
Esto le dio el paso para que abandonara tus labios y bajara por tu barbilla dejando un leve mordido, siguiera hasta tu cuello dejando un sendero de besos que te hacia estremecer debajo de el.
Si, esto era sentirse en las nubes, Justin no solo parecía asegurarte, recalcarte y afirmarte que nadie te besaría jamás como él lo hacía, que ahora en ti había una marca que te hacia privado a él y esa era una sensación incomparable... Otra ola llena de ese nuevo sentir, que cosquillaba tu pecho, te atravesó al sentir como Justin rasguñaba tu cuello levemente con sus colmillos, esos caninos que te hacían estremecer y sentir ráfagas de fuego en tu interior.
-Hazlo Justin [¿Esa era tu voz? Sonabas diferente, ida, una voz profunda] Márcame, toma de mí.
Y eso no pareció ser un problema porque esos caninos rasgaron tu piel a pocos centímetros de la marca pasada, eso era invadir tu cuerpo de sensaciones desconocidas que en este momento estabas deseando saber con cada exactitud, con cada latido de tu corazón. Una sola succionada, larga y perezosa fue lo que ocurrió en tu cuello para luego sentir como lamia la herida y depositaba un beso.
-No hay que abusar, mi encantadora dama [susurro en tu oído]
Solo respondiste con un "uhumm" porque ahorita lo que menos podías era hablar y menos cuando sus dientes encajaron con el lóbulo de tu oreja en un leve pellizco, cerraste los ojos y dejaste que el momento te elevara, esto era mucho con demasiado, ¿Era posible que el ser dulce y seductor al mismo tiempo fuera legal?, al parecer sí.
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Love Slayer ~ J.B&Tú
RomancePor todo lo real, esto era una locura. Las preguntas no eran capaces ni de ser respondidas por sí misma, no conocía realmente lo que era la satisfacción de tener un escape para todo, no es que fuera a perder la poquita cordura en su mente, pero ¡No...