Capítulo 5 - Una mordida

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Se acerco en solo segundos a Jason y lo derribo contra el suelo, la sonrisa de satisfacción en su cara alteraba la paciencia de Justin, con un movimiento rápido se llevo la muñeca de su hermano a los labios. Sangre tan fuerte como se era su sabor, tan fuerte como se sentía cada lamida pero en el momento que iba a comer a succionar, el estomago se le contrajo, no, no iba a hacer esto y menos con sangre de su hermano, no de esta manera

En el momento en que Justin se aparto golpeando su cuerpo con fuerza contra el piso, escucho una maldición que no vino de el y luego un gruñido salvaje.

-¡NO! [Dijo Jason] ¡Debes hacerlo!

Justin le devolvió la mirada más feroz que pudo, tenía que convencer a su hermano de alguna manera, aunque tuviera que ir a todas con el.

-¡Te dije que no Jason! [Se levanto del suelo rápidamente] ¡Aléjate de mi o será peor!

-¡Haz lo que te venga en gana, hermano!

Sin más que decir, vio como Jason se lamió su propia sangre curando la herida y subió las escaleras a grandes zancadas. Ahora el sentimiento de culpa invadió a Justin, sabía que su hermano lo hacía por ayudarlo de alguna manera pero estaba decidido a encontrar otra manera de satisfacer sus ganas de alimentarse, pero ¿Cómo? Cada vez era más insoportable. Quemaba y no sabía que más podría hacer

Suspirando se encamino hacia las escaleras esperando que el dolor en su garganta y estomago no se hiciera más fuerte.

A solo algunas horas del lugar en donde se encontraba, el mandato gobernaba, los gritos proferidos por quien era considerado el jefe sonaban por todas partes en la habitación de reuniones, pero eran gritos que no eran escuchados por nadie salvo por el mismo, estaba mirando fijamente su libro de anotaciones mientras su paciencia se agotaba.

-¡De alguna manera conseguiré su punto débil! [Grito para si mismo] Cualquiera de los dos, me llevaran a su punto débil.

No era odio lo que había en el, era resentimiento, uno que había estado ocultando por tanto tiempo y no sabía cómo sacarlo. Durante años encerrado en este lugar, dándolo por olvidado, lo volverían loco pero no se dejaría llevar por su inconsciencia, no buscaba venganza, buscaba una manera de demostrar su dolor.

-Y creo que sus debilidades, pronto serán demostradas.

Miro el papel fijamente con sus ojos entrecerrados, leyendo las palabras que siempre redactaba sin ningún fin: "Por lo que alguna vez ame".

Este sueño era tan real. Justin estaba corriendo por las sombras de la calle como un ser catalogado como "sobrenatural", dejando se llevar por sus instintos, siguiendo ese dulce aroma que llegaba a su olfato, tan suave y elegante, tan rico, si, era durazno.

Siguió corriendo hasta que se paró en seco antes de perder el camino a donde tenía que ir, aun en sueños el dolor del hambre y su garganta seca lo perseguía. Sus colmillos estaban crecidos pero los escondía bajo sus labios, paso la lengua por ellos sintiendo como se rasgaba.

Hazlo, lo necesitas, grito una voz que no conocía.

Volteando buscando la persona que hablo, no encontró nada. Insistía, este sueño era muy real pero tenía que ser un sueño ¿no?

Siguió corriendo sintiendo el frío viento de la noche rozar su cara y hacer erizar los vellos de sus brazos pero el calor interno que sentía mas la adrenalina no lo hacían parar, quería algo pero no sabía que. Por lo menos no lo sabía hasta que se paro nuevamente en seco delante de una quinta de dos pisos. ¿Qué hacia ahí?

El hambre que se hizo más fuerte ahora que ese aroma a durazno llego a su olfato otra vez y aquí era más profundo, sintió como su boca se abriera y absorbiera más de ese delicioso néctar. Tenía tanto tiempo sin sentir esto, en realidad, nunca había sentido unas ganas de alimentarse de este tipo, alimentarse de otro vampiro lo hacía más fuerte que alimentarse de un humano, pero en este momento, lo necesitaba, aunque no quisiera dañar a ningún humano, no estaba en el ni en ningunos de la sociedad, mas bien, los cuidaban.

Llevado por ese aroma entro a la casa, lo cual no le fue difícil, solo fue cuestión de manipular la cerradura y listo. Esto estaba mal, no debía hacer esto, sin pensar en lo que era razonable entro y prácticamente se disparo al segundo piso.

Ahora que estaba en frente de lo que venía, conoció a la mujer, un frío lo invadió, recordándole como le decía esta tarde que era ciega, como se manejaba con aquellos movimientos seguros, tuvo que tragar con fuerza al sentir sus colmillos revelarse y se llevo una mano a la mejilla sobre las heridas que le había hecho, ahora completamente curadas.

Quería tomar de ti. Y esto no era un sueño, se había dejado llevar por el aroma que esta tarde se había impregnado en él, con la única humana que había hablado en días, tal vez semanas. Cuando te moviste en las sabanas fue la perdición total de su autocontrol. Corrió a tu lado, colocándose sobre ti, sin siquiera despertarte, acaricio tus mejillas y arrepintiéndose por lo que iba a hacer pero ya no podía aguantar.

Había perdido la batalla.

Clavo sus afincados colmillos en la piel sensible y suave de tu cuello, sintiendo la vena bombear en sus labios y la sangre fluir en sus colmillos y lengua, tan dulce como era la sangre limpia y femenina, la cual no era capaz de satisfacer a un vampiro pero si de calmar la sed. En cuanto sentiste el contacto gritaste con horror pero eso no lo detuvo.

Justin sintió el gemido que lanzaste aun inconsciente, sintió los golpes tuyos en contra de su cuerpo que fueron disminuyendo y haciéndose más suaves mientras más sentías el placer de la mordida. Pero el placer propio disminuye cuando alzo sus ojos al verte, sabía que no podías ver pero vio el horror mezclado con el placer en tu cara.

Apartándose rápidamente, caíste en la almohada, temblando, sintiéndote débil, pero totalmente asustada, tus brazos no respondían a los golpes que querías dar y aun el peso estaba sobre ti. Solo te quedaba gritar, lo cual hiciste esperando que fueran lo suficientes fuerte.

-Calma [te apaciguo la voz masculina ronca] Mírame a los ojos.

-¡SUELTAME! [Volviste a gritar]

Justin se sintió estúpido al pedir que lo miraras pero estaba aun pasmado por haberse dejado llevar por sus instintos y haber hecho y mas con una mujer que le resultaba hermosa, pero no le llamaba la atención por así decirlo, en ningún momento deseo morderte y ahora lo había dicho.

Agarro tu cara en sus manos fuertes y dejaste de gritar en el momento que lo hizo, simplemente caíste dormida al usar su poder hipnotizador.

-Vas a dormir [susurro] y cuando despiertes, pensaras que todo es un sueño

Caíste flácida en la cama sin tener más nada en tu mente.

Negando con la cabeza, Justin bajo los labios y lamió tu cuello para sellar un poco las heridas. El sabor de sangre lo hizo gemir, ahora resistiría por semanas pero ¿luego que haría?, tendría que pedirle a una vampira, no necesitaba seguir con esto. Se sentó al borde de la cama y siguió allí por minutos, tal vez horas, no sabía.

CONTINUARA

Otro !! ;)

Love Slayer ~ J.B&TúDonde viven las historias. Descúbrelo ahora