Love Slayer ~ J.B&Tú

Capitulo 3 - Mirame

Apenas se levanto esa mañana, sintió todos su adrenalina dispararse, no perdió tiempo en asearse nuevamente, colocándose unos simples vaqueros, una camisa sin mangas blanca y tenis. Observo detenidamente el rasguño en su cara y quiso gruñir por eso pero mantuvo su humor para el mismo, la herida ya empezaba a desaparecer. Antes de llegar a las escaleras hecho un vistazo a la habitación de su hermano, quien estaba cubierto completamente con las sabanas, bajo las escaleras y agarro su llave del carro que estaba sobre el mesón y se dirigió a el mundo exterior.

Lucho consigo mismo para no sentir como el sol caía sobre él con tanta intensidad, le producía calor por dentro pero no el calor que te hacia sudar, sino sentirte incomodo y ardiente

Puso el carro en marcha apenas estuvo adentro de él y encendió la radio para que sonara una música electro pop y se dirigió hacia la cafetería que mas frecuentaba. En todo el camino estuvo atento a la musica y su destino, en cuanto llego y se estaciono, Salió del carro, sintiendo la necesidad de comer algo rápido, el hambre era insoportable, mientras caminaba hacia la cafetería hecho un vistazo a la clínica que estaba al lado, distrayéndose por un momento sin entender porqué.

-Buenos días Sr. Bieber [dijo una voz femenina]

Alzo la vista rápidamente hacia la mujer morena que estaba en la entrada de la cafetería, le sonrió y sintió de nuevo como la mujer se deslumbraba con él, ¿Algún día pararían con eso?, es decir, no era la máxima belleza del mundo. Bueno desde su punto, podía ser un hombre sin muchas preocupaciones, realmente hermoso con sus ojos avellanas que brillaban en extremo cuando la luz le daba, cabello rebajado a los lados dejando una pequeña cresta, perfilado, labios que encajaban en lo deseable y un cuerpo que cada día tomaba un poco mas de crecimiento pero no se terminaría de acostumbrar a las miradas que pedían mas de lo que era, era deslumbrante y enriquecedor sentirse deseado pero a veces era exhaustivo

-Hola [le devolvió el saludo]

Se adentro al sitio, sintiéndose nuevamente un poco fuera de lugar aquí, no era por nivel social, para nada sino por los elegantes personajes que se sentaban en esta cafetería, con trajes de negocios y el simplemente con una ropa casual, ante todo la comodidad. En Cuanto pidió la larga lista de lo que quería, se recostó sobre el asiento mirando a las afueras del lugar.

Se encogió, primero su cuerpo estaba sintiendo un calor insoportable, ahora sentía que vibraciones extrañas se desplazaban por su pecho. ¿Esto tenía algo que ver con la que sucedía con él, o no?

Estabas distraída en la cafetería al lado de la clínica que eras prácticamente la dueña, así como también eras cirujana, en los momentos que eras bueno para ello, ahora no sabias en que realmente eras buena. Colocaste tu cabeza entre tus manos deseando haber podido dormir más pero al parecer querer dormir ocho horas no era permitido en tus pensamientos. En cuanto un rock pesado sonó en tus audífonos lo cambiaste por algo más suave, no querías un dolor de cabeza, no ahora.

-Señorita, aquí esta su orden [dijo una voz suave]

-Gracias

Alzaste la mirada por instinto, nuevamente, y sonreíste de manera amable. Buscaste con la mano la bebida para llevarte el red bull a tus labios, necesitabas un poco de esto. En tus veinte años, no considerabas necesario el café cuando tenías una bebida energética como esta.

Un perfume masculino llego a ti, no sabias de donde provenía pero había invadido tu espacio, jugaste con el borde del red bull hasta que sentiste una presencia desde tu espalda. Levantaste la mirada bruscamente.

-Oh, eres tu

Esa voz te causo un frió interior que recorrió todo tu cuerpo, estuviste a punto de gritar pero ¿Por qué lo harías?, te limitaste a apartar la mirada y fijarla en la mesa. Apretaste tus nudillos hasta sentir que habías dejado de temblar.