50

6 6 18
                                    

[🎵🎵🎵]

La noticia se expandió rápidamente. Fue cuestión de minutos de que los chicos se presentaran sudorosos en casa de Jin.

—Pero ¿y Jungkook?

—No coge el teléfono. Creemos... que necesita tiempo.

Yoongi, Taehyung y Namjoon pasaron y corrieron junto a Jin piso arriba. La puerta de la habitación de Hye-yoon estaba entreabierta y Hoseok estaba sentado frente a ella, abrazando sus piernas. Namjoon jadeó y sintió una presión en el pecho.

Hobi...—llamó Yoongi con un hilo de voz.

Su mirada emanaba dolor, y esos ojos que siempre brillaban parecieron haberse sumido en un hondo pozo oscuro. Hoseok se levantó y lamió sus labios, incapaz de establecer contacto visual con ninguno porque sabía que estaban llorando, y si los veía, tiraría a la basura todo su esfuerzo al intentar calmarse.

—¡No puede irse! ¿Y si su corazón vuelve a parar?

—Lo siento, doctor Kim, pero estos chicos...

—¿¡Qué importa!? ¿¡Qué importa que bailen o que hayan huido para salvar sus vidas!? ¡Dígame algo que esté mal en lo que hacen!

Los gritos de Hye-yoon se escucharon por toda la casa. Jeon-ha llegó junto a Felix y Jungwon.

Los recién llegados vieron la escena, y lo entendieron todo.

—¿Todo esto... ha pasado por la puta comida...?

—Namjoon, nosotros podríamos haberle hecho parar y ponerse antes en tratamiento. Pero...—Hoseok tragó en seco—... de verdad me sentía mal al obligarle. ¡Me di cuenta aquel día en la sala de baile, joder!

—Hoseok, no es tu culpa... No es la de nadie.

—¡Sí, sí que es culpa mía, Taehyung! He estado viviendo con él por meses. Veía lo que comía, ¡lo veía salir temblando del jodido baño y tenéis que creerme cuando digo que solo comía una vez al día! A veces, ni eso. Y no hice nada... Nada para salvarlo...

Taehyung fue rápido, y tomó entre sus brazos a Hoseok antes de que este se derrumbara por completo. Si iba a hacerlo, sería con él.

¿Decir que todo iba bien, era lo correcto? ¿Decirlo... con el corazón dolido y la imagen de la última sonrisa de aquel chico en la cabeza... era lo correcto?

—¿Entonces... Jimin...?

—Basta, Jungwon—lo detuvo Felix—. Vámonos.

Felix suspiró tras mirar a todos los chicos.

—Lo siento—dijo, antes de hacer una reverencia de noventa grados e irse detrás de Jungwon.

Jeon-ha también decidió irse: los chicos necesitaban tiempo a solas.

Toda una vida luchando para que, ahora, se llevaran a un alma bondadosa, víctima de los estereotipos de la puta sociedad y víctima de él mismo. El décimo cumpleaños de Jimin fue el último que celebró, y nadie a excepción de sus padres sabía el motivo. Puede que solo se cansara de esa atención exagerada y la vergüenza que daba cuando llegaba la hora de cantarle el Cumpleaños Feliz. Esa fue la mentira que les hizo creer a todos, incluso a él mismo. Pero... ya estaba. Todo había cobrado sentido ahora. Todos los "imprevistos" que le salían a Jimin cuando se quedaba para salir a comer no eran más que puñaladas en su cuerpo. Y ellos de imbéciles, siempre lo dejaron pasar aún notando el cambio de tono a través del teléfono cuando le decían que fuera con ellos y se olvidara por un día de todo.

Siempre terminaba gritando.

Y siempre lloraba después de las llamadas.

La puerta de la habitación de los señores Kim se abrió completamente, y de ella salió Hye-yoon echando humo. Sin embargo, los músculos de su rostro se calmaron al ver a los chicos.

~Black Swan~ (BTS) (FINALIZADA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora