34. Fat Gum

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Patrullando con Tamaki, Kirishima y Fat Gum un grupo de de criminales huyendo se les atravesó por el camino. Fat Gum logró atrapar a todos menos 1 que logró escapar pero que fue atrapado por Tamaki usando tentaculos de pulpo y una almeja.

—Me pregunto si lo habré hecho bien...

—¿Es una broma?  ¡A sido genial! — dijo el pelirojo emocionado.

—Suneater es tan fuerte como los profesionales solo necesita algo de confianza ¿no creeis? — preguntó a los civiles expectantes creando una oleada de aplauso y gritos de ánimo  para el residente cuando un reflejo metálico atrajo la atención de Kata.

—¡Un arma! — advirtió creando un muro frente la bala cuando escuchó un disparo a sus espaldas.

—¡Suneater! — gritó el pelirojo cuando un tercer disparo le dió pero ninguno de los dos parecía herido.

Ambos pistoleros se dieron a la fuga y cada uno de los residentes de primer año fué tras uno. Una de las aves de Kata seguía al sospechoso por el cielo para que no pueda camuflarse entre la multitud en pánico. Tras una corta persecución logró acorralarlo en una calle que a pesar de estar más vacía que las calles principales tenía algunos civiles.

—Si me hubiera fijado en que me perseguía una cría no me habría molestado en huír. — se burló apuntando la chica con el arma.

    Kata invocó a tres lobos que rodearon al criminal quien apuntó el arma hacia ellos sin saber a cual disparar. Mientras estaba distraído con ellos una sombra lo rodeó inmovilizándolo con el arma apuntada hacia el suelo. Trataba de resistirse inútilmente y Kata le quitó el arma, el cargador aún contenía una bala. Cuando lo soltó y ató las muñecas con unas bridas un vial rojo cayó al suelo y lo guardó junto al arma. Algunos civiles comenzaron a acercarse a la chica agradeciendo su intervención a lo que no supo responder.

—Perdonen tengo que entregarlo a la policía...

—¿Como te llamas chica? — preguntó un hombre.

—Ka- digo Umbra, soy Umbra

—Gracias Umbra — agradecieron varios de los civiles presentes.

—¡Gracias por su apoyo! — Kata retomó al villano dispuesta a reunirse con sus compañeros... —Perdonen, ¿Alguien sabe dónde está la calle principal?

    Con algo de ayuda Kata se reunió con Tamaki y los policías que se llevaron a los sospechosos. Kata examinó el lugar con la mirada sin encontrar rastro de Fat Gum o Redriot.

—Oye Tamaki ¿Aún no han vuelto?

—No...

—Voy a comprobar si están bien. — comenzó a caminar pero Tamaki la detuvo.

—¿Por qué harías eso?

—¿A ti no te preocupan?

Soy una mala persona por no ir a por ellos... pero alguien como yo y encima sin quirk de todas formas sería un estorbo...

No quería que te lo tomaras así. Tienes razón no tengo razones para preocuparme... — trató de consolar al chico. —Espera, ¿Has dicho que ya no tienes quirk? — Dejó de preocuparse por el resto para entrar en pánico «¿Esas balas pueden eliminar quirks? ¿Es permanente? »

—Parece que es temporal, poco a poco lo estoy recuperando. — Kata soltó un suspiro de alivio al escucha esas palabras. —Sabes, al principio creía que eras como Mirio. Tal vez no tan alegre, no tan brillante, pero igual de segura y analítica en combate. Pero... en el fondo estás aterrada.

—¿Quieres decir que soy más como tú?

Lo sabía, los de primero creen que soy un cobarde, un inú-

—Ni se te ocurra decir eso. —El mayor solo se escondía bajo su capucha. — Ya sé. ¿Crees que Fat Gum es un mentiroso?

—Claro, claro que no.

—Él dijo que eras tan fuerte como un profesional.

—pero...

—Fat Gum es un profesional ¿verdad?

—Si...

—¿Crees que es un inútil? ¿O débil? ¿O cobarde?

—¿Cómo podría decir algo así?

Kata levantó la barbilla del chico obligándole a mirarla y esbozó una sonrisa inocente —Entonces deja de convencerte a ti mismo de ello. — el chico le dió la espalda y bajó su capucha hasta cubrir todo su rostro.

Tal vez no estas tan lejos del sol...

Fat Gum y Kirishima no tardaron en reunirse con ellos y Kata pudo entregar el arma con la bala y el vial que resultó ser una copia de una droga potenciadora de quirks.

"Memento vivire" Acuérdate de vivir.

Mha - El pasar de las nubesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora