73. Ícaro

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 Tras el golpe de gracia, apareció de entre el polvo con un aspecto rejuvenecido e ileso.

—Te felicito Endeavour. Nunca creí que necesitaría esto con alguien como tú.

—Rebobina... Eso es de los experimentos con el don de Eri-chan. — entendió Kata.

Con una velocidad sobrehumana, incluso en una sociedad de dones, apareció al lado de una heroína y le arrebató el don y la capa. —Con esta rebobinación, la muerte es inevitable. Pero mi sueño ya ha pasado a Tomura. Ya solo me queda salvarle de la trampa en la que lo habéis metido.

—¿Por qué no nos hablas de tu sueño? — trató de ganar tiempo Hawks. Mientras Kata no miraba, el villano retiró sus cuchillas dejando a su maestro desangrarse a pesar de su fútil intento de tapar la mayor de las heridas.

Mientras se centraban en el autoproclamado rey de los demonios, dos portales aparecieron en medio de la nada. Si los problemas no sobraban, de uno de ellos apareció Touya Todoroki completamente carbonizado en busca de su padre. Del otro, un ejército de Twices que dejó a todos consternados. Froppy y Uravity salieron de aquel mismo portal por lo que debía ser Toga.

El fuego de Dabi hizo que cualquier persona no usuaria de un don similar tuviera que alejarse para no ser carbonizado y los dobles de Twice invadían el resto del campo de batalla. Entre todo el caos, All For One trató de dirigirse hacia Shigaraki pero Hawks le detuvo mientras ordenaba a Endeavour detener a su hijo ya que era el único capaz de acercarse.

All for One atacó al héroe alado haciéndole explotar en frente de sus pupilos quienes solo podían ver impotentes la escena. En apenas un instante su mentor se desvanecía como pólvora en el viento y en los segundos sin aliento de los estudiantes el rostro moribundo de su profesor de pronto se convirtió en uno que flirteaba con su enemigo para después desaparecer. Anonadados, los internos vieron llegar a los alumnos de Shiketsu, y entre ellos, Camie, la encargada de aquella ilusión. Hikari se acercó a Kata, quien volvió a tierra firme, visiblemente concentrada en el suelo bajo sus pies.

Esta invocó un pájaro que revoloteó alegremente alrededor de su amiga. —Te llevará dónde quieras, tienes que decirle a Inasa que no puede haber nadie de los nuestros en el suelo. Y gana tiempo. — La chica no dudó ni un segundo en hacer lo ordenado y un viento huracanado empezó a levantarse.

—¡All For One! ¡¿Cómo puedes decir que el viento está a tu favor si soy yo quien lo hace soplar?!

—Habéis perdido a la única persona que podía hacerme frente por luchar contra su hijo. — se burló en antagonista. — Esto no es valentía sino imprudencia. Vosotros habéis nacido en el periodo de paz creado por All Might. No tenéis idea de a quien os enfrentáis. — Empezó a usar una combinación de dones que impedía a cualquiera acercarse sin daño.

—¡Todo despejado! —ante el aviso de su amiga, Kata se puso en marcha.

Esa montaña estaba llena de cuevas subterráneas donde Kata creó una serpiente gigante que recorría los pasadizos de la cueva y era hora de hacerla salir a la luz. El suelo bajo sus pies empezó a temblar para que una cabeza, más parecida a la de un dragón que a la de una serpiente, la levantara. Las escamas eran puntiagudas además de un dorso cubierto de pinchos. Era Kurt, la serpiente mitológica que había recreado especialmente para ese momento. La tierra levantada apagó parte de las llamas además de eliminar a algunos de los frágiles dobles de Twice. Junto a ella, Dark Shadow, más fuerte que nunca, había acumulado oscuridad para convertirse en una bestia descomunal.

—¿Se puede saber quién te ha coronado rey de las tinieblas? — Unas nubes taparon el sol y Camie creó la ilusión de un cielo nocturno permitiendo que ambos pudieran usar su poder sin miedo a que poco a poco la luz los consumiera.

Ambos chicos derribaron al enemigo, era invencible, sí, pero ahora el tiempo estaba de su parte. Para salir de aquella encrucijada usó un quirk para crear una explosión que los alejara. Llegó Gigantomaquia controlado por Shinso además de Mt. Lady y otros héroes. Todos atacaban al villano que cada vez era más joven. Pero la juventud le permitió usar sus dones en máxima potencia. Un rayo de luz y todos fueron abatidos como si no fueran más que... Moscas.

•••

Tras la luz cegadora Katana poco a poco recuperaba la visión pero el paisaje que descubrió no era el mismo. Seguía en aquella montaña, tenía la certeza de ello pero ya no quedaba rastro ni del bosque ni de las llamas. Tan solo una tierra árida repleta de héroes caídos. Inconscientes o al borde de la inconsciencia, o eso quiso creer.

Katana no perdió la consciencia. Junto a Tokoyami ella estaba en primera línea. Era la primera en recibir el impacto y, aunque Kurt no la protegía y su resistencia era menor que la de cualquiera de los héroes allí, ella seguía consciente. Algo o alguien había amortiguado el rayo. — Hikari... — trató de articular con la sangre borboteando en su garganta. ¿Había usado demasiado su quirk? Eso ahora no importaba. Kata se incorporó sintiendo la piel quemada y desgarrada que cubría más superficie que la anterior vez. A pocos metros de ella, su amiga de infancia yacía cubierta de polvo con el cuerpo casi carbonizado.

—Tú no debías acabar así. — Se martirizó Hikari, ni siquiera su don podía suprimir del todo aquel ataque. No lo suficiente para salvar del todo a su amiga.

—Sigues viva. — suspiró aliviada cuando por el rabillo del ojo vio a AFO con su maestro.

—Tienes que irte. — dijo con una dificultad preocupante.

—Estás destrozada necesitas atención o-

—Escala de glasgow, 14. — interrumpió

—No tienes ni idea de qué significa eso. — rio con los ojos húmedos.

—No, pero cuando... cuando lo decías parecía bueno. — rio con un quejido de dolor. — Vete, aún no hemos perdido.

—Volveré, sigue con vida. No puedo crear nuestra agencia yo sola. — "Eres muy joven para empezar a tener arrepentimientos" recordó las palabras de Recovery Girl antes de alejarse.

Kata llegó hasta su maestro. AFO lo tenía agarrado por el cuello. Con sus últimas fuerzas lo había apuñalado con su katana mientras robaban su don. Sus plumas desaparecieron pero esta vez no volverán. Era muy tarde.

•••

—¿Por qué Hawks? ¿Por qué ese nombre de héroe? —preguntó la interna. El héroe extendió una de las alas, mostrando la evidencia. —Ya se que tu nombre viene de halcón pero no existe ninguno con alas tan rojas así que se me ha ocurrido buscar a tus primos. Tal vez encontremos algo que te encaje más como... —dijo sacando una foto de su carpeta —... el cardenal rojo o... el chipe rojo ¿Qué te parece?

—¿Te estás burlando de mí?

—¿Un canario rojo? — siguió entre risas.

El héroe tomó la foto. —No me creo que eso exista. — dijo mientras intentaba ver si  había sido retocada. —Parece que pasó demasiado cerca de unos grafiteros.

—O... Queda mi favorito, el guacamayo.

—¿Y el amarillo y el azul? ¿Me lo tiño?

—Seguro que quedaría bien para carnaval.

—Y a Tokoyami lo convertimos en paloma de la paz. — dijo algo más entusiasmado con la idea.

—A mi no me metáis. — dijo el compañero que se había quedado al margen hasta ahora, ya acostumbrado a las tonterías de sus compañeros, los ignoraba mientras no le incumbiera.

•••

—Ya es suficiente Hawks, ya lo diste todo. Incluso con ese aspecto deplorable has dado una buena pelea. — dijo All For One. —Ahora me robaré los dones de tus chicos y acabaré lo que empezasteis. Empezando por tu chico pájaro.

"feci quod potui, faciant meliora potentes": he hecho lo que he podido; déjalo a aquellos que pueden

Mha - El pasar de las nubesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora