Noche de chicas Schwarz_Nacht: Parte 10

2 0 0
                                    

Todas, salvo Sakura, quedaron fuera de combate. Sayaka y Kyouko colgaban una sobre la otra en la orilla del televisor; el equilibrio era impresionante. Mami terminó metida en el refrigerador; pescaría un resfriado si no la sacaban cuanto antes. Homura se quedó dormida sobre el cuerpo de Madoka, intentaba protegerla de lo que Rilet pudiera hacerle. Y la causa de todo el desastre dormía plácidamente en el suelo, roncando a todo pulmón.

—Tal vez sea hora de despertarlas...

Como si esas palabras fueran un despertador, Rilet se enderezó de golpe. Se apretó la cabeza con ambas manos.

—¿Qué pasó? ¿Por qué me duele la cabeza?

—¿Ya tienes resaca? —Recogía las fichas del juego de mesa del suelo—. Te embriagas rápido y lo superas rápido...

—¿Embriagar?

Le dio un vistazo a todo: era una zona de guerra. Incluso uno de los colchones del sofá estaba roto.

—Ah, entiendo... —Caminó perezosamente a la cocina, encontró todo lo que había en el refrigerador, incluso las rejillas, esparcidas sobre el suelo; del refrigerador cerrado salía un mechón rubio de cabellos—. Esta fui yo, ¿verdad?

—No, fue Sayaka-chan... —rascó su mejilla—. No sé por qué se te unió en el desastre... Pensaba sacar a Mami-chan ahora, pero...

Rilet abrió el refrigerador sin dejarla terminar. Mami estaba desnuda.

—En serio, ¿qué pasó aquí?

«Rilet-chan normal es alegre, agresiva y sin sentido común, ebria es alegre y sin sentido común y con resaca... —se rio entre dientes— se parece a Armando-san.»

Pasaron unos diez o quince minutos hasta que todo estuvo de nuevo como antes de que Rilet se volviera loca. Las chicas volvían a estar despiertas y sentadas alrededor de la mesa.

—¡Por Dios, Sayaka-san! —Sí, ahora sería san y no chan; resopló por la nariz—. ¡Dejar inconsciente a alguien y meterlo a la nevera desnudo...!

—Vamos, Mami, no es para tanto...

La rubia se abrazó a sí misma y se pegó a Akemi, ya no confiaría tan fácilmente en la hija de la casa Miki.

—Bien, pues deberíamos ir a dormir, ya es bastante tarde —peinaba su negro cabello lacio—. Yo pido dormir con Madoka y Sakura, ustedes arréglense como puedan.

—¿¡Eh!? ¡Eso no es justo, yo soy la amiga de la infancia, mi derecho es dormir con Madoka!

—¿En serio? Qué pensamiento tan más infantil. Supongo que lo mismo pensabas acerca de Kamijou Kyousuke.

—¡Repite eso! —Golpeó la mesa con ambas manos—. ¿¡Quieres arreglar las cosas como chicas mágicas!?

—Ja —eso fue fingido—. ¿Estás segura? —Lanzó su cabello hacia atrás—. Cuando se trata de combate, eres una niña en pañales comparada conmigo.

Estaba a punto de levantarse, pero Sakura levantó su mano.

—Esto... Bueno, a decir verdad —se puso nerviosa, sus ojos se movían de un lado para otro—. ¿Podemos ponerle un castigo a Rilet-chan?

—¿Eso por qué, pato?

—Bueno... Tú causaste todo ese desastre —levantó la barbilla y juntó las yemas de sus dedos—. Así que reflexioné y llegué a la conclusión de que debías tener un castigo como consecuencia.

—Uuhgg...

—¡Yo estoy a favor! —Levantó su mano de inmediato, tal vez sólo quería ver arder el mundo.

—Yo estoy a favor, pero de que la castigada seas tú, Sayaka-san.

—¡Yo también quiero castigo para Sayaka, ella empezó desde antes!

—Sí, no estaría mal darles una lección. ¿Qué opinas, Madoka?

—¿Yo...? —Llevó su vista al techo—. Tal vez deberíamos seguir con la dinámica, es la única que falta.

Las demás le echaron una mirada a Rilet.

—Pero ya les dije que yo no...

—Aunque sea alguna ocasión en que hicieron que tu corazón se detuviera, no tiene que ser Dai-kun.

—Uuuhhggg... —Suspiró—. Está bien, pato... Supongo que hay una así...

Puella Magi Madoka Magica: 青 怪物 の 物語 (Ao kaibutsu no monogatari)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora