Era sencillo, demasiado que le causaba escalofríos. Solo debía matarlo y así Seojoon lograría su cometido de una vez por todas. Jimin quedaría vulnerable por la pérdida, lo que le dejaría al otro el camino libre para moldearlo como lo hizo cuando era un niño.
Eso fue lo que Yoongi creyó en un principio, pero no, aún estaba aquí.
Lo sabía, su suegro lo necesitaba para algo. Seojoon lo necesitaba, era solo una mera herramienta, pero no sabía exactamente para qué ¿Chantaje? ¿Qué podía obtener a cambio?
Debía encontrar respuestas. Así fácilmente daría con una vía de escape y se las arreglaría para volver con su familia. No dudaba que juntos Jimin y Namjoon acabarían con Seojoon y, esta vez, sería para siempre.
—¿Entonces quieres a mis hijos? —preguntó sin poder aguantarlo más—. ¿Matarme? ¿Manipular a Jimin otra vez para dominar el mundo?
Seojoon arqueó una ceja ante lo exagerado que sonó todo eso. Negó con pereza. No, no buscaba eso en absoluto.
—Eso sería un tanto cliché, ¿no es así? —preguntó con una sonrisa. Se le notaba divertido por la situación—. Te secuestro, estás al borde de la muerte, Jimin me enfrenta y me derrota, lo que conlleva mi muerte. Se libera de alguna manera de los traumas que le ocasioné, dejando el pasado atrás, te salva y luego ustedes vivirán sus felices para siempre y blah, blah, blah.
Yoongi lo observó sin saber qué decir ante ello. Seojoon lucía algo amargado al respecto.
Si era sincero, sí, esperaba que eso sucediera. Incluso en ese futuro se veía con uno o dos hijos más.
—No, hay algo más. Debes ver más allá del panorama. Dime, Yoongi —pidió el mayor en un tono inquietante—. ¿Alguna vez te arrepentiste tanto de algo que quisieras volver el tiempo atrás? ¿Evitarlo a toda costa?
—Oh, como no tienes idea —aseguró con firmeza. Seojoon lo observó sin emoción, a la espera de que se explicara—. No algo, sino alguien y tengo una jodida lista.
El de cabellos verdes apretó sus labios con fuerza. No esperaba algo más si era sincero. No de alguien como Yoongi.
—Me refiero a algo importante, no a tus anteriores parejas.
—Para mí eso es importante, ojalá jamás me hubiera fijado en ellos —declaró con seriedad.
Seojoon lo miró de arriba abajo. No ocultó su desagrado en el proceso.
—Eres un doncel que proviene de una buena familia, ¿no es así?
—Defina buena familia.
—Dinero. Padre y madre en un matrimonio saludable. No preocupaciones por tu futuro. Comodidades. —Podía continuar, pero decidió dejarlo hasta ahí.
Yoongi asintió. Sí, básicamente su vida fue muy tranquila. No obstante, no tenía una venda en los ojos, sabía que allá afuera muchos no corrían con su misma suerte, tanto económica como familiar. Jimin era un claro ejemplo de ello, varias veces se detuvo a pensar si tan solo él hubiera tenido un poco de su suerte en la vida... ¿qué no hubiera logrado? Pero dejó esas consideraciones de lado, porque Jimin había logrado estabilidad en diversas áreas y le confesó varias veces ser feliz con su vida ahora y su alegría al saber que los mellizos tendrían un destino diferente al previsto.
Pero sabía que no siempre era así. Muchos no lograban salir de ello.
Se preguntaba si Seojoon era una de esas personas.
—Sí... mucho dinero —afirmó con cautela—. No me digas que pides una recompensa por mí —cuestionó con incredulidad. Si era así, estaba frito—. Olvídalo, mi hermano menor impedirá que la fortuna se vaya solo en mí.
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Entre villanos, amores inesperados y postres ➳ Jimsu
FanfictionA Jimin le habían enseñado que un villano no podía sentir amor, era simplemente imposible para ellos, por su misma naturaleza malévola. Sin embargo, Yoongi, junto con sus peculiaridades hacía que él cada vez más dejara de lado todo lo que alguna vez...