Capítulo 55

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—Sí, pa —dijo Yoongi mientras sostenía su celular con aburrimiento—. Ajá... Ajá. No. Que sí. —Rodó los ojos—. Lo estoy haciendo bien, soy décimo superior. Oye, como tengo una beca, ¿no puedo quedarme con el dinero que te hago ahorrar al mes?

Yoongi bufó ante la negativa. Jimin lo observaba embobado, simplemente se limitaba a contemplarlo. 

—Eres un maldito tacaño, pa. ¿Sabes? Si se me da la gana, abandono la universidad, que ya me tiene harto —bromeó—. ¿Que qué haré si lo hago? Sencillo, seré un mantenido, seré un dedicado amo de casa. —Jimin arqueó una ceja al escucharlo. No se imaginaba a Yoongi en ese rol—. ¿Que quién me mantendrá? Mi pareja, duh.

Lo siguiente que se escucharon fueron gritos. Yoongi tuvo que mantener su celular lejos de su oído, Jimin pudo escuchar perfectamente lo que dijo el señor Min, fue lo más cercano a recuperar su super audición.

—¿No te lo dije? —preguntó el doncel cuando los gritos acabaron—. ¡Estoy en una relación! —Se apartó del celular—. Mimi, ven, saluda a mi papá, quiere hablar contigo.

Jimin tragó en seco. Dudaba que en realidad quisiera solo "hablar". Amenazarlo suena más correcto.

No, aún no estaba listo. Su suegro lo enfrentó cuando él tenía poderes y era el malo del cuento, no dudaba que, si hubiera jugado con Yoongi y roto su corazón, Changsub lo hubiera matado con sus propias manos. No sabía cómo, pero estaba seguro de que lo hubiera hecho, después de todo, la familia Min tiene mucho dinero.

Y ahora ambos eran meros humanos...

De repente, sintió miedo.

Yoongi al verlo en su propio mundo, puso sus ojos en blanco. Ya en otro momento Jimin hablaría con su padre, porque sí o sí ese momento llegaría. Incluso si tuviera que llevarlo de los cabellos.

—¿Que qué hace aquí conmigo? —cuestionó cuando su padre fue con otra ronda de preguntas—. Las parejas pasan tiempo juntos —dijo con obviedad—. Ah... son las once de la noche... —Yoongi se olvidó de ese pequeño detalle—. Es que... uhm... bueno, hace tiempo que puedo cruzar la calle solo. Si sabes a lo que me refiero.

Los gritos volvieron y luego la llamada terminó.

Jimin ya supo lo que se avecinaba: nada bueno para él.

Al menos, podía decir que sí extrañó a su suegra y a su peculiar cuñado. Confiaba en que Sohee no permitiría que su suegro lo agrediera.

—Me va a matar.

Yoongi lo miró de lado y se extrañó por esa declaración.

—No lo creo. —Llevó su mano a su barbilla—. Vamos, él sabe que te quiero, de seguro solo te dará una que otra amenaza a tu integridad física como antes. Nada más.

—Eso no me hace sentir mejor...

El doncel sonrió levemente para darle un piquito, y otro más, y otro más hasta hartarse, pero nunca era suficiente.

—Si me tienes a tu lado, eres intocable.

—Si estoy a tu lado... siento que puedo hacer todo.

Yoongi dio un chillido muy agudo para luego besarlo como se debía, Jimin lo recibió gustoso, al parecer, sería otro día en el que pasaría la noche fuera de casa.

Aunque eso no evitó que dejara de preocuparse por su futuro encuentro con su suegro y no se equivocó al pensar que el señor Min lo odiaría desde el primer día como antes.

—Eres muy viejo para mi hijo —fue lo primero que dijo al conocerlo.

Jimin asintió. No se esperaba menos, la diferencia de edad de seis años no era la gran cosa, pero para su suegro sí.

Entre villanos, amores inesperados y postres ➳ JimsuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora