La Protegida [Proxys y tú]

Vol II □▪︎■▪︎□Capítulo 5■▪︎□▪︎■

Maratón 2/5

Y bien, a pesar de que la mujer que tanto amaron les haya hecho daño, ellos sabían que aún la amaban, con tanta locura con la que se amaron antes, sabiendo que debían olvidarla de alguna manera.

Cada día su entrenamiento los dejaba casi inconscientes, pero aún así querían sufrir, salieron igual de masoquistas que ella. Cada día recordaban su nombre, su voz, sus manos que pasaron por cada uno, y las noches que vivieron, sensaciones que no podían sacarse de la mente. Slender bien les dijo que la dejaran porque podrían sufrir ¿Pero que hacen don pendejos? Claro, amarla con locura y ahora tener que saber que ella los dejo, a ellos, y a su hijo.

Y bien, domingo, día en el que por suerte no tienen entrenamientos. Ese día planearon ir y convivir con su hijo, ya que lo que Kate les dijo si casi los trauma, no querían ser como sus padres lo fueron con ellos. Por lo que lo iban a intentar, pero no prometen nada.

Eran las 9 de la mañana, y al ser domingo pocos estaban despiertos, obvio Slender si estaba despierto, pues el no podía despertar tarde porque hace varias cosas. Pero los Proxies y su hijo estaban dormidos aún, era como antes, pero ahora el pequeño dormía con Toby, pues su cama era muy grande, ya saben, por los tic's, los cuales por cierto dejaron de molestarle desde ya hace un buen tiempo. Pero como decía, el niño estaba pegado a su padre mientras este estaba babeando, pues por alguna razón había demasiado calor, además, el entrenamiento le dejo con sed, pero no quería tomar agua, razón por la cual tal vez esta en ese estado.

Slenderman empezó a hacer el desayuno, pues si no lo hace el, no lo hace nadie, y esa era una cosa que el odiaba, ya que siempre le toca a él hacer todo, porque si alguien más lo hace le queman la casa.

Y mientras Slender estaba sirviendo, el pequeño bajo las escaleras saltando de un escalón a otro hasta quedar abajo. Cuando ya estuvo abajo fue con Slender y le ayudo en lo último que le faltaba, por esta razón Slender aún deja que el viva en ese lugar, porque le ayuda, no como otros. Cuando todo estuvo listo Slenderman para premiar al niño le dio un poco más de miel a sus panqueques, pues a él le gustaban.

El comió primero mientras los demás bajaban a comer, ellos siempre los domingos tardan en despertar, ya que Slender esos días les deja despertar tarde, por lo que por esa razón se tardan. El niño comía tranquilamente mientras en algunos momentos se manchaba de miel. Slender lo observaba por momentos para no incomodarlo, pues en ese niño lograba ver algo, algo le decía que el pequeño era un asesino tal cual sus padres, se imaginaba cómo sería el de grande, asesinando a gente sin parar y sin remordimientos.

Y hablando de remordimientos, el se quedó pensando en la madre del niño, ¿Porqué los dejo? Acaso será que ella no quería cargar con un hijo de asesinos, tal y como el suponía, pues no entendía que razones hubieron para que ella se fuera y los dejara solos. Si bien Slender nunca se enteró que "Ella" eras tú, pero siempre tuvo sus sospechas, pues antes "Ella" le dijo varias cosas, y entre esas que la mujer que los Proxies amaban no era lo que parecía, y que era la peor persona del mundo. Algo no lograba cuadrar, pues a pesar de que hablo pocas veces con ella, se notaba que algo ocultaba, pero no sabía que era.

La mente del ser alto se lleno de miles de ideas y teorías, teorías tan retorcidas como las de FNAF, tal y como esa teoría de que Michael en realidad es un robot, tremenda teoría tan descabellada ¿No?

Pero en lo que estaba, el pensaba y pensaba en el comportamiento de ambas, una era todo un cielo, mientras que la otra era casi un infierno, pero, algo le dejaba un mal sabor de boca, algo había escondido en todo eso, algo le decía que ninguna de las dos eran lo que aparentan, ambas decían ser algo que no era. Bien, el logro ver a la mujer que los Proxies amaban en televisión, mientras era reconocida como la mejor psiquiatra que se pueda conocer, ya que logró hacer que dos psicópatas se recuperarán, que un esquizofrénico pudiera vivir una vida normal, que un pirómano deje su vicio por el fuego entre más cosas que ella logró, posicionándose así en el top 5 mejores psiquiatras del mundo, y también volviéndose multimillonaria, logrando así tener una casa en cada país que visitaba, con un buen auto y miles de lujos. Sin duda logró su objetivo y logró quitar al "Doctor Mario Gutiérrez" de su puesto, dándose ella el lugar que este portaba, humillando su ego y dejadole en claro que ella podía hacer lo que se le diera la gana.