LA MISIÓN DE AMARTE [BORRADOR]

CAPÍTULO VEINTIOCHO

Elizabeth.

La voz de Lady Gaga llena el gimnasio de la central. Olivia entra modelando con su teléfono en la mano y cantando Born This Way.

Daniel que está detrás de mi, suelta una carcajada. Los chicos ríen al verla y Marlon se le une, cantando.

—Don't be a drag, just be a queen.

Bailan al ritmo de la música.

—No matter gay, straight, or bi', lesbian, transgender life. I'm on the right track, baby, I was born to survive. No matter Black, white or beige, chola, or Orient' made. I'm on the right track, baby, I was born to be brave

—Aún no es el mes del orgullo —dice Daniel, ayudándome con la mancuerna.

—¿Por qué debería haber un solo día del año para celebrar nuestra orientación, si tenemos 365 días? —le guiña un ojo, dando media vuelta.

Sonrío, estoy tan orgullosa de ella. Hace unos meses ella no era capaz de hacer esto, el baile, gritar que le gustan las mujeres y hombres.

—Está loca —ríe mi novio.

—Prefiero verla así a qué llorando por sus homófobicos padres.

—Cierto. Bueno, arriba —me palmea el brazo.

Después de el espectáculo de Olivia, todos volvemos a lo nuestro.

Caminamos por los pasillos del edificio de las habitaciones, intento ir al mío, pero Daniel me jala.

—¿Me vas a dejar sólito? No lo creo. —Me carga hasta llegar a su habitación.

—Daniel, tenemos una reunión.

—Lo sé —me mueve un poco, para que enrolle mis piernas en su cintura—. No nos tardaremos. No mucho.

Abre la puerta y entra cerrando con llave.

Me besa con pasión, me devora la boca, sus manos tocan, aprietan, pellizcan y golpean en ciertas partes, prendiéndome.

—Dani —gimoteo.

—¿Si, cielo?

—Vamos a llegar... ¡Ah!.. Tarde —jadeo.

—Nos deben esperar.

—No, no. —Lo empujo con un pie—. Debemos ser responsables.

—Pero...

—Pero nada.

Gruñe, bajándome.

—No me haré cargo de lo que haga hoy.

Sé a lo que se refiere, su humor.

...

—Es lo mejor, ¿no? —me pregunta Lexi.

Llegó hace dos días, sigue sin hablarme. No se la razón de porque lo hace. Ahora soy yo quien la ignora. Es mi amiga y la quiero, pero no le voy a rogar a nadie, jamás.

Por lo poco que sé es que el único que sabe la verdadera razón por la cual ella se comporta de tal manera es Marlon.

La ignoro, pasando por su lado. Daniel me está esperando en la oficina. Hace un par de días anunciamos la suma de quinientos mil  dolares a quien nos de información valiosa del paradero de la mafia italiana y dos millones de dolares a quien nos entregue a la dama y al don.

Entro a la oficina de Daniel, Peter y Harper están con él. Harper nos apoyó en esto, obviamente que Ian ni Aaron saben de esto.