𝐃𝐎 𝐘𝐎𝐔 𝐅𝐄𝐄𝐋 𝐋𝐎𝐕𝐄? | Enzo Fernández y Julian Álvarez

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- Inglaterra - 4 de marzo.
- 8:45 PM

- No, vos fuiste — Me río y le pego a Julian en el hombro mientras caminamos por la calle.

- ¡Mentira! Deja de mentir María — Se hace el boludo como si el no fue el que tiró medio tarro de pochoclos cuando apareció el espíritu en 3D en el cine. — Vos fuiste.

- Yo me muerdo el labio y me río — Anda, bobo.

- El pasa por encima de los hombros su brazo y yo paso el mío por su cintura, hace bastante frío. Julian besa mi cabeza — Te extrañaba ya...— Susurra.

- Yo también. — Me río nerviosa.

- Con... — Hace una pausa y traga saliva — ¿Con Enzo están juntos? ¿Son algo? — Se tensa un poco, se que le molesta muchísimo.

- No, somos amigos nomas. — Miento.

- Pero los amigos no...no tienen relaciones María. — Tensa la mandíbula. Yo agacho la cabeza con vergüenza  — Perdón, es que no me acostumbro...estuviste con mi amigo y nosotros estamos así y es raro.

- Si, ya se. — Lo miro — Es raro a veces, no levantarme con vos al lado. — Trago saliva y agacho la cabeza.

- Para mí también. — Me levanta la cara con la mano en mi mejilla para que lo mire — Pero podemos volver...no se, más adelante... — Acaricia mi mejilla. — Podemos ir viendo.

- Yo sonrío y él trata de besarme pero yo lo esquivo — Julian no...Estamos en la calle. — Le susurro.

- Pero nadie sabe que "no estamos más juntos" — Hace comillas con los dedos — Para la gente seguís siendo mi novia, y para mi... — Hace una pausa y traga saliva — Para mi también, va, mi corazón lo siente así...

- Mi pecho se hunde y no se que responder.

- No te sientas presionada a decir que vos también lo sentís así Mar...tranquila. — Me besa en la mejilla, sus labios están cálidos, y mi cara fría.

- Mi corazón se acelera, lo extrañé... — ¿Queres venir a comer a casa? — Pregunto amable.

- El sonríe — Obvio — Seguimos caminando un poco más y nos subimos al auto.

- El arranca y vamos para mi casa. Una vez que llegamos, mi hermano se queda helado al vernos juntos — ¿Volvieron? — Pregunta extrañado.

- Estamos agarrados de la mano, yo no respondo, Julian me mira y niega con la cabeza.

- Bueno...vamos a mi pieza. — Lo tironeo a Julian para que camine...no quiero que mi hermano se la mande.

- Entramos y yo cierro la puerta, Julian se sienta en la cama y mira a la mesita de luz, agarra la cadenita que el me regalo y la mira atentamente — Te la sacaste... — Susurra. Mi corazón se hunde.

- Me olvide de ponérmela hoy a la mañana, es que me bañe. — Miento...me la saque porque Enzo me dijo que no le gustaba que yo tuviera eso.

- Claro — La deja donde estaba.

- Yo me siento al lado de él — ¿Que queres hacer? — Pregunto.

- No se — Se ríe nervioso — Quiero estar con vos nomas. — Me mira a la boca y yo trago saliva nerviosa.

- Me acuesto en la cama de una plaza, ya que esa pieza la tengo desde que soy chica y jamás le cambie nada.

- Él se acuesta y quedamos enfrentados, uno muy cerca del otro, nerviosa mi respiración se acelera. Pone un mechón de pelo atrás de mi oreja y acaricia mi cara, sin decir nada. Yo solo lo miro, miro su cara, sus facciones, todo.