Capítulo 29: El juego de la verdad

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-Pregunta número cuatro: ¿Es cierto que buscaste al tío que me destrozó el coche? - el nivel estaba subiendo y yo no iba a dejar pasar la oportunidad de saberlo todo

El trago saliva y como yo, se dio cuenta que esto había dejado de ser un juego.

-Si - afirmó con rotundidad

-¿Para que Jason? - le dije mirándole a los ojos

-Por que iba a pagar por joderte el coche - me dijo con la misma sinceridad dibujada en sus ojos - y esa a sido la pregunta número cinco pequeña

-¿Qué? - le dije abriendo los ojos

-Has preguntado ¿no? No seas tramposa Emma... - me devolvió el guante sin pensarlo

-Vale, perfecto me quedan cinco preguntas - le dije vengativa

-Dispara - me dijo frotándose las manos

-Pregunta número seis: ¿le pegaste una paliza cuando lo encontraste? - le pregunté

-No - soltó - Yo no, uno de los míos si - me zampó tan tranquilo

No sabía si decirle que esto había dejado de gustarme, no el juego o su sinceridad si no saber que era un hombre impulsivo o violento.

-Pregunta número siete: ¿le dijiste a Drew que me tuviera por el bar para luego decirle que me echara? - esa no iba a gustarle y lo sabía

-Eso son dos preguntas pequeña - me soltó meloso

-De eso nada, es una única pregunta, responde - le dije saliendo airosa

Él acepto con la mirada

-Si, quería tenerte allí pero después supe que no quería que los demás pensasen que podían follarte sin más... - me dijo siendo más sincero de lo que yo imaginaba

-Como lo has hecho tu... - le solté

-Hemos follado los dos - me dijo acercándome a él - ¿no pequeña? - me dijo susurrándome en los labios sin llegar a besarme

Yo me aleje de lo que creía que era una maniobra de distracción por parte de un engatusador profesional como era Jason.

-Pregunta número ocho: ¿de que trata tu empresa?

Sabía que cerraba negocios en el reservado del bar, pero no sabía de que. Sabía que tenía que ganar dinero para beber champagne a diario pero quería saber más

-Vendo propiedades a gente con dinero - me dijo - Te quedan dos preguntas y me toca a mi pequeña

Sabía que tenía que ser precisa porque si no ganaría la partida

-Pregunta número nueve: ¿ibas a dejar que Drew me echara del bar? - tenía que responderme a eso para saber que no iba a dejarme tirada

-Emma, esto lo hablamos... - me dijo serenamente

-Contesta, nada de evasivas - le recordé mas tirante de lo que quería sonar

-Si - me soltó con franqueza

Genial, había sido una imbécil. Iba a dejarme sin trabajo sabiendo que lo necesitaba. Me iba a dejar tirada y yo acababa de acostarme con este tío. Muy bien Emma.

-Pregunta número diez: ¿te gusto algo más como para follar una noche?

Jódete Jason.

De repente el ambiente de la habitación había cambiado. Ahora era más denso, más difícil de respirar. Se hizo un silencio enorme, ambos nos mirábamos luchando, como siempre hacíamos.

-Mucho más - respondió con un susurro

¿Eso significaba que le gustaba en serio? ¿Volveríamos a follar y punto?... Ahora necesitaba veinte pregunta más... pero mi oportunidad se había agotado y ahora le tocaba a él jugar sus cartas.

La mafia y élDonde viven las historias. Descúbrelo ahora