Capítulo 58 : Lunes de confesión

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Me desperté a las seis, aun era temprano y me giré para abrazar a Jason, pero ya no estaba en la cama, sabía que estaría trabajando y desde lo de la redada de la policía estaba más tenso. Bajé las escaleras y toqué la puerta.

Abrí y estaba allí sentado con un semblante serio, pude ver un vaso lleno de un líquido ámbar y sabía que algo no iba bien.

-¿Que haces tan temprano despierta? - me preguntó haciéndome un hueco en sus piernas

-Me he girado en la cama y estaba sola, me gusta despertarme abrazada a ti - le confesé abrazándole 

-Perdona pequeña - me dijo agasajándome con mimos en la espalda

-¿Va todo bien? - le dije volviéndole a mirar

-Si, tranquila

-Jason, no quiero que me ocultes nada, no quiero que me digas que todo esta bien, porque si mi chico esta en la oficina bebiendo a las seis de la mañana algo no esta bien - le dije sonando más seria de lo que pretendía

-Han entrado en tu casa, la policía te tenía inmovilizada, te persiguen haciéndote fotos... no se como cuidarte y me estoy torturando por no llegar todo - me dijo mirando el vaso fijamente

-Eh, mírame - le giré la cara para que me mirara a mi - Estamos en casa a salvo contigo, la policía me soltó en cuanto se lo dijiste y no tienen nada contra ti ni contra Drew, estas haciéndolo bien cariño - le dije besándole

-No quiero perderte por mis mierdas - me dijo devolviéndome el beso

-No voy a irme por nada de eso, voy a irme si me despierto sola y te veo bebiendo aquí - le solté con una sonrisa amplia

Él me sonrió de vuelta y me cogió en brazos mientras me enrollaba en su cadera con mis piernas.

-Voy a encontrar el modo de sacarte de esta mierda ¿vale? quiero que vivas tranquila - nos besamos con profundidad - y ahora voy a llevarte a la cama para que te despiertes conmigo

Al momento estábamos en la cama los dos, yo con mi cabeza apoyada en su pecho.

-Tengo miedo - le dije más sincera que nunca

Me subió para mirarme a la cara

-¿De que? - me dijo con el ceño fruncido

-Jason la policía va detrás de tus negocios, detrás de Drew y de ti, ¿y si os cogen? ¿me voy a quedar sola? - le dije con una lágrima cayéndome por la cara

-Eh, eh pequeña, mírame, jamás me van a coger en nada ¿me oyes? no voy a dejarte sola - me dijo y me abrazo - olvídate de eso, esos hijos de puta no me van a alejar de ti

Al rato estábamos más tranquilos y vimos como la puerta de la habitación se abría.

-¿Puedo estar con vosotros? - Wyat tenia voz de dormido y en cuanto Jason lo oyó se le ablandó el corazón

-Ven aquí campeón - lo subió y quedó entre los dos

Estuvimos los tres hablando del colegio y de animales hasta que sonó el despertador que marcaba la hora de prepararse para empezar el lunes.

-Madison ¿crees que me da tiempo a ducharme? - le dije mientras cogía la ropa de Wyat

-Claro, vete a duchar y yo preparo a Wyat y desayuno con él

Le di un beso a esa mujer que era un ángel y corrí a la ducha. Cuando estaba casi lista para salir noté a mi chico entrar en el baño

-Joder pequeña - me soltó asomándose a la ducha

Entonces me giré y le sonreí, abrí las piernas y con la mano bajé hasta tocarme. Miré el bulto que presionaba el pantalón del pijama y sabía que estaba jugando sucio con él.

-¿Vas a venir a follarme o tengo que hacerlo yo sola? - le dije mientras él se mordía el labio inferior

-Deja de tocarte - me soltó cuando ya se estaba quitando el pijama para meterse en la ducha

Entró y me dio la vuelta y me puso contra el cristal, esa era su faceta posesiva y a mi me encantaba que la sacase cuando lo hacíamos, era su manera de demostrarme amor y pasión a partes iguales.

Me folló en aquella postura hasta que me dijo:

-Córrete para mi - mientras sus arremetidas cada vez era más pasionales

Dicho y echo, en un segundo me tenía corriéndome a gritos para él. Me giré aun intentando que la respiración se calmase y se acompasara. Miré hacía abajo y tenía la polla completamente dura, lo miré y baje.

-¿En serio pequeña? Joder.... - echó la cabeza hacía atrás y comencé con la tortura

Me la sacaba de la boca y me la metía hasta que me rozaba la garganta, cada vez con más ritmo, completamente mojada entre el agua y mi propia boca, y cada vez tenía más claro que aquello me llenaba de placer igual que a él, justo cuando me puso las manos en la cabeza para tener control sobre aquella mamada escuchamos la puerta del dormitorio acompañado del sonido de unos pasos pequeños. Era Wyat.

Jason abrió los ojos y en unos segundos estaba fuera de la ducha con una toalla mientras yo me reía en silencio en la ducha.

-¿Estáis aquí? - dijo Wyat mirándonos

-Ya salimos campeón - le dijo Jason llevándoselo fuera

En cuanto me quedé sola no pude evitar soltar alguna carcajada porque la cara de Jason la tenía aún en la retina. Salí y me sequé un poco el pelo y me maquillé solo un poco, a los diez minutos estaba vestida y lista para llevar al niño al colegio.

Bajé y Madison me acercó una manzana.

-No has desayunada nada querida - le sonreí y la volví a besar - cuando vuelva me tomo algo más

Le acepté la manzana y me metí en el coche donde me esperaban los dos. Cuando llegamos Wyat se estaba bajando cuando Jason me dijo:

-Voy a bajar con él

No me dio tiempo a preguntar que pasaba porque lo vi con el niño acercándose a la puerta y cuando llegaron Jason se bajó para quedar a la altura de Wyat y le dijo algo, el niño lo abrazó y Jason volvió al coche. Sabía que algo se tenían entre manos pero no quise saber que era. En cuanto subió al coche, arrancó en silencio hasta que me oyó:

-Casi nos pillan esta mañana ¿no?

Jason me miró muy serio.

-No me hace gracia que el niño te vea comiéndome la polla

-¡Jason! - le dije sin poder parar de reírme

-Me he preguntado que porque nos duchamos juntos

-¿En serio? - la risa ya era incontrolable

Estuvimos un rato así en el coche aunque a Jason no le hacía gracia.

-En cuanto lleguemos, pido que pongan un cerrojo, no quiero que el niño nos pille follando




La mafia y élDonde viven las historias. Descúbrelo ahora