Capítulo 91: Las últimas horas

108 6 0
                                    

El agua estaba caliente y había usado las sales de baño que había comprado, había descorchado el champagne y me había metido en la bañera

-¿Vienes a la bañera conmigo? - le dije desde la bañera

Unos segundos más tarde lo vi apoyado en el marco de la puerta, mirándome y sonriendo.

-¿Qué pasa? - le pregunté

-Que me gusta verte así - me dijo acercándose a la bañera

-¿Así como? - le pregunté curiosa

-Desnuda y en la bañera - me dijo dándome un beso mientras se metía

Sonreí por aquello que había dicho. Se acopló a mi cuerpo, y me ajusté para que estuviera cómodo. Me puse a hacerle cosquillas en el pelo y a darle besos en el cuello.

-Mañana tenemos el vuelo a las seis de la mañana - le informé entre arrumacos

-Entonces tendré que aprovechar hasta entonces con mi mujer - me dijo con los ojos cerrados

-¿Y ahora que Jason? - le pregunté curiosa

Él se irguió y se giró para verme y comprender aquello que le acababa de preguntar

-¿Cómo que ahora que? - dijo curioso

-Pues a que te vas a dedicar, que vas ha hacer en tu día a día - le amplié

Él me miró a los ojos, una mirada infinita, penetrante.

-Ahora toca vivir Emma - y yo con eso lo supe todo - ahora toca ir a cenar juntos, estar en casa sin llamadas a deshoras, dormir hasta tarde y levantarme follando contigo, ahora toca planear una boda ¿te parece poco?

Yo le sonreí con el alma y negué con la cabeza. Me parecía el mejor plan que podríamos tener.

-No te preocupes por el dinero, tenemos dinero para no trabajar nunca más - me dijo

-¿Qué? Yo quiero trabajar Jason

-¿Para que?  ahora quiero tenerte para mi, además dos niños van a darte más trabajo del que piensas - me dijo tocándome la tripa

-Jason, sabes que jamás te he pedido un centavo, no voy ha hacerlo ahora - le recordé

-Eso es otra de las cosas que tendremos que hablar, eres mi mujer, no voy a dejar que trabajes para cualquiera a cualquier precio, te quiero conmigo y con los niños, y el dinero es lo que menos me preocupa - sentenció

Me acerqué a él en la bañera y me puse encima suya, tenía el cuerpo caliente al igual que la entrepierna pero no quise cegarme con esa distracción, me subí en su cuerpo y el puso esa sonrisa malvada, me acerqué a sus labios lo máximo que pude para dejárselo claro

-Llevaba un día sin verte, te han pegado un tiro, estoy embarazada y quiero que me folles aquí, por eso no voy a discutir contigo sobre el dinero y el trabajo, así que vamos a dejarlo para cuando estemos en casa tranquilos - le dije en un tono muy bajito, con la voz ronca

-Vamos a follar en la bañera pequeña - me dijo clavándome en él

Ya no había nada más que hablar y yo estuve de acuerdo, queríamos más y eso es exactamente lo que íbamos ha hacer. A cada estocada salía más agua y no nos importaba lo más mínimo. Cada vez que me hundía en él, menos voluntad propia tenía, más extasiada estaba, más sexy me sentía.

-Joder Emma... - me dijo mirándome sin dejar de subirme y bajarme

-¿Qué? - le pregunté juguetona

-Que nunca te he follado en la bañera y voy a correrme de lo que me esta poniendo esto - me dijo mientras yo cogía el mando y me puse a frotarme

La mafia y élDonde viven las historias. Descúbrelo ahora