La mafia y él

Capítulo 48: Al borde de la asfixia

Sonó el despertador y yo me acurruqué al cuerpo de Jason, siempre estaba tan cómoda y sentía tanta paz en su pecho que siempre lo hacía cuando estábamos juntos.

Él comenzó a ronronear y a darme besos en el pelo.

-Buenos días pequeña - me dijo aún con la voz adormilado

Yo me enrosqué en su pierna y le acaricié en el pecho. No quería levantarme de allí por nada del mundo.

-¿Mami sois novios? - de repente me quité de encima de Jason. Había olvidado que no estábamos solos y acabábamos de hacernos carantoñas junto al niño.

-Buenos días campeón - le dijo Jason tan tranquilo - anoche le pedí a mamá si quería ser mi novia y me dijo que si

El niño saltó en la cama y le chocó los cinco a Jason

-¡Por fin sois novios! - dijo el niño con alegría

-Me ha costado convencerla, sin tu ayuda hubiera sido imposible campeón - le contestó Jason y ví como el ego de mi hermano volaba por la habitación

-Pero bueno ¿mis dos chicos estaban compinchados o que?- Le hice cosquillas al niño y este reía como hacía tiempo no lo oía.

Desayunamos juntos incluido Madison que ya era una más.

Jason estaba especialmente atento y cariñoso conmigo, parecía que se había relajado y me daba mimos.

-Cariño nos vamos al cole - le dije a Jason desde fuera de la oficina

-Dadme los dos un beso antes de iros - nos dijo sonriendo

Wyat se tiró a sus brazos.

-Diviértete y aprende muchas cosas - le dijo devolviéndole el beso

Yo me acerque y Jason se levantó, me dio la mano y me acercó a él.

-Te amo pequeña

Le di un beso y él se dejó.

Wyat se quedó mirándonos y Jason se río

-Cuida de mamá que no se le acerqué ningún chico guapo - chocaron de nuevo los cinco

- ¡Jason! No le digas eso al niño...- le recriminé

-Yo vigilo Jason - y se fue con la mochila puesta

Iba a salir de la oficina y me volví cuando supe que el niño estaba ya saliendo de casa

-Cariño anoche disfruté mucho - le dije con poca vergüenza

Y salí de allí sin dejar que me contestara.

Me monté en el coche y noté el móvil vibrar. Era Jason: "Disfruté yo más saboreándote". Me reí por dentro. Amaba a ese hombre.

Cuando volví supe que algo no iba bien. Noté a Madison muy nerviosa.

En cuanto entré supe que pasaba algo. Oía gritos que provenían de la oficina.

-Madison, ¿Qué pasa? - le pregunté acercándome a ella preocupada

-Querida ha enloquecido. A entrado el señor Drew y desde que llegó no se oye otra cosa que no sean gritos - me dijo horrorizada

-Voy a ver que pasa - le dije encaminándome hacia la oficina

-¡No! ¡No entres ahí! No sabes como puede reaccionar cuando esta así - me dijo muy angustiada

No le hice el mínimo caso a su advertencia y directamente entre, sin llamar.

-¡¡Vete a la mierda Drew!! - entré con urgencia y vi a Jason levantando a Drew del suelo. Lo tenía agarrado por la camisa, en la zona del cuello y lo tenía pegado a la pared