- ¡Luces tan hermosa Anna! - dice Leani con sus ojos brillantes, y las manos juntas, la miró a través del espejo.- ¿Tu crees?-. Me siento diferente, nunca me había visto asi.
- Claro que si cariño, tu ya eras hermosa, pero hoy luces más hermosa - responde acercándose a mi. Me doy la vuelta para quedar frente a ella, me da un beso en la mejilla, luego me sonrie.
Llevo un vestido rojo, pero un rojo oscuro como el color de la sangre. Es pegado a mi cuerpo, de tirantes delgados, tiene una abertura en la peirna derecha, desde mi muslo hasta abajo dejando ver toda mi piel pecosa. El escote es discreto, pero la espalda es escotada por completo. Leani me hizo un recogido a un lado de mi cabello, mis rizos se miran definidos, incluso podía verlo brillar y verse más rojo. Lo acomodo a un lado de mi hombro para que pudiera verse mi escote. Debo admitir que me sentía un poco desnuda, estaba tan ajustado el vestido que mis pezones de marcaban, no llevaba sosten.
Maquillaje sutil. Dejaba ver mis pecas, Leani me dijo que Edmund lo prefería así. Llevaba un labial rojo como mi vestido.
Toc toc toc escuchamos los golpes en mi puerta. Adelante, dije saliendo del baño con Leani.
Edmund.
Nuestras miradas se cruzaron. El me miró de pies a cabeza, y sentí un nerviosismo curioso. Porque sentí que con su mirada desnudaba cada parte de mi. Todo mi cuerpo se tenso, trague saliva pesadamente. Su mirada subió a mis ojos, pum pum pum los golpes de mi corazón eran pesados y fuertes, como si quisiera salirse de mi pecho, sentía las orejas calientes.
Yo también lo observé. Su barba parecía más limpia y recortada, el traje negro que lleva luce perfecto con su cabello oscuro. También lleva una corbata roja haciendo juego con mi vestido.
- Los dejo solos - dijo Leani, luego pasa a la par de Edmund, le aprieta el hombro, sin decir nada, nos deja solos. Paso la lengua por mis labios porque los siento secos como mi garganta, la forma en que me mira despierta todos mis sentidos.
El se acerca a mí. Tengo que elevar un poco mi rostro para verlo, es tan alto que me parece intimidante. Su aroma a cítricos y madera inunda mis fosas nasales. Entreabro los labios.
- Te ves tan hermosa Anna, eres preciosa - dice con esa voz ronca y profunda que activa todo mi ser. El, pasa la yema de sus dedos por mi mejilla haciendo círculos con el dedo anular. Cierro los ojos a su tacto, me cuesta respirar porque el roba todo mi aliento.
De pronto, recorre con sus dedos desde mi mejilla, pasando por mi clavícula, recorriendo mi brazos hasta llegar a mi mano izquierda y yo no puedo dejar de erizarme, además siento cosquillas en mi parte baja del abdomen ¿Qué me pasa? ¿Porqué me siento así con él?
- Mirame- dice mientras atrapa mi mano. Abro los ojos, tiene en ceño fruncido, sus cejas casi se topan. Levanta mi mano y la besa, sus labios tibios sobre mí piel es la locura.
Queremos beso en la boca.
- ¿Estás lista? - pregunta.
Asiento. No soy capaz de encontrar mi voz.
- Te aprendiste todo... la historia... hago un esfuerzo enorme por hablar.
- Si.
- Bien, Anna no voy a separarme de ti. Relajate, las personas que están haya abajo son mis colegas, amigos y clientes cercanos. No son muchos, solo quiero que conozcas personas y que ellos te conozcan - Vuelvo a asentir.
- Antes de bajar, quiero darte algo - dice, suelta mi mano y yo siento que ya la necesito sobre mi de nuevo. Se mete ua mano al bolsillo de su pantalón, saca una cajita azul oscuro pequeña. - Esto es para ti, quiero que te lo pongas ahora - dice con esa voz de mando que me gusta.
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ANNA ES MÍA(completa)
RomanceAnna fue preparada durante toda su vida para ser "la esposa perfecta" le enseñaron todo lo que una esposa debería ser, según Madame Dorothea, la dueña de la mansión llamada "Esposas complacientes" un lugar donde los hombres podían llegar a "escoger"...