ANNA ES MÍA(completa)

41- Familia

*Holi, ayer subí capítulo por si abriste este primero, hay uno antes para que leas :)

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Anna.

Volvimos a hacer el amor con Edmund. Nos perdimos entre caricias, besos y palabras hermosas. Edmund no dejaba de decirme cuanto me amaba. Vivimos una noche mágica, cada día lo amo más.

Tres días después de nuestra reconciliación, me mude de nuevo a la mansión. Leani, Roke y Zion me recibieron con mucho amor. Me sentía en casa, me sentía feliz. La mansión estaba decorada con temática navideña, el gran árbol en la sala principal con luces preciosas y arreglos me encantaron. En la mansión con las chicas y las sabias jamás celebrábamos navidad. Desde que me casé con Edmund, todo se siente como la primera vez ¡Lo amo!

Lo amamos, Annita.

Bailábamos al ritmo de la canción que elegí para Edmund. Nuestro lenguaje de amor, incluía mucho la música. Así qué como nuestra tradición de bailar en nuestra habitación, elegí una canción que escuche mucho este tiempo lejos de él. Tuve tanto tiempo para escuchar la música que Edmund me dedicaba, así como para descubrir por mi misma. Admito que la música vieja es mi zona de confort, así que aquí estábamos bailando al ritmo de Celine Dion "Because you loved me" y ciertamente, porque Edmund me amo de esta manera, no podría ser más feliz.

Mi mejilla reposaba pegada al pecho de Edmund, derrame una lágrima. No podía contener mi amor por él.

- ¿Cariño? ¿Porqué lloras?- preguntó un poco alarmado. Me despegue de su pecho y nuestras miradas se encontraron. El limpio mis lágrimas gentilmente.

- Te amo demasiado mi amor, te amo tanto que no me cabe en el pecho. Nunca quiero volver a separarme de ti. Confío en ti, en nuestro amor - confesé segura de ello. Edmund sonrío, y me beso delicadamente.

- Voy a cuidarte siempre Anna,eres mi prioridad, te amo con todo lo que soy. Jamás volveremos a estar lejos-. Le creía. Nada nos podría separar, ahora que sabía toda la verdad, conocía todas las partes oscuras de Edmund y todas las buenas. Elegí amarlo, él me eligió a mi. Soy muy afortunada. Un pequeño dolor recorrió mi pierna, no pude evitarlo e hice una mueca.

- Es mejor que te sientes, no esfuerces mucho tu pierna. Bailamos tres minutos satisfactorios- dijo Edmund dándome una sonrisa, pero noté su tensión no se cuanto tiempo más se culpará por mi accidente, supongo que con el tiempo se perdonará.
Nos sentamos en la cama. Me sentía en paz. Este era mi hogar,mi lugar,al fin pertenecía a algún lugar, a alguien. Amaba a Edmund, quería mucho a Zion, y Leani era especial para mí, incluso Roke. Todos eran mi familia, al fin tenía un hogar y podía comenzar uno con Edmund.

Wow Anna banana... ¿hijos?

Oh.

- ¿En que piensas?- me había quedado pensando en esa revelación. No podía creer que estaba pensando en un hijo. Con Edmund jamás habíamos hablado de eso, ni de broma. Él tenia una hija que no era de él,pero que cuidada. No sabía si el quería tener un hijo conmigo. Pff ni siquiera yo sabía si podía ser madre, nunca tuve una y no sabría si podría amar a mi bebé, se me erizo la piel.

- ¿Anna?

Suspiré. Le sonreí a Edmund.

- Edmund... Ummm... tú... ¿Quieres tener hijos?- las palabras salieron con mucho miedo. Los ojos de Edmund escanearon mi rostro. Mordí mi labio inferior, noté la sorpresa en sus ojos. Llevd mi mano al collar de ciervo que Edmund me habia regalado, jamás me lo quitaba. Edmund y yo llevábamos casados casi diez meses, se que es muy pronto, pero algo en mi se encendió al pensar en una familia.

- Tú ¿Quieres hijos?- me devolvió la pregunta, noté que le tembló la voz. Inseguro.

- Nunca lo pensé. No se si tengo el instinto maternal, no tuve papás. No tuve mamá, pero la idea de tener una familia me emociona de una manera que no puedo explicar. Pero si tú no quieres, está bien yo puedo aceptarlo- dije un poquito sofocada. Trague grueso saliva.

Edmund llevo su mano a mi mejilla, su toque cálido me hizo estremecer la piel. Con él me sentía segura.

- Nada me haría más feliz que tener hijos contigo mi amor, eres todo lo que deseo, y serás la mamá más linda de todas, solo necesitas amor y un poco de guía, nos tienes a todos, no estarías sola.

Mi estómago se revolvió. Hace meses creí que para lo único que era buena,era para complacer a mi esposo en lo sexual, ser una esclava de él, y ahora estoy considerando tener una familia con Edmund por gusto mío.

Los tiempos cambian Annita, los tiempos cambian...

Edmund

Miraba a Anna dormir en mis brazos, tan tranquila, tan llena de paz. Después de hacer el amor tres veces, nos merecíamos dormir. Pero yo no he podido dormir. La confesión de Anna de querer hijos me tomo por sorpresa. Tantas cosas han pasado entre ella y yo, tantas cosas me detenían a ser plenamente feliz con ella. Pero haber confesado todo lo de Thea, me ha liberado. Aún tengo muchas cosas que resolver.

Jiang me odia, Sao cree que soy su papá. Casi no la he visto, ni he pasado tiempo con ella, le envío regalos y le paso su mensualidad. Shao desea que yo sea su papá, y la quiero, la quiero mucho, es una niña dulce y tierna pero cada vez que la veo, veo a Thea, veo rasgos de otro hombre, veo engaño y veo compasión. Soy una basura, Sao no tiene la culpa de lo loca que era su madre. Si Sao supiera que no soy su papá mataría la última esperanza de la niña. Además, Stella y Jiang no me permitieran verla, no me creyeran. Hace tiempo quise renunciar a Sao ¿ahora? No lo sé. Tengo un conflicto, la custodia la tienen los Chan, si decido pelearla probablemente pidan un test de ADN, y cuando descubran que no es mi hija todo se irá a la mierda.

Suspiré profundamente. El fantasma de Thea y todas las jodidas consecuencias no me dejan todavía en paz. Tengo que tomar una decisión, decir la verdad y destrozar el corazón de Sao u ocultarlo y seguirla viendo por momentos cortos.

Anna se removió un poco, se libero de mis brazos y se dio la vuelta quedando boca abajo,admire sus lunares. Amaba verlos, como trazaban su fina piel blanca como la nieve. Deje un beso en su hombro,el dulce aroma de su perfume golpeo todo mi ser.

Definitivamente Anna será la madre de mis hijos, puedo ver la vida plena con ella. Tengo aún una cosa por confesarle, tengo que decirle que encontré a su madre, no había tenido el valor de decírselo en todos estos meses porque quería hacerlo cara a cara. No se como lo tomará,ni que pensará pero ella merece encontrar a su familia.

Mi celular vibró, lo había dejado en la mesita de noche. Lo tomé, era un correo privado.

Querido Edmund:

Estas cordialmente invitado a la cena de nuevo año en mi casa, te adjunto la fecha, la dirección y la reglas de etiqueta. Confirma tu asistencia con un si. Estas invitado tu y una persona más. Atentamente Frédéric Zhava.

Fin de año era en dos días. La fecha de la cena era tres días después. Enviando mi respuesta, esperaba con ansias esa cena. Era la primera aparición con Anna de mi brazo, quería que todos admiraran a mi hermosa esposa, a la futura madre de mis hijos.