MARATÓN (1/3)

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Dualidad:
Existencia de dos caracteres o fenómenos distintos en una misma persona o en un mismo estado de cosas:

~Esa dualidad entre el hombre apacible y el que se supone agresivo generará numerosas situaciones cómicas.~

•••••••

Un dolor profundo me pincho la cabeza. No podía abrir muy bien los ojos. Sentía todo mi cuerpo entumecido, escuchaba voces a mi alrededor no entendía lo que decían. Parpadee varias veces cuando pude abrir los ojos, volví a cerrarlos y luego los abrí de nuevo con la visión un poco borrosa.

– ¡Anna, mi amor! ¡Estás despierta! ¿Como te sientes cariño? ¿Me escuchas?–. La voz de Edmund me guió hacia él y poco a poco se me aclaro la visión.

Edmund tomó mi rostro entre sus manos. Pero yo seguía desorientada y mareada, me dolia la cabeza mucho.

– Mirame cariño ¿Como te sientes?–. Pregunto. Pero no pude contestarle porque ni yo sabía.

– Edmund voy a pedirte que me des permiso, tengo que chequearla. Porfavor sal de la habitación–. Alguien hablo en el fondo, una voz madura. Me sentía tan desubicada. No recordaba nada. De pronto todo fue silencio.

– Hola Anna, soy el doctor William. Voy a hacerte un par de preguntas ¿okay?. Recuerdas que paso antes de estar aquí– pregunto.

– Uhm...

Piensa Anna, ordena tu cabeza.

Recuerdo estar con Zion en casa riéndonos, luego a Edmund y discutimos un poco. Uhm... piensa Anna, piensa– me decía a mi misma.

La inauguración. El restaurante. Lucas. La angustia se apoderó de mi, su aroma asqueroso, sus palabras hirientes. Sus toques asquerosos.

"Voy hacer sufrir a Edmund, va a llorar lagrimas de sangre"

– Anna. Mirama, estas a salvo. Dime ¿Te acuerdas que pasó?– pregunto. Por fin pude mirarlo. Mis lágrimas corrían por mis mejillas.

– Estaba en el restaurante de los señores Freders... Uhm, fui al baño y... no recuerdo. Lo último que recuerdo es haberme desmayado–. Mentí.

Edmund

– Cálmate hijo. William es bueno en lo que hace, todo saldrá bien –. Dijo Leani. Pero no podía calmarme. Iba a matar a alguien, puso en peligro la vida de Anna, mi mujer. Dios mio, me asuste tanto cuando la encontraron en el baño desmayada, golpeada y sangrando. Casi me muero del impacto al verla así.

Corrí con ella en brazos al consultorio de  William. Arnold me dijo que mirarían las cámaras y ver si hay alguna señal de lo que pasó, llamarían a la policía. Yo no tenía tiempo de pensar en nada solo en el bienestar de Anna.

– Lo que le paso a Anna fue planeado. Es imposible que alguien la haya atacado así por así. Es tan ilógico y menos en el evento en el que estaban–. Zion tenía razón. Es ilógico, nada tiene sentido tuvo que ser alguien de adentro pero ¿Quien? Anna tenia marcas de dedos en su brazo, estuvo forcejeando con alguien. Maldita sea. Ese hijo de puta va a pagar. Lo juro.

Vi venir a William.

– ¿Como esta? –. Juro que él miedo de perderla me quema los huesos. No podría vivir sin ella, Anna es la luz de mi vida, todo mi cuerpo duele solo de pensarlo.

– Tranquilo, esta bien. Solo tiene una pequeña contusión, nada grave. No hay rastro de violencia sexual, es decir no hubo penetración. Sólo algunos moretones en brazos y el golpe en su cabeza. Necesita descansar por las próximas dos semanas y medicamentos–. Dijo William. El alma me volvió al cuerpo, el tan solo pensar que mi hermosa haya sido violentada por otro hombre me dan ganas de quemarlo todo. Maldito hijo de puta.

ANNA ES MÍA(completa)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora