¿ y si?

LIGHT

Esto era muy malo para mi, si L traía a otro investigador al caso tendría que pelear intelectualmente con dos detectives y no con uno solo, si de por si ya era bastante molesto mantener a L alejado de mis asuntos, ahora con dos seria casi imposible.

Desde que L había llegado a la universidad, a su universidad el muy entrometido no había dejado de ser una molestia continua, L lo tenia como sospechoso, pero según el detective solo en un cinco porciento mas o menos, por lo tanto había considerado que si bien no estaba a salvo del todo, podía mantener a L lejos de la verdad mientras descubría el nombre de su rival, pero ahora las cosas se complicaban cada vez mas, por una parte me quería reír en la cara de Ryuzaki, ya que este estaba pidiendo ayuda a otro investigador, por lo que no podía dar con la verdad por si solo, pero al mismo tiempo sentía como las paredes se me cerraban cada vez mas.

Esa mañana que me encontraba en el cuartel antes de ir a la universidad, L se encontraba de muy buen humor, parecía que había vuelto a la vida, cosa que era una molestia, sin duda la llegada de ese investigador de quinta lo habia puesto bastante feliz aunque no entendía bien el porque ya que L no parecía el tipo de persona que genera algún tipo de contacto amistoso con nadie y allí se encontraba el detective comiendo pasteles y helados feliz de la vida ignorando el echo de que lo observaba con odio puro, de echo me había ignorado todo el día como si no existiese.

En el transcurso del día no había podido dejar de pensar en el detective ese que había llamado L ni cuando llegaría, algo me decía que llegaría entre hoy y mañana en la noche por lo vuelos, pero tampoco sabia desde donde venia mi segundo contrincante, de ¿ Estados Unidos, Japón, china, Londres?, no tenia ni idea, además por si fuera poco ese molesto shinigami no dejaba de hablarme en clases, y a todas horas, haciendo preguntas estúpidas y pidiendo manzanas como un molesto perro, si la libreta hubiese caído sin un shinigami de regalo yo seria el hombre mas feliz de todo el mundo, pero no, aparentemente era como tener una cajita feliz con el regalo de un shinigami de por medio.

Ya en casa, me dispuso a seguir usando la Death Note ,pues no podía dejar de usarla para no generar sospechas, mientras escribía nombre tras nombre desinteresadamente, también pensaba en cual seria el plan de L.

Mientras tanto Ryuk comía manzanas en la cama  como casi todos los dias, mientras me veía trabajar.