¿ y si?

LIGHT

Han pasado varias semanas desde que envié la muestra de cabello al FBI, primero había pensado en enviarla pais por pais y esperar que alguno de ellos tuviera una muestra que concordara con la que envié, sin embargo lo medite, este método tardaría mucho tiempo y después de todo solo había encontrado una muestra, un solo y mísero cabello de Virgilio por lo que tenia que acelerar el proceso pero que al mismo tiempo pudiera arrojar un resultado, muchos no lo saben pero por lo general las muestras de ADN no duran mucho, debido a que es fácil contaminarlas y no se pueden sacar replicas de ellas, por lo general en las escenas del crimen se encuentran muchas otras muestras no solo cabello también sangre, huellas y otros fluidos, por lo que la cantidad de ADN es mayor  y se puede ampliar la base de investigación y enviar muchas muestras a muchas otras arreas, mientras que yo solo contaba con un fino cabello rubio por lo que tenia como máximo quizás dos intentos no podía enviárselo a cada área del mundo tenia que pensarlo muy bien, esperaba que al menos el FBI lograra dar con algún indicio, mínimo el lugar de nacimiento, y que una parte del ADN pudiera ser enviada a esa region para buscar coincidencias, pero eso estaba llevando bastante tiempo, había tenido que llamar al FBI directamente, hacerme pasar por L y hacerles creer que aquella muestra de cabello tenia algo que ver con el caso Kira, con un posible sospechoso, gracias a Dios la noticia de la muerte del verdadero L no había salido a la luz publica y el FBI no tenia ni idea de esto, había llamado la noche siguiente al encontrar el cabello, cuando no había nadie en el complejo, de ese modo nadie me cuestionaría el porque quería enviar un cabello como evidencia del caso a la central del FBI.

Pero aun no tenia nada, había tenido que llamar varias veces con tal de insistir en los análisis, pero aun no había nada, mientras caminaba hacia el edificio del cuartel por donde siempre lo hacia, alguien grito mi nombre insistentemente, así que voltee a ver quien era.

- ¡Light Yagami espérame!, ¡tengo algo que decirte!- gritaba, corría hacia mi, era una mujer, pero no la reconocía pero parecía que ella a mi si.

-Hola Light, gracias por detenerte- dijo al llegar hasta mi y detenerse a retomar el aliento, alzo la cabeza- ¿Qué ya no me reconoces?, ¿no te acuerdas de mi?- me cuestiono por lo bajo.

Estaba haciendo memoria, hasta que la recordé era Nozomi, la chica que había llamado para ir a Espaciolandia, no la había visto en años, ni siquiera había pensado en ella, después de ese día, no la volví a llamar y solo de vez en cuando nos saludábamos por los pasillos de la facultad, había sido un medio para un fin, una distracción que resulto de utilidad, pero nada de esto explicaba el porque después de tantos años me había buscado.

-Claro que te recuerdo, ¿Cómo has estado Nozomi? - fingí lo mejor que pude felicidad, y por lo visto ella se lo creyó porque sonrió como una total idiota, le había alegrado que la recordara.

-Quería contarte algo Light, hay alguien quien me a estado haciendo varias preguntas sobre nuestra, ultima cita- anuncio haciendo énfasis en "ultima cita".

¿Quién podía estar preguntando sobre mi?, ¿sobre el secuestro del autobús?, había pasado hace mas de cuatro años, como es que alguien se acordaría de ese tema después de tanto tiempo, entonces caí en la cuenta, Virgilio.

Lleve a Nozomi hasta un lugar alejado del cuartel, esperando que nadie mas no haya visto ni oído para mi fortuna era un día silencioso, no había nadie cerca, la lleve a un parque algo descuidado que estaba cercano, fue allí donde empezamos a hablar.

-Entonces cuéntame ¿ que sucede Nozomi?- enfatice en su nombre porque a ella parecía hacerla muy feliz que lo recordase, además que fingí un interés romántico en ella, después de todo, sabia que yo le había gustado y posiblemente le seguía gustando, si no ¿Por qué venir hasta aquí a contarme algo?, solo podía significar que seguía interesada en mi, podía sacarle provecho a ello como lo había echo la ultima vez.

Nozomi me conto, que un hombre joven, "bastante apuesto", supongo que eso lo dijo para intentar darme celos, pero a mi no me interesaban sus malditos gustos personales, le había echo preguntas sobre el secuestro del autobús, también le había echo preguntas sobre mi y por el hombre que había resultado ser del FBI, además por si fuera poco me conto que le había dicho a este "investigador" que el hombre del FBI me había mostrado su identificación oficial. ¡Quería ahorcarla allí mismo!, ¡lanzarla desde un maldito puente!, ¡como podía haber sido tan tonta!, pero, tenia que comportarme parecer lo mas conmovido y preocupado por ella, ¡por aquella estúpida!, le pedí que me describiera a detalle la apariencia del investigador que la había citado para hablar del pasado, la descripción que me dio concordaba, solo podía ser Virgilio, no había otro, ese maldito estaba un paso por delante de mi, y por si fuese poco, si mataba a Nozomi, lo mas probable es que solo me viese mas culpable y el se daría cuenta, estaba atrapado, otra vez, un contratiempo tras otro, maldita sea todo estaba mal, tuve que hacer que la idiota de Nozomi me prometiera no contarle al investigador absolutamente nada de nuestro encuentro, ni a nadie mas, después de eso nos despedimos, ella parecía feliz de verme, yo no podía ser mas desdichado, lo único bueno de todo esto es que la inocente había corrido hasta mi para contarme esto, algo que Virgilio no sabia, tenia este punto de ventaja, una vez que me deshaga de Virgilio, asesinare a Nozomi Takahashi, pues incluso le había pedido su nombre completo y ella ni siquiera pregunto el porque, solo me lo dio, fue su error.

Aquella noche, igual me quede hasta tarde en el cuartel, completamente solo, y volví a llamar al FBI para acelerar el proceso de la muestra, pensé que me dirían que faltaban aun varios días, pero no fue así, al parecer estaban a punto de llamarme para darme el informe de los resultados, por lo visto el FBI no tenia ningún resultado que concordase en su extensa base de datos de sospechosos y ex criminales, así como de victimas, pero habían logrado determinar el lugar de origen de la muestra, provenía de Rusia, del lado oeste del pais, me preguntaron si quería enviar la muestra para buscar coincidencias en esa region, hacia falta menos, era obvio, así que acepte de inmediato, enviarían la muestra esa misma mañana a la central de Moscu, las coincidencias podían tardar un par de días en encontrarse, y me dieron por ultimo el numero telefónico de la central de Moscu, junto con el numero del director en el área de ADN del complejo, después colgué.

Al menos pude respirar un poco, estaba mas cerca de dar con su nombre, sin embargo tardarían varios días en darme algún maldito resultado, y en estos días era posible que Virgilio lograse encontrar alguna prueba contra mi, alguna prueba física, solo podía rezar que no lo lograse, o estaría acabado.