¿ y si?

RYUK

Light había estado de muy buen humor todo el día incluso había tratado cordialmente a Misa, pero la felicidad le duro poco, le duro hasta que llego al cuartel.

No había podido matar a Virgilio y el no entendía el porque, se le veía bastante molesto y malhumorado, intento fingir que no lo estaba pero era demasiado evidente, nadie en el cuartel sabia el porque excepto yo.

Virgilio no tenia ni idea de que su tiempo se estaba acabando, había llegado con una bolsa de jugosas manzanas y me las había entregado personalmente, me había preguntado el como me encontraba y que tal estuvo mi día, al resto de los investigadores también los saludaba del mismo modo, todos los días, se interesaba por la conversación de todos, incluyendo la de Matsuda, ese día me sentía particularmente desmotivado por todo, salvo por el, de algún modo u otro su muerte seria una perdida para todos incluyéndome, nunca pensé en tener alguna emoción por algún humano, me recordé todo el día que podía evitar la muerte de Virgilio si escribía el nombre de Light en mi libreta, y estuve a punto de hacerlo, estaba en la azotea, era una tarde tranquila el sol se iba escondiendo detrás del horizonte, todo parecía en calma, en silencio, a excepción de  mi mente la cual se encontraba en un péndulo, saque mi libreta y mi pluma, estuve muy cerca de escribir el nombre de Light, de ese modo podía evitar la perdida del único humano que se gano mi respeto y quien del mismo modo me trato como un ser libre y pensante, no como una mascota, si no como alguien que existe y que piensa por si mismo, pero al final cerré la libreta sin escribir nada, el precio a tomar era demasiado alto, Virgilio viviría pero yo moriría y la idea de morir no me sentaba nada bien, al final no pude hacerlo.

Entonces entro Virgilio, me saludo cordialmente, y me pregunto que hacia allí, en la azotea, solo, me tarde en contestar, su cabello rubio se movía por el viento y los últimos rayos del sol lo hacían ver como una especie de ángel caído, que triste seria su final, salí de mis pensamientos y le conteste que solo estaba viendo el cenit, nada mas, el se paro a mi lado y lo observamos juntos.

- Es hermoso- menciono sonriendo, Virgilio tenia facilidad para maravillarse por lo simple- hace años pensé que no volvería a ver un atardecer, pero aquí estoy, cuando vuelva a casa, veré de nuevo un atardecer pero esta vez será al lado de mis niños.- sonrió, no se había percatado de lo que había dicho, lo había dicho sin mas, sin pensarlo, feliz de pensarlo, de imaginarlo, sin recaer en mi, para su fortuna no le contaría esto a Light después de todo, solo soy un espectador o eso trataba.

Después de un rato entramos de nuevo al complejo cuando los últimos rayos de sol se metieron y dejaron al mundo con una capa oscura y algunas luces en el horizonte, aun podía escribir el nombre en la libreta, pero había tomado mi decisión, lo único que podía hacer era esperar y ver que sucedía.

Esa noche Light salió apresurado del cuartel, fue directo al departamento que compartía junto con Misa Amane, para la fortuna de Light pero no para la de Virgilio, Misa ya había llegado, Light la tomo con fuerza la llevo hasta la cocina y le mostro la fotografía de Virgilio, le pidió que le diera su nombre de inmediato, ella no dudo, ni se inmuto.

-Yuri Ivanov Lawliet, ese es su nombre- dijo feliz de ayudar al quien consideraba su gran amor.

Light sonrió y escribió en su Death Note o la de Rem que había sacado de la arena, el nombre de Yuri completo pero con algunas anotaciones mas que no pude terminar de leer, su muerte seria mañana.

Light se puso pensativo, pensé que recordaría a quien le había pertenecido el apellido Lawliet, pensé que recordaría a L, pensé que su muerte así como su nombre le había importado lo suficiente como para recordarlo y aunque dudo un momento, al final no le presto demasiada atención a sus sospechas, cerro la libreta y fue con Misa a abrir una botella de Champagne para celebrar el haber matado a su ultimo obstáculo.

Lo lamento de verdad Yuri, tu tiempo se termino.