The Omega's Pet [JiCheol]

48; Thinking about you

Se sentía demasiado bien el sentimiento de estar enamorado, de ser correspondido, de amar y ser amado por esa persona especial; Jihoon sentía cosquillear su estómago constantemente por cada vez que se miraban, cada vez que se tomaban de las manos o rozaban una con la otra, cada vez que se sonreían, cada vez que se besaban, cada vez que se hablaban y cada vez que sus feromonas atraían al otro.

Cada momento era especial para los dos, pero luego de ese increíble día que pasaron en el departamento del omega, conversando, besándose y amándose en cada rincón, había algo importante que resolver.

—Esta semana ven como siempre— comenzó a hablar Jihoon mientras estaban sentados en el comedor cenando —si tenemos que salir o algo, vas a tener que usar tu collar. Y sobre anunciar nuestra relación, primero quiero que mi papá hable contigo, es el único que me importa que apruebe esto.

—De acuerdo— asintió —¿tengo que decirle algo en especial?

—No lo creo, seguro él hablará demasiado, así que sólo sé tu mismo.

—Bien— tomó la mano de Jihoon y besó el dorso, haciéndolo sonreír.

Jihoon miró el reloj de su teléfono, dándose cuenta que eran las 8:48 de la noche —ya no quiero que te vayas tan tarde, podría ser peligroso.

—No pasa nada, pero si te deja más tranquilo que me vaya temprano, está bien— le dijo con una sonrisa.

El omega asintió y luego suspiró —no quiero que te vayas— hizo un puchero en los labios.

Seungcheol se inclinó y lo besó en un corto beso —me tengo que ir, sino será un poco sospechoso.

—Se supone que eres mi mascota, y si quiero puedo ordenarte que te quedes— dijo con un tono coqueto.

—Lo que usted ordene, amo, yo solo obedezco.

Ambos rieron y luego se besaron. Pero de cualquier forma, Seungcheol terminó marchándose temprano para no preocupar al omega. Caminó hasta la estación del tren y luego abordó el que lo llevaba cerca de su vecindario, el camino estaba siendo aburrido, aunque llevaba una enorme sonrisa y sus pensamientos eran invadidos por Jihoon, se estaba haciendo lento el recorrido, así que sacó su teléfono y envío un mensaje de texto.

🍒: ¿Qué haces?

🤍: Pensando en ti 💘
🤍: Y oliéndote, mi cama solo huele a ti 🥰

🍒: Como me encantaría estar en tu cama.
🍒: Nos estaríamos besando.
🍒: Mucho.

🤍: 🙈🙈
🤍: ¿Ya estás lejos?
🤍: Podrías regresar 🤭

🍒: Ojalá pudiera.
🍒: Ya estoy lejos ☹️

🤍: Qué lástima.
🤍: Lo habríamos pasado como anoche 🥺

🍒: Lo sé ☹️
🍒: Pero al menos tú tienes mi aroma en tu cama, yo voy a llegar a una fría y con mi aroma ☹️

🤍: 😢💔
🤍: Pasarás una noche fría sin mí.

🍒: Lo sé, no tienes que recordármelo ☹️
🍒: Ya voy a bajar.
🍒: Te aviso cuando llegue.

🤍: Sí, cuídate.

Seungcheol bajó del tren cuando estuvo en la estación, caminó un par de calles antes de detenerse en un paradero y esperar un bus, todavía era lo suficientemente temprano para que pasara y lo acercara a su casa. En el camino fue tatareando alguna canción, se sentía tan tranquilo y enamorado, que un repertorio de canciones románticas de repente apareció en su cabeza.

Se sintió aliviado cuando llegó al edificio, necesitaba un largo sueño reparador, pues con Jihoon, los descansos fueron muy breves; afortunadamente se había duchado antes de marcharse de la casa del omega, así que simplemente podía desnudarse y lanzarse a la cama para dormir de inmediato. Subió las escaleras mirando el piso, caminó por el pasillo hasta que levantó la mirada y se encontró con cierto omega en la puerta de su departamento, este corrió y se lanzó a sus brazos, dándole un largo beso en los labios.

—Lo pensé bien y quise pasar la noche contigo— dijo con una amplia sonrisa.

Seungcheol sonrió ampliamente —me alegra que estes aquí, precioso— unió sus labios y se separaron para entrar al departamento.

En cuanto la puerta se cerró, sus labios volvieron a unirse en un cálido y dulce beso que los hizo caminar hasta la habitación del alfa, donde se despojaron de sus ropas, ayudándose mutuamente y tratando de separar sus labios lo menos posible; cayeron en la cama entre brazos del contrario, continuando ese beso sin importar nada más que amarse. Seungcheol estaba bajo el cuerpo del bajito, ya los dos se encontraban desnudos, así que sus pieles se erizaban con cada roce que tenían; Jihoon fue bajando lentamente por el torso del mayor, besando la piel con una calmada pasión, sin dejar escapar ni un centímetro de piel entre cada beso.

Terminó llegando a su entrepierna, su pene aún estaba un poco flácido y parecía un juguete de hule que lentamente se endurecía; engulló el miembro por completo, pero no logró meter todo a su boca, aún sin estar completamente erecto, era difícil que le cupiera. Comenzó a mover su cabeza de arriba a abajo con rapidez, para que el miembro se endureciera más rápido, saboreando el pre semen que escurría del glande.

—Mgh mgh, mgh...— gemía Jihoon ahogadamente, excitando al alfa.

Constantemente Seungcheol tragaba en seco, disfrutando de lo bien que el omega movía su lengua alrededor de su pene, parecía todo un experto, aunque a veces era un poco torpe en sus movimientos. El alfa acarició los cabellos del rubio, controlándose para no obligarlo a tomar un ritmo, ni tampoco para embestir su linda boquita, la cual estaba emitiendo sonidos tan eróticos, que en poco tiempo se descontrolaría.

—Agh... Ji... detente ah...— pidió el alfa, pero parecía que Jihoon no quería obedecerlo. El omega había aumentado un poco más el ritmo, y su lengua comenzó a moverse con más insistencia en el glande, así que eso provocó un gran estremecimiento en el alfa, quien terminó moviendo un poco sus caderas hacia arriba para follar la boca del contrario —ahh... me voy... ah sí ah... me voy a correr— advirtió, pero Jihoon no se detuvo.

En ese momento el alfa no lo resistió más, tomó la cabeza de Jihoon con ambas manos por su cabello, y lo embistió con rapidez antes de correrse en su boca, disparando los chorros de semen directo a su garganta. El omega dio un par de arcadas, y por poco el nudo crecía en el interior de su boca, pero Seungcheol fue rápido en tirar de él y sacar su pene antes de anudarlo.

Jihoon sonrió mientras saboreaba el semen en su boca, y recogía algunos restos que chorrearon por sus labios, mientras el resto del semen continuaba escurriendo del glande.

Seungcheol suspiró y dejó caer su espalda en la cama —joder, ¿cómo aprendiste a mover tu lengua así?

—Joshua me enseñó— dijo subiendo a la cama, específicamente sobre Seungcheol, haciendo que su trasero rozara con el pene y nudo del alfa.

La expresión del mayor hizo reír a Jihoon —¿y cómo te enseñó?— preguntó preocupado.

Jihoon se inclinó de manera sensual y murmuró sobre sus labios —metió su lengua en mi boca— la piel de Seungcheol se erizó por la forma en la que había hablado, pero no por lo que había dicho. Un breve silencio se instaló entre los dos, hasta que Jihoon río y se sentó erguido sobre el regazo del alfa, meneándose ligeramente para que su trasero se deslizara en su miembro —en realidad me dio una cereza, me dijo que no me dejaría tranquilo hasta que lograra hacer un nudo en el tallo con mi lengua, y lo hice hasta que lo conseguí— sonrió con un poco de inocencia.

—Oh...— expresó con alivio —fue una excelente manera de mejorar— dijo con una sonrisa coqueta, la cual Jihoon besó con intensidad.

En realidad ambos estaban un poco agotados, habían pasado la mayor parte del día amándose, así que ahora sólo querían dormir en los brazos del contrario, por lo que Seungcheol terminó comiéndole el pene a Jihoon de la misma manera, chupándole el miembro hasta que consiguió exprimir toda su esencia y ambos se acomodaron a dormir de cucharita.