Desnúdame el Alma (FreenBecky G!P )

Libro 1 : Capitulo Final

Darle una sorpresa a Freen en su oficina me pareció una buena idea, pero no estaba dispuesta a hacerlo sin algo de ayuda. Primero conseguí la colaboración de Jenny. Me caía muy bien parecía honrada y muy sincera cualidades que yo respetaba de personas además estaba comprometida con Alejandro. Me enteré después de empezar a quedarme a dormir en casa de Freen una mañana los vimos salir agarrados de las manos y Freen me dijo que se casaban en otoño.

Me tranquilizo que Jenny no se pusiera celosa porque su prometido me llevara en coche por Londres creo que le agradaba que Freen tuviese novia me di cuenta de que sus empleados realmente se preocupan por ella y eso también me gustaba.

— Hola Jenny, soy Becky

— Hola Becky ¿Por que no la has llamando al móvil?
— Chica lista, Jenny siempre estaba al tanto de la logística.

— Estaba pensando en sorprenderla con el almuerzo.
¿Puedes revisar su agenda por mi?

Escuché pasar paginas y luego me puso en espera.

— Hoy está en la oficina. Ocupada con conferencias telefónicas y esas cosas, pero no tiene citas en su agenda.

— Gracias Jenny. Se lo habría preguntado a Sofía pero Freen la tiene por el altavoz y me escucha cuando llamo así que no puedo darle una sorpresa. Podrías decirle a Sofía que no le lleve el almuerzo hoy a Freen que de eso me encargo yo.

Jenny rio.

— Ya mismo se lo digo — Me dejo en espera y un rato después me dijo que ya se lo había dicho a Sofía.

— Gracias por tu ayuda estaré ahí en menos de una hora.

Colgamos y llame a la tienda para pedir comida y luego  a Alejandro para que me llevara. Yo había terminado por hoy los exámenes así que tenía el día libre.

Mi teléfono sonó con un mensaje de Alejandro me estaba esperando fuera, así que tome mis cosas y me fui. Alejandro me ayudó con la comida y utilizo la tarjeta de crédito de la empresa para pagarlo todo

— Bueno Freen cree que Sofía le va a llevar el almuerzo— dijo Alejandro.

— ¿Siempre ha sido tan controladora, Alejandro — Pregunte una vez que nos pusimos en camino.

— No — Alejandro negó con la cabeza — Desde que Freen salió de la guerra cambió.

— He visto sus cicatrices — dije

— ¿Te a contado lo qué pasó en Afganistán? — Alejandro me miro por el retrovisor.

— No  — Contesté sabia que Alejandro no me daría mas información de el pasado de Freen y que estaría tan lejos de conocerlo como ella estaba del mío.

Jenny nos ayudó y Sofía me condujo hasta la oficina de Freen entre y cerré la puerta ella estaba al teléfono.

Mi guapísima chica estaba ocupada, pero aun así me tendió la mano. Deje la comida en su escritorio y fui hacia ella. Me rodeó con el brazo y me empujó hacia su regazo, todavía atendiendo su llamada de negocios.

— Está bien lo se,no es negociable.

Freen continuo hablando y yo empecé a sacar el almuerzo. Movió la mano hacia arriba hasta mi nuca y la masajeó. Era una sensación divina que me tocara incluso cuando era más que evidente que estaba ocupada.

Puse su comida en un plato y luego desenvolví la mía le di un bocado mientras me masajeaba el cuello. Cualquier chica podría acostumbrarse a esto en serio,
Freen era muy cariñosa y me encantaba que quisiera tocarme todo el tiempo. Casi me había comido todo cuando termino la llamada.