Desnúdame el Alma (FreenBecky G!P )

Libro 4 : Capitulo 1

- Dentro de la mente de Becky -

Freen me llevo escaleras arriba sosteniéndome entre sus brazos, su aroma despertaba mucho deseo en mi.

Estaba un poco nerviosa por la noche de bodas, hacía 2 semanas que no teníamos sexo y echaba de menos tener intimidad.

La expresión que mostraba su cara era diferente, mientras miraba sus hermosos rasgos me pregunté que estaría pasando por su cabeza.

Que sentía mi esposa.

No me preocupaba por que sabía que me lo contaría todo, Freen no tenía ningún problema en decirme lo que le pasaba tuve que sonreír al recordar algunas locuras que dijo cuando me conoció.

— ¿Qué oculta esa sonrisa tan sexy? — Me preguntó no se mostraba cansada a pesar de haber subido conmigo en sus brazos, el interior de la casa era increíble pero tenía el presentimiento de ver nada más el dormitorio durante el futuro.

— Estaba pensando en lo encantadora que resultas ser señorita Sarocha.

Ella me brindó una pícara sonrisa.

— Es que estoy pensando en nosotras dos desnudas en nuestra noche de bodas, señorita Becky Sarocha me muero por ti.

Me reí ante la queja de sexo y yo también me moría por estar con ella pero pensaba que había sido buena prueba para las dos además al estar las dos sin sexo tanto tiempo esta noche iba a ser más intensa, además pensaba recompensarla por todo el tiempo perdido.

— Por supuesto desnudas y noche de bodas van de la misma mano.

— ¿ Alguna otra cosa que haga que mi pene se endurezca más mi vida?

— Oh, si con solo recordar lo increíble que fue ver a mi esposa hermosa al final del pasillo mientras caminaba al altar — La bese — Pienso en cómo recompensarte por tu larga espera conmigo durante 2 semanas.

Freen subió con rapidez los últimos escalones que quedaban.

Le acaricie la mejilla para sentir el contacto de su piel, cuando llegamos al frente de nuestra habitación.

— Ya hemos llegado mi amor algo que agradezco mucho — Dijo.

Freen me dejó con cuidado en el suelo, pero se mantuvo acariciandome la mano siempre estaba tocándome siempre necesitaba hacerlo. Freen hacía justo lo que necesitaba para recomponer esa parte de mi que estaba rota.

¿Y ahora?

Ahora ya no me sentía rota, sino entera era una mujer distinta y eso se lo agradecía a ella.

— Si ya veo esto es muy bonito.

Estudié la estadía fijándome en unas cuantas llamitas en vasos de cristal de todas formas y tamaños iluminaban las paredes y los muebles. Yo observaba todo lo que me rodeaba.

— Todavía no puedo creer que hayas comprado esta casa — Dije mirándola — Me encanta, Freen.

No podía evitar pensar en otras personas que habían venido aquí antes que nosotras y lo habían hecho en esta preciosa habitación.

¿Habrían disfrutado tanto cómo yo y Freen lo íbamos a hacer ahora?

Aprecie el tamaño de la cama que estaba en el centro de la habitación, las cortinas eran suaves.

— Te creo.... Y te amo con toda mi alma — La voz de Freen rompió el silencio.

Me apartó el velo y luego me levantó el pelo sentí sus suaves labios en mi nuca, era una caricia firme cómo si quisiera marcarme, percibí el roce caliente de su lengua en mi cuello que me hizo estremecer. Freen apenas ya me había tocado y ya estaba hecha fuego desesperada por sus caricias y ella era muy consciente de eso.