Su chofer

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Pov Poche.

Día lunes, de vuelta a mis labores. Confieso que no he podido quitarme la sonrisa del rostro, y tampoco me puedo sacar a Daniela de la cabeza, estoy pensando seriamente cobrarle renta porque solo vive en mi mente. Mi hermana e incluso Lonnie me han dicho que me veo más feliz y radiante que nunca, yo me veo en el espejo y lo confirmo pero se que ella es el motivo de mi estado de ánimo.

Terminé de tomar café y unas rebanadas de pan tostado con queso crema. Me bañé, me arregle y luego decidí irme caminando hacia mi trabajo.

La gente me veía como que si estuviera loca, pero no señores y señoras no estoy loca, únicamente estoy enamorada.

-Poche-me sobresalte al ser sacada abruptamente de mis pensamientos.

Gire mi rostro y me di cuenta que era Mario en su motocicleta.

-Mario me asustaste-Le dije con la mano en el pecho y la respiración agitada.

-Excuse moi, chérie. (Discúlpame, cariño) no fue mi intención asustarte.

-Pues lo hiciste-le respondí.

Hubo un silencio incómodo entre ambos.

-Dejame llevarte a tu trabajo, S'il vous plait.

-Merci, pero no creo que sea buena idea-Le dije pensando en las veces que Calle me vio con Mario y las cosas no resultaron nada bien.

-¿Tanto me odias? ¿Qué te hice para que me odies tanto?, No contestas mis llamadas, mis mensajes, ya no me buscas, ¿En serio tan mal amigo fui?-él me reprochó y confieso que me hizo sentir muy mal, porque él en ningún momento ha sido un mal amigo conmigo.

-No digas eso, S'il vous plait. Yo te quiero demasiado, eres mi mejor amigo, mi hermano...pero estoy en una relación y a mi novia no le gusta verme contigo porque ella está al tanto de tus sentimientos hacia a mí.

-¿O sea que una extraña que apenas conoces vale mucho más que nuestra amistad de años?

-No es que valga más, si no que el cariño es diferente, Mario. Me duele que me digas estas cosas.

-Y a mi me duele que me hayas votado de tu vida como un trapo viejo e inservible-noté el dolor en sus palabras, si antes me sentía mal ahora me siento peor al verlo llorar por mí.

-Te extraño, Poche. Tú sabes muy bien que después de la muerte de Johan tu te convertiste en mi mejor amiga, en mi lugar seguro-él limpio sus lágrimas.

Me acerqué a él y le brinde un abrazo para consolarlo, odiaba verlo tan mal y por mi culpa.

-Tienes razón, Mario. Pardonne-moi por haber sido tan mala amiga en estos días, pero espero que me comprendas que si me aleje de ti no es porque no te quiero y porque no me importas, al contrario lo hice pensando en que sería lo mejor tomar esa distancia para ti y para mí.

-Te entiendo, pero no quiero dejar de ser tu amigo, respeto tu relación, me costó entender cómo la preferíste a ella antes que a mí, pero al final lo hice y no te hago reclamos, solo te pido que volvamos a ser los mejores amigos de siempre.

-Esta bien, Mario. Seguimos siendo amigos, pero ya se me está haciendo tarde y si llego tarde mi jefa me va a matar-Le dije.

El sujeto mi brazo y me sonrió.

-Deja que te lleve.

-Mi novia no necesita un chófer y si fuera así yo misma se lo contrato.

Abrí mis ojos como platos al ver a Calle quien estaba subida en su auto viéndonos desde la ventana. Ella estacionó su automóvil y bajo rápidamente de él.

Cóseme Donde viven las historias. Descúbrelo ahora